Usted está aquí: jueves 8 de febrero de 2007 Deportes Chivas no es súper equipo; podemos ganarle, aseguró Richard Núñez

El delantero del Cruz Azul dijo que viste más ganarle a La Máquina que al Guadalajara

Chivas no es súper equipo; podemos ganarle, aseguró Richard Núñez

La reventa para el partido del sábado estuvo en su apogeo; ayer no hubo vigilancia policiaca

JORGE SEPULVEDA MARIN

Chivas "es un club grande, pero no un súper equipo, y eso ya se ha demostrado acá, que cualquiera le puede ganar a otro", aseguró el cementero Richard Núñez, quien agregó que se le puede vencer "jugándole por fuera y no prestándole el balón, porque adelante tiene gente de peligro".

Opinó que viste más ganarle a Cruz Azul, por la institución que es, que vencer al Guadalajara, de allí que haga un llamado a estar concentrados los 90 minutos para evitar cualquier descuido que les pueda costar el triunfo.

Minimizó el papel determinante que pueda cumplir el árbitro en un cotejo de esta naturaleza, porque " los errores de los silbantes son para los dos lados, parejos y cuando se pierde no debe buscarse un culpable. Cuando uno cae es porque el equipo jugó mal y no creo que sea por el nazareno".

El uruguayo confesó no tener demasiado interés por convertirse en el goleador del club, sino por que éste gane sin importar quién haga las anotaciones.

Destacó que le gustaría que el sábado "fuera un estadio más azul que de otros colores", aunque sabe que normalmente hay más aficionados de Chivas que de La Máquina, lo que los hace pensar que "jugamos como visitantes".

Núñez dijo que en este tipo de partidos nunca alguno de los rivales llega con ventaja. "Creo que en los dos hay 50 por ciento para cada uno para conseguir el triunfo, por lo que el que haga mejor las cosas es el que ganará", sostuvo.

Afuera del estadio Azul, Miguel Sabah se negó a explicar porque no hizo el viaje con el plantel a Monterrey el pasado sábado, aunque comentó que debe trabajar más en los entrenamientos para esperar la oportunidad de ser alineado.

En lo físico, aseguró que se siente bien y dijo no saber exactamente por qué ni siquiera viajó a la Sultana del Norte, pero insistió en que seguirá trabajando para que se le brinde de nuevo una oportunidad.

La reventa de los boletos estuvo en su apogeo. Sin vigilancia policial se ofrecían boletos de platea, preferente y general, al doble y hasta triple de los 340, 230 y 140 pesos que costarían en las taquillas, donde "ya se agotaron", o en la empresa que los expende por medios electrónicos.

 
Compartir la nota:

Puede compartir la nota con otros lectores usando los servicios de del.icio.us, Fresqui y menéame, o puede conocer si existe algún blog que esté haciendo referencia a la misma a través de Technorati.