Usted está aquí: lunes 9 de abril de 2007 Espectáculos "La bohemia es un fantasma que hallamos los tres cuando improvisamos"

David Haro, Marcial Alejandro y Rafael Mendoza ofrecieron un concierto en Zacatecas

"La bohemia es un fantasma que hallamos los tres cuando improvisamos"

Síntesis de 12 años de trayectoria, el espectáculo reunió temas de En vivo desde Los Angeles

ARTURO CRUZ BARCENAS ENVIADO

Ampliar la imagen David Haro, Rafael Mendoza y Marcial Alejandro, durante su concierto en el 21 Festival Cultural Zacatecas Foto: La Jornada Zacatecas

Ampliar la imagen David Haro, Rafael Mendoza y Marcial Alejandro, durante su concierto en el 21 Festival Cultural Zacatecas Foto: La Jornada Zacatecas

Ampliar la imagen David Haro, Rafael Mendoza y Marcial Alejandro, durante su concierto en el 21 Festival Cultural Zacatecas Foto: La Jornada Zacatecas

Zacatecas, 8 de abril. "Fue un concierto profundo y sentimental", comentó el cantautor Marcial Alejandro, en su camerino del teatro Fernando Calderón, luego de llevar al público por los caminos sinuosos del amor y el desamor, de la poesía y el canto que busca una frase radical, pero no estuvo solo, sino con sus dos compañeros de la vida y la música, Rafael Mendoza y David Haro, quienes ofrecieron su espectáculo Bohemia, síntesis de una trayectoria profesional compartida de 12 años, en el 21 Festival Cultural Zacatecas.

Son 12 años y hasta ahora los tres grabaron un disco, titulado En vivo desde Los Angeles, con 17 de los temas que interpretan, siempre como si fuera un jazz, pues arman el repertorio conforme sienten la noche, la tarde, el día. A las siete de la noche entraron al escenario del foro tradicional y abrió Rafael Mendoza con su Todo va bien, primera rola también del citado álbum. La bohemia bajo el cielo lopezvelardiano.

Haro dijo las cosas a su modo: "Sabes que soy igual, que me deleita el vino..." "Morir debe ser fatal." Pan de muerto, una canción en la que Mendoza amasa el amor. Haro respondió con Un corazón de pan. Marcial cambió el rumbo al cantar: "dos caderas frente a frente no podrán hablar más que de amor".

Mendoza dialogó con un blues. Marcial: "Apareciste ante mis ojos después de no sé cuanto tiempo", pero primero fuiste amor y luego olvido. "Ya estamos en la sección vernácula". Haro: "¡Qué me lleve la tristeza!", en un préstamo entre amigos, pues la rola es de Marcial.

Así siguió la noche y el tono fue fino, sentimental. Entre el público, algunos por momentos no pudieron contener las ganas y exclamaron sus dolores y alegrías. Hubo momentos de regocijo, como cuando Marcial cambió una palabra: "Que habiendo tantas potrancas, sólo por la mía relincho"; quitó esta y pronunció "rebuzno".

El piano de Genoveva, un poema de López Velarde, musicalizado por Haro. Un crescendo con Flor de pitaya, de Marcial, que fue una de las más aplaudidas. Una pregunta de Mendoza: ¿Qué me pasa?, cuya música se mezcló con Oye, cómo va. Sabrosona... Para no alejarse, Haro sentenció: "Si morir es dormir la noche es la muerte..." ¡Ay, cañón!

Tres guitarras, tres voces, tres almas, tres amigos y tres vidas para y por la bohemia. Los tres buscaron frases determinantes, definitivas. Pero en corto, Mendoza acotó: ¿Qué hacer cuando Lupita D'Alessio dice: 'Regrésame mi cambio porque te di de más'. ¿Qué hacer?"

¿Quién parará esta locura?, hasta la súplica de Oremos para dar luz a los poetas. En total, 26 canciones. En el camerino, Mendoza y Marcial dialogaron y se definieron como compositores, sin más, porque "mucho ayuda el que no es trova", en una broma de amigos.

En entrevista, David Haro dijo que "la bohemia es un fantasma que tenemos que encontrar los tres juntos y todo el tiempo tenemos que estar improvisando. Emocionalmente tenemos que estar de vena para crear esa magia. Para la bohemia y sus ritmos se requiere salud, dinero y amor". Para él, la bohemia no es un trabajo. "Venimos con mucho gusto a darlo todo y a integrarnos. La bohemia es cantar cada quien sus canciones".

Añadió que aunque los festivales culturales son un espacio de trabajo para artistas como ellos, es muy difícil que puedan convivir. "Cada quien tiene su horario y podemos salir a cotorrear, que sería padre. Este es el segundo año que estamos en este festival."

-¿Cómo están Marcial y Rafael?

-Anímicamente de la patada -soltó una carcajada-. No, están bien. Ayer probamos mezcal y un tequila especial. Marcial se fue a la cantina Las Quince Letras. Llegó y estaba aún cerrado. Estuvo tocando la puerta y levantaron la persiana.

El nuevo disco de Haro se llama A esta hora, en el que " la ciudad es protagonista, con un concepto trovadoresco, pero con fuerte influencia del jazz. Son 13 canciones, con la idea de la ciudad existencial". Prepara otro disco, que saldrá este 2007.

Marcial Alejandro expuso: "La bohemia está vivita y coleando, gozando de cabal salud. Estamos estrenando el disco En vivo desde Los Angeles. Eran 27 canciones, pero sólo grabamos 17. Para donde voltees en Zacatecas, hay cultura. Las mujeres... ¡quítalo de mi boca!, pero ayer un paisano nos decía que qué bárbaro, qué pastelitos.

"Para mí esto es trabajo y me da un susto presentarme en un teatro como éste, más que enfrentarme a la hoja en blanco."

Mendoza: "Tenemos cerca de 12 años de trabajar juntos. El disco En vivo... se tardó, pero a veces las cosas no salen cuando te las planteas, sino cuando son necesarias. Hubo dos tentativas de hacer un álbum, pero el que ahora salió está muy rico y es variado. El proyecto es cantar los temas de este disco en varias ciudades del país.

"La canción mexicana está boyante y sin duda hay cosas buenas en varios niveles, pero lo importante es que hay ganas de cantar. Hay unos jóvenes muy buenos, la verdad", concluyó.

 
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