Comienza la temporada 31 de El lago de los cisnes en la isleta

Dragones, cisnes y princesas para que los niños sueñen, en Chapultepec

Sin cambios, este año sólo integramos nuevos talentos, adelanta el director de la CND

ARTURO JIMENEZ

Ante algunas opiniones que consideran ''arcaicos'' para el siglo XXI la dramaturgia y la historia de ballets clásicos como El lago de los cisnes, el director artístico de la Compañía Nacional de Danza, Dariusz Blajer -de origen polaco y naturalizado mexicano-, sale al paso y plantea:

''Se puede decir que es un arcaísmo, que no existen cisnes que bailan ni princesas embrujadas. Pero yo aseguro que los niños sueñan con dragones, cisnes y princesas. Hoy día una historia de amor en este escenario, en el cine o en la vida real es muy contemporánea. La única diferencia es que se traspasa esta historia de amor de Sigfrido y Odette a siglos pasados. Y no hay duda, hoy siguen existiendo el odio, el amor y todo eso.''

Este sábado y por tres semanas, la Compañía Nacional de Danza (CND) comienza la temporada 31 de El lago de los cisnes, coreografía que cuenta la historia de amor entre el príncipe Sigfrido y Odette, embrujada como cisne blanco, creada hace más de un siglo por Lev Ivanov y Marius Petipa y que lleva ya tres décadas montándose en el singular escenario de la isleta del lago del bosque de Chapultepec.

En una charla durante el ensayo del jueves, Blajer considera que el universo medieval y mágico de El lago de los cisnes no es tanto una ensoñación coreográfica, sino más bien una fantasía imaginada por un coreógrafo para ser puesta con un alto nivel técnico y artístico.

''Me fascina ver bailarinas del cuerpo de baile que logran una pose estilizada a la manera de un cisne. Es una belleza para ver, esa es la magia de este arte, que una niña mueva sus brazos y parezca que son sus alas. Ese es el milagro del arte dancístico, de esta producción y de este lago. Todo ello es una cultura que la gente debe conocer y disfrutar porque es nuestro futuro.''

Avances técnicos

Acerca de las novedades para la presente temporada, Blajer, quien radica en México desde hace 25 años y también ha sido bailarín y maestro de la CND, comenta que ahora no corrigieron muchos elementos escenográficos porque el año pasado se celebró el 30 aniversario de la puesta de esta obra por parte de dicha agrupación.

''En 2006 hicimos muchos cambios: de escenografía, del primer y segundo actos, del brujo, de vestuarios, de muchos bailarines. Este año solamente hicimos cambios integrando nuevos talentos, con más cualidades técnicas y artísticas.''

En términos de técnica dancística, Blajer comenta sobre las virtudes que deben reunir los bailarines de este ballet. ''Cada integrante de la CND debe cuidar su línea, que debe ser muy estilizada, de bailarín y bailarina clásicos. Deben ser técnicamente excelentes, como gimnastas.

''Cuando llegué a México yo bailaba el papel principal, y el día de hoy todos los bailarines que lo interpretan son mucho mejores que yo, con mucha más técnica. Se avanza como compañía, pero con la preservación de este ballet clásico de El lago de los cisnes, que es un tesoro: con su estilo, su modo de moverse, de trabajar de manera sincronizada. Todo eso lo preservamos como un museo del arte dancístico.''

La versión mexicana del ballet El lago de los cisnes en Chapultepec, que presenta más de cien bailarines en escena, trajes espectaculares, efectos especiales, caballos y embarcaciones en forma de cisnes y dragones, se ha convertido en una tradición casi popular en la capital del país.