Usted está aquí: jueves 15 de febrero de 2007 Estados El aspirante perredista al gobierno de Michoacán saldrá de una elección abierta

El PRD debe hacer a un lado el pragmatismo: Encinas

El aspirante perredista al gobierno de Michoacán saldrá de una elección abierta

ERNESTO MARTINEZ ELORRIAGA CORRESPONSAL

Morelia, Mich., 14 de febrero. La contienda interna para elegir candidato del Partido de la Revolución Democrática (PRD) al gobierno de Michoacán la deben resolver los perredistas, los simpatizantes del sol azteca y la izquierda en la entidad, afirmó el ex jefe de gobierno del Distrito Federal, Alejandro Encinas, tras sostener que existen condiciones en los seis estados donde gobierna el perredismo para retener los mandatos.

Al respecto, el ex candidato presidencial Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano dijo que confía en que el próximo abanderado a la gubernatura del estado sabrá preservar la unidad y tendrá la capacidad de refrendar el triunfo del PRD el 11 de noviembre, cuando además se renovarán 113 alcaldías y 40 diputaciones locales.

Entrevistado durante el quinto informe de gobierno del mandatario estatal, Lázaro Cárdenas Batel, sobre si el cardenismo se ha debilitado, el fundador del PRD respondió: "eso ustedes pueden apreciarlo, no sé que quiera decir eso, yo no creo que haya cardenismo".

Ayer por la tarde Leonel Cota Montaño, dirigente nacional del sol azteca, se reunió con el presidente del comité estatal, Armando Hurtado Arévalo y los precandidatos a gobernador; Leonel Godoy, Enrique Bautista, Silvano Aureoles, Cristóbal Arias, Antonio Soto, Guillermo Rizo y Serafín Ríos, con quienes acordó definir en los próximos días la fecha en que habrán de separarse de sus cargos públicos quienes aspiren a la candidatura.

Asimismo, se definió que el aspirante perredista al gobierno del estado saldrá de una elección abierta, pero antes se llevará a cabo una encuesta para eliminar a los precandidatos con menos posibilidades, informó el dirigente estatal del PRD, Armando Hurtado Arévalo.

Mientras, Alejandro Encinas señaló que el PRD va a definirse en dos vertientes: una política clara de alianzas que deje de lado el pragmatismo para pensar en proyectos de largo plazo, en los que haya identidad programática e ideológica y, en segundo lugar, promover nuevas figuras, dirigentes y candidatos, que pueden estar o no en el partido, lo cual permitirá enfrentar los procesos electorales en 2009 y 2012.

 
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