Usted está aquí: domingo 21 de enero de 2007 Estados Cuelgan a presunto asaltante ante decenas de policías en Oaxaca

La turba amenazó a autoridades que se interpusieran

Cuelgan a presunto asaltante ante decenas de policías en Oaxaca

HIRAM MORENO, OCTAVIO VELEZ CORRESPONSALES

San Blas Atempa, Oax., 20 de enero. En presencia de más de 50 policías ministeriales y preventivos, 200 pobladores de la comunidad Tierra Blanca del municipio de San Blas Atempa lincharon a un presunto asaltante. "Esto fue un escarmiento, quien quiera venir a robar aquí correrá la misma suerte", afirmaron los vecinos.

Según los pobladores, el sujeto, identificado como Joel Gallegos Jiménez, de 30 años, había asaltado junto con otras dos personas una tienda de abarrotes propiedad de Héctor Escobar. En su huida, sobre un camino de terracería, interceptaron a Adalberto Piñón Vásquez y su esposa Teresita de Jesús Blanca Méndez y los despojaron de sus pertenencias.

Al alertar a los habitantes del lugar, éstos se organizaron y empezaron a buscar a los presuntos asaltantes. Los vecinos encontraron una camioneta Chevrolet, blanca, con placas de circulación RT-93576 del estado y en ella iban tres hombres, cuyas características físicas coincidían con la de los asaltantes.

Al intentar detenerlos, dos lograron escapar y sólo arrestaron a Gallegos Jiménez, quien fue golpeado, arrastrado y retenido en la Casa de Salud, donde fue desnudado.

Alrededor de las tres de la tarde, llegó al lugar el agente ministerial del fuero común de Santo Domingo Tehuantepec, Moisés Chicatti, y más tarde la subprocuradora de la región del Istmo, Marí del Carmen Chiñas Salinas junto con unos 60 agentes de las policías Ministerial y Preventiva estatales.

Sin embargo, una hora más tarde, los pobladores amarraron con una cuerda al presunto asaltante del cuello y lo colgaron. Afuera de la Casa de Salud sólo se escuchó un grito de dolor y la gente gritó: "Ya fue coronado, ahora que se lo lleven".

Chiñas Salinas señaló que la policía nada pudo hacer para evitar el linchamiento, pues los vecinos los superaban en número y por las amenazas de los pobladores de que también los ejecutarían a ellos si pretendían rescatar al detenido.

En 1994, cuatro hombres que asesinaron un año antes al doctor Gaudencio Salud López ­padre de Francisco Salud, líder de la oposición en San Blas Atempa­, fueron sacados de la cárcel, colgados de un árbol e incinerados por unos 700 pobladores.

 
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