Usted está aquí: domingo 4 de marzo de 2007 Política México buscará nexo edificante con AL, incluidos Cuba y Venezuela: Calderón

Se efectuaría en 2009, aquí, la cumbre del Grupo de Río; logró secretaría pro tempore

México buscará nexo edificante con AL, incluidos Cuba y Venezuela: Calderón

"El presidente" Fox está en su derecho de hacer declaraciones, señala el michoacano

CLAUDIA HERRERA BELTRAN ENVIADA

Ampliar la imagen Los mandatarios de Chile, Brasil y México, en el último día de actividades de la cumbre del Grupo de Río, que se llevó a cabo en Georgetown, Guyana Foto: Reuters

Georgetown, Guyana, 3 de marzo. Sin querer entrar en controversia con su antecesor, el presidente Felipe Calderón señaló que el ex mandatario está en su derecho de hacer declaraciones, que además han sido respetuosas hacia su persona. Y declaró tener profundo aprecio por quien llamó, en un lapsus, el "presidente Vicente Fox".

Sin la sombra del venezolano Hugo Chávez, quien de última hora canceló su participación en la cumbre del Grupo de Río, Calderón tuvo un escenario más cómodo y consiguió la próxima secretaría pro tempore del organismo, con lo que organizará el encuentro de jefes de Estado de 2009 o 2010. Pero la figura de Fox lo siguió hasta este país caribeño.

La jornada de la decimonovena cumbre comenzó con la noticia de la ausencia de Chávez. El canciller Nicolás Maduro acudió en lugar del mandatario venezolano, debido a que éste se encontraba "afónico", confirmó la delegación de ese país.

Ese hecho impidió que los mandatarios mexicano y venezolano se vieran las caras después del diferendo verbal que tuvieron en semanas recientes, cuando Calderón criticó las políticas de nacionalización de empresas en Venezuela y Bolivia, lo cual provocó una crítica de Chávez.

De todos modos, el presidente mexicano ya tenía preparado el terreno ante la llegada del venezolano. Por la mañana desayunó con sus homólogos de Brasil, Luiz Inacio Lula da Silva, y de Chile, Michelle Bachelet, con lo cual envió señales de buscar establecer una alianza con un sector de la izquierda latinoamericana.

Inclusive, después comentó que cumplió uno de sus compromisos para los primeros 100 días de gobierno, que consiste en fortalecer y revitalizar los vínculos con el llamado "ABC": Argentina, Brasil y Chile.

Así comenzó el día en un foro en el que llamaron la atención las mínimas medidas de seguridad. En el Centro Internacional de Conferencias de este país, uno de los más pobres de la región, no había arcos detectores de metales y casi todos los asistentes tenían paso libre a los pasillos por donde circulaban los siete jefes de Estado y sus comitivas, así como los miembros de las otras 13 delegaciones invitadas.

Al frente, pero en la orilla

Después del desayuno con Bachelet, Lula y el ministro de Relaciones Exteriores de Argentina, Jorge Taiana, el michoacano posó con sus pares para la fotografía oficial. Si bien fue ubicado en la primera fila, estaba en la orilla derecha y con una actitud discreta.

A diferencia de la chilena, que ocupaba el lugar central en la escalinata -donde había papeles con los nombres de los países- y era llamada por sus colegas, "Bachelet, Bachelet", para que se integrara al grupo, el mexicano no conversó en ese momento con sus homólogos y optó por hacerlo brevemente con algunos reporteros mexicanos. Luego, como el resto de los mandatarios, sonrió y levantó la mano derecha para saludar cuando los fotógrafos accionaron sus cámaras.

De ahí los gobernantes se trasladaron al salón de plenos, donde Calderón consiguió su primer triunfo diplomático tangible en esta campaña que emprendió para recuperar el liderazgo en América Latina, que fue la secretaría pro tempore.

En este foro no sólo lo persiguieron las consecuencias de la maltrecha política exterior heredada del foxismo, sino la propia figura del ex mandatario.

Durante la sesión, el dominicano Leonel Fernández -el nuevo secretario pro tempore- reconoció las aportaciones de los países grandes de la región. Y de México lo único que mencionó fue el Plan Puebla-Panamá, promovido por el foxismo.

Defiende derecho de Fox a opinar

Luego, en conferencia de prensa, se preguntó al presidente mexicano su opinión en torno del activismo del guanajuatense, quien en días recientes ha hecho diversas declaraciones, rompiendo así la máxima que recomienda silencio a los ex gobernantes.

El jefe del Ejecutivo no quiso entrar en conflicto con su antecesor. "Tengo profundo respeto y aprecio por el presidente Vicente Fox. Se ha conducido con respeto hacia mi persona y hacia los mexicanos, lo cual aprecio", resaltó.

Dijo que mientras él está asumiendo la Presidencia de la República con unos primeros 100 días de gobierno muy intensos, el guanajuatense inicia nuevas actividades en los ámbitos profesional y privado, lo que ciertamente, admitió, son materia de atención de la opinión pública. Pero lo defendió al señalar que hace esas declaraciones en pleno ejercicio de sus derechos.

Luego se concentró en describir los "muy fructíferos" resultados de su primera participación en este foro latinoamericano.

México no está en el dilema de ser aliado o rival de Estados Unidos

Al parecer intentó establecer una tregua con el eje que conforman Venezuela, Bolivia, Nicaragua, Cuba y Ecuador como parte de la Alternativa Bolivariana para América (Alba).

Si bien Chávez no asistió a la cumbre, el nicaragüense Daniel Ortega mandó un mensaje de dicho grupo a Calderón. Ante la prensa dijo esperar que "México vea hacia el sur, camine hacia el sur, se integre y se una".

Después el mandatario mexicano, en tono conciliador ante la prensa, incluyó en su discurso a Cuba, cuando señaló que buscará establecer relaciones constructivas con todos los países de América Latina, sin excepción, incluidos Venezuela y la isla. Hasta reconoció la conducción respetuosa de la delegación venezolana.

Así, dio una postura ambigua sobre la Alba cuando aseveró que son bienvenidas las iniciativas que contribuyan a la unidad e integración de los latinoamericanos, siempre y cuando no sean excluyentes de unos pueblos y no enfaticen las divergencias, sino las coincidencias.

Aunque se mostró conciliador, también reivindicó otros foros, como el Grupo de Río, la cumbre iberoamericana y la Organización de Estados Americanos, en la que también participa Estados Unidos.

Incluso comentó que el Grupo de Río, más que nacer como organización "antiamericana", surge de una preocupación legítima de países "americanos" en favor de la democratización del continente.

A nueve días de la visita del presidente de Estados Unidos, George W. Bush, a México, negó que haya dilema para los mexicanos en cuanto a que sean aliados o rivales de esa nación.

Negó, inclusive, que sus homólogos hayan buscado plantear algún tema al estadunidense, aprovechando que ambos se entrevistarán el próximo 13 de marzo.

 
Compartir la nota:

Puede compartir la nota con otros lectores usando los servicios de del.icio.us, Fresqui y menéame, o puede conocer si existe algún blog que esté haciendo referencia a la misma a través de Technorati.