Usted está aquí: sábado 16 de diciembre de 2006 Cultura ''Trato de explorar sonoridades poco usuales en la música clásica''

La compositora Hilda Paredes habla de su partitura que hoy estrena la OFUNAM

''Trato de explorar sonoridades poco usuales en la música clásica''

Recordare marca el cierre de las celebraciones de la orquesta por el Año Mozart

MONICA MATEOS-VEGA

Ampliar la imagen Hilda Paredes durante la entrevista con La Jornada Foto: María Meléndrez Parada

La Orquesta Filarmónica de la Universidad Nacional Autónoma de México (OFUNAM), dirigida por Daniel Boico, estrena este sábado la partitura Recordare, de la compositora Hilda Paredes, obra encargada por la Dirección General de Música de la máxima casa de estudios para cerrar las celebraciones por el Año Mozart.

Radicada desde hace años en Londres, la artista mexicana visita México para asistir a los conciertos de este fin de semana. El domingo se conmemorarán también 70 años de la OFUNAM y tres décadas de la Sala Nezahualcóyotl.

Referencia como un espejo

En entrevista con La Jornada, Paredes explica que las referencias a Mozart en su partitura están ''a un nivel muy microscópico. He tomado una melodía del Recordare pie Jesu del Réquiem, pero la he expandido en el tiempo y en el espacio dentro de la orquesta, y a veces aparece al revés, como si fuera un espejo.

''Y al principio aparecen materiales armónicos que están relacionados con el Cuarteto de las Disonancias, también de Mozart, pero todo como en un cuadro cubista, un poco movido."

­Como tomar el ADN de una obra musical para implantarla en otra.

­Exactamente. Esa sería una buena metáfora. En ningún momento trato de citar a Mozart tal cual; no hay, en esta obra, ningún lugar común en ese sentido. Al contrario, hay sitios nuevos, muy sorprendentes.

''He tenido ya un ensayo con la OFUNAM, la orquesta ha respondido muy bien. Para ellos también será un tanto aventurado. En una experiencia muy bonita trabajar con una orquesta mexicana.

''Sería muy arrogante decir qué siente la gente con mi música. La música estimula partes del ser interior que a veces son muy secretas. Por mi parte, trato de explorar sonoridades poco usuales en la música clásica, con la orquesta como instrumento, y con los instrumentos que la conforman.

''Por parte del público, espero que este fin de semana asista con los oídos abiertos y dispuestos a sorprenderse.

''En esta obra hay muchos elementos que he explorado anteriormente, algunos materiales musicales que exploré, por ejemplo, en la ópera que escribí hace tres años, El palacio imaginado."

La compositora señala que este año ha sido muy bueno para ella en su relación con México, porque ''tuve un estreno con el Ensamble Onyx, en mayo presentaron Corazón de ónix. En octubre Ana Cervantes me estrenó una obra pequeña para piano que le escribí, Sobre un páramo sin voces, y ahora mi trabajo con la OFUNAM.

''Es la segunda vez que esta orquesta me estrena una pieza. La primera fue Zaztun, obra que terminé en 1996, pero que debido a algunos problemas en la UNAM, como la huelga, finalmente se pudo estrenar en 1999. Fue un muy buen trabajo.

''Entre aquel primer trabajo y éste hay un gran camino, muchos cambios en mi lenguaje. He logrado una libertad que me permite arriesgar más sin perder el control de los materiales."

­Cuando usted habla de materiales, ¿incluye también el temperamento de los intérpretes?

­El temperamento del intérprete es muy importante cuando lo conozco personalmente. Esto se aplica cuando trabajo música de cámara. Cuando se trabaja con una orquesta no es posible, a menos que la pieza se escriba para el director. Pero sí hay algunos músicos de la orquesta que conozco, para los cuáles sé hasta dónde arriesgarme, como por ejemplo con el arpa.

''Cuando se trabaja con la orquesta, ésta se convierte en un instrumento en sí mismo. Es otro pensamiento, hay que tener más cuidado respecto de los riesgos que se toman. Se debe tomar en consideración que las cuerdas son un grupo de personas que tocan juntas y se pueden empujar hasta cierto punto. Es como hacer un mural, en lugar de un cuadro de caballete."

Interés por llegar a la esencia

­Pareciera que al crear música hace una obra plástica, como una pintora.

­Sí, un poco, aunque el término color tiene otra connotación para el músico, pues tiene que ver con el timbre.

''Al realizar esta pieza, por ejemplo, me sorprendió la gran innovación cromática que hay en la obras tardías de Mozart. Es la primera vez que realizo una obra tomando materiales de este autor, pero sí he tenido que analizarlo y tocarlo mucho.

''Si bien hay mucha música interesante que se hace hoy día, existe música clásica que se sigue descubriendo, alguna obra que no se conoce o aspectos que se redescubren."

­¿Cómo define esa huella digital que imprime en sus obras?

­Siempre me ha preocupado la cuestión estructural, eso es bastante característico de mi trabajo. La estructura definida no nada más por el material temático, pues muchas veces éste se define por las texturas, la tímbrica y las articulaciones, más que por las armonías. Sí, es bastante plástica mi obra, con cierta economía de medios, soy directa y clara en lo que quiero expresar. Me gusta mucho llegar a la esencia.

Los conciertos con los que la OFUNAM concluye sus presentaciones de 2006, se realizarán hoy sábado a las 20 horas y mañana domingo a las 12 horas, en la Sala Nezahualcóyotl del Centro Cultural Universitario (Insurgentes Sur, 3000).

 
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