Usted está aquí: domingo 3 de diciembre de 2006 Cultura Homenaje a García Lorca en la FIL; montan La muerte se va a Granada

Conjugan música, actuaciones y el texto de Fernando del Paso para atrapar al público

Homenaje a García Lorca en la FIL; montan La muerte se va a Granada

JUAN CARLOS G. PARTIDA CORRESPONSAL

Guadalajara, Jal., 2 de diciembre. Un torbellino dramático, donde lo onírico y lo real se conjugan y envuelven para emocionar o llevar a la reflexión, fue la puesta en escena La muerte se va a Granada, de Fernando del Paso, que la noche de este jueves fue presentada en el teatro Diana con una amplia concurrencia que disfrutó la obra escrita en verso que el escritor publicó en 1998 en editorial Alfaguara como homenaje al poeta andaluz Federico García Lorca, y que dada la ocasión de que Andalucía es invitada de honor a la Feria Internacional del Libro, fue repuesta en un sólido montaje dirigido por Daniel Constantini.

Estrenada en 1998 en el Teatro Helénico de la ciudad de México y también montada en el Festival Cervantino en 1999, la obra que anoche pudo ser vista por al menos mil espectadores que acudieron al Diana, mostró en diversas dimensiones y zonas de la vida de García Lorca, estados de ensueño entremezclados con acontecimientos reales del viaje que realizó de Madrid a Granada, donde fue asesinado, un mundo donde las fantasías, las pesadillas y los hechos del poeta granadino se presentan en dos actos previos a un tercero, donde Fernando del Paso logró integrar su visión a la de García Lorca para recrear una experiencia escénica con un final donde se abre paso la alegoría.

Fue la naturaleza del relato lo que provocó curiosamente una mayor atención del público para atender, en primera instancia, la vida, obra y pasión de un artista, también para recrear lo que se vivió durante la España desgarrada por la guerra civil. Compleja, llena de recursos literarios con métrica y rima añadidos, La muerte se va a Granada también fue sólidamente sustentada en los recursos actorales de Marco Orozco y Sara Isabel Quintero, con una música bien llevada y hasta elementos plásticos que sirvieron para recrear la pesada atmósfera de los dos últimos días en la vida del autor español.

"Tus palabras le han hecho más daño a España que las balas", advierten a García Lorca en el día previo de su asesinato, el día del paseo por su tierra natal y última donde fue ultimado a tiros, en uno de los episodios iniciales y más crudos de la confrontación entre españoles que aún hoy, en estos días, tiene sin encontrar a más de 90 mil víctimas que yacen en fosas clandestinas.

Tras dos actos en los que se narra en escena la presencia de García Lorca en su terruño, el inminente peligro ante su comunismo declarado y el levantamiento del general Francisco Franco, el tercer acto comienza al grito de "Qué comience la función". Y es aquí donde la confluencia del novelista hecho dramaturgo, y del poeta hecho héroe, se logra con un resultado alegórico que retumbó hasta el último rincón de un teatro Diana donde nubes, sirenas y vestidos llegaron entre luces y sonidos, en una visión casi cinematográfica.

En la obra participaron al menos una cincuentena de personas entre elenco y producción, pero el escenario fue compartido por 19 actores y un cantante, todos para recrear esa trágica muerte.

 
Compartir la nota:

Puede compartir la nota con otros lectores usando los servicios de del.icio.us, Fresqui y menéame, o puede conocer si existe algún blog que esté haciendo referencia a la misma a través de Technorati.