Usted está aquí: lunes 11 de diciembre de 2006 Opinión Ciudad Perdida

Ciudad Perdida

Miguel Angel Velázquez

PGJDF: vendaval sin rumbo

La dependencia, en manos foxistas y madracistas

Para muestra basta un talón... de cheques

El olvido como factor para el quehacer político, se ha convertido en una constante peligrosa que confunde propósitos, perturba metas, y al final desesperanza la confianza que el ciudadano deposita, con su voto, en quienes dirigen.

Esto viene a cuento porque en la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal, con paladas de amnesia se pretende omitir la forma de pensar, y de actuar, de quienes ahora tienen la responsabilidad de impartir, con imparcialidad y respeto a los derechos humanos, la equidad de las leyes.

A menos que la intención sea hallar en la derecha la mano dura, intransigente, intolerante y soberbia, dos de los más importantes cargos en esa procuraduría parecen no tener explicación.

Es verdad que en los nueve años de gobierno perredista en la ciudad la dependencia nunca ha sido dirigida por alguien a quien se pueda calificar de izquierda. Samuel del Villar fue un hombre de leyes que llegó al PRD ­desde su fundación­ desde el PRI, al que renunció no sin antes advertir de su derechización, y su compromiso con la justicia y la honestidad fueron siempre a prueba de todo. Su quehacer político dentro del partido al que le dio sus últimos años fue tan apasionado y profundo como el que muy pocos militantes de izquierda pueden presumir.

Bernardo Bátiz también se la jugó con el PRD. Sin pertenecer a ninguna corriente, supo acompañar las ideas del gobierno de Andrés Manuel López Obrador, y ahora refrenda su compromiso militando al lado del que fuera su jefe institucional. Bátiz renunció al Partido Acción Nacional cuando los azules decidieron cambiar el rumbo, para incrustarse en las línea del neoliberalismo.

Ahora las cosas parecen tener diferencias. Marcelo Ebrard nombró como procurador a un hombre de derecha, comprometido con el peor de los panismos: el de Vicente Fox, y por ello el de Calderón, aunque solamente en ejercicio de su profesión ­que no compromete su manera de pensar­ se convirtió en el defensor del propio Ebrard durante el episodio de Tláhuac.

Se trata de Rodolfo Félix Cárdenas, quien participó en el área de Coordinación de Justicia y Seguridad del equipo de transición de Vicente Fox como integrante de la mesa uno de trabajo, a la que se llamó: Reforma Integral de la PGR. En esa mesa intercambio ideas con Raúl Carrancá, Ignacio Burgoa, Hiram Escudero y Miguel Sarré.

Su compromiso con la idea de gobierno de Fox establece que no fueron 100 mil pesos los que regaló a la nefasta causa foxista, sino que de acuerdo con el control de folios recibidos de aportaciones de simpatizantes, en efectivo, Rodolfo Félix aportó a la Asociación Amigos de Fox, 200 mil pesos, en dos exhibiciones, ambas fechadas el 11 de diciembre de 2000, y se registraron bajo los siguientes números: RSEF-DF-PAN 00077, y RSEF-DF-PAN 00079.

Además sus socios en el despacho de abogados Félix-Izunza y Maluf, le dieron al PAN otros 300 mil pesos para apoyar la campaña de Vicente Fox, siempre inspirado en lo que sí cree, y que demostró durante su ejercicio como responsable del Comité de Derecho Penal de la Asociación Nacional de Abogados de Empresa. Ese es el nuevo procurador de justicia del DF.

Y allí no para el desatino. En la Dirección de Comunicación Social de esa dependencia se nombró a Hugo Patlán, cuyo pasado, o mejor dicho presente, no tiene desperdicio. Operador del priísmo de Roberto Madrazo, Patlán fue enlace regional del tricolor en Nuevo León, Guanajuato, Querétaro e Hidalgo, durante la campaña del mismo Madrazo a la Presidencia de la República, es decir, hace ratito.

A esos datos hay que agregar su paso como representante propietario del PRI en la Comisión Nacional de Vigilancia del Registro Federal de Electores del IFE, en este mismo año, ni se puede ignorar que aún funge, no se sabe de su dimisión, como secretario técnico de la Comisión Nacional de Procesos Internos del propio PRI. Claro que todo esto se puede olvidar, pero entonces, ¿cuál es el rumbo?

PRD-DF, nada claro

Aún no se sabe, con certeza, quien será el próximo dirigente del PRD-DF. Ahora se habla con fuerza de Patricia Ruiz Anchondo, ex delegada de la GAM, de quien se dice no tendría mayores resistencias entre las tribus, y en la secretaría general aún se mantiene la pugna entre Carlos Reyes Gámiz y Alejandro Rojas. Por lo pronto hoy no habrá decisión.

[email protected] * [email protected]

 
Compartir la nota:

Puede compartir la nota con otros lectores usando los servicios de del.icio.us, Fresqui y menéame, o puede conocer si existe algún blog que esté haciendo referencia a la misma a través de Technorati.