Cuando su entrenador, Jaume Mas, llegue a Moscú la inscribirá en la competencia

Pese a obstáculos, Belem Guerrero viaja a la Copa del Mundo en Rusia

Si esto me pasa a mí, que tengo medalla olímpica, cómo estará el deporte, señala

ROSALIA A. VILLANUEVA

Fue necesario que el entrenador Jaume Mas se comunicara desde España con la ciclista Belem Guerrero y le informara que no se preocupe por su inscripción para participar este fin de semana en la Copa del Mundo de Pista en Rusia, ya que lo arreglará una vez que él llegue a la capital moscovita.

Esa llamada dejó más tranquila a la subcampeona olímpica, quien todavía ayer estaba insegura de viajar esta noche a Rusia, ya que por "un error de comunicación'' de la Federación Mexicana de Ciclismo no había enviado su inscripción ante la Unión Ciclista Internacional para participar en las pruebas de persecución, carrera por puntos y scratch.

Retorno a las pistas

La competencia significa para la mexiquense su retorno a las pistas, luego de un año de ausencia de los circuitos que reparten puntos de calificación para el Mundial de Palma de Mallorca 2007, en abril, clasificatorio a los Juegos Olímpicos de Pekín 2008.

La pedalista agradeció "la voluntad'' del titular de la Comisión Nacional de Cultura Física y Depote (Conade), Carlos Hermosillo, de haberle conseguido por medio de sus amigos "una visa de turista'', aunque no le garantiza su participación en el certamen hasta no ser inscrita, como prometió su entrenador Mas.

Apoyada únicamente por su hermano y mecánico Daniel, Belem cerró ayer su preparación en el velódromo olímpico Agustín Melgar, en un espacio sucio, sin la privacidad que requiere su trabajo y sin atención de su equipo multidisciplinario, a lo que tiene derecho como becaria del Compromiso Integral de México con sus Atletas (CIMA).

A pesar de la situación, la originaria de Neza se compromete a hacer su mejor esfuerzo en Rusia, consciente de que este año le ha sido adverso por las lesiones sufridas, las cuales impidieron que continuara su preparación de manera ininterrumpida.

­¿Qué es más difícil, competir contra lo mejor del mundo o con la burocracia deportiva?

­Una presea olímpica que tuve dejó un buen sabor de boca y no importó lo que haya pasado. Esto es una profesión que hago con mucho gusto y si no hay malos tragos no te sabe la medalla ni el resultado.

"Esto es un reto para mí, lograr una vez más estar entre las primeras del mundo. No importa el lugar donde esté, nada más que tenga piernas, brazos, alma y corazón para poder hacer mi mejor esfuerzo.

"De lo administrativo, imagínate, siendo medallista olímpica cómo está lo demás. No lo veo por mí, sino por los que vienen atrás, porque se podría lograr muchas más cosas para México.

Guerrero expresó que Hermosillo "tiene deseos de apoyarnos, pero él tiene más cabezas y brazos que pueden solucionar esos problemas. No es justo que yo esté más ocupada en el trabajo que deben hacer los dirigentes cuando tengo próxima una competencia que desde hace meses presenté a la Conade y CIMA para mi programa de este año y el siguiente.

No hay desánimo

­¿Estás desanimada por lo que estás pasando?

­Todas las dificultades y problemas que he tenido debo convertirlo de malo a bueno, y con resultados. No quiero que se interprete que Belem ha tenido mala suerte o que soy rebelde porque no competí en los Juegos Centroamericanos (en Cartagena).

"Tengo una meta corta con el Mundial, Juegos Panamericanos (Río de Janeiro), Copas del Mundo y Pekín, y mi compromiso es salir con el pie derecho en esas pruebas''.

Con signos de resfriado, Belem Guerrero se presentó muy temprano a las oficinas de Hermosillo, quien le entregó los boletos de avión de ella, el mecánico y el fisiatra, pero no el de su entrenador, quien debió costearlo para trasladarse de España a Rusia.