Cambio de gobierno

Diputado de Convergencia rechaza violencia irracional contra medios informativos

Agreden a fotógrafo de La Jornada por cumplir con su trabajo en San Lázaro

CIRO PEREZ SILVA, ENRIQUE MENDEZ, ROBERTO GARDUÑO

Por órdenes del Estado Mayor Presidencial (EMP), un grupo de marinos destacados en la calle Curtiduría, a un costado del Palacio Legislativo de San Lázaro, sometieron por la fuerza a Carlos Ramos Mamahua, fotógrafo de La Jornada, cuando éste tomaba placas de la presencia militar que solicitó el presidente de la mesa directiva de la Cámara de Diputados, el panista Jorge Zermeño, "para resguardar la integridad de los legisladores".

Poco después de las 16 horas, Ramos Mamahua disparó su cámara desde la bocacalle, bloqueada casi en su totalidad por uno de los muros de hierro que rodean el recinto, detrás del cual se encuentran dos camiones de la Armada y varias decenas de marinos, cuando un elemento del EMP le ordenó a gritos que no tomara esa imagen.

­¡Ni madres, no puedes tomar fotos! ¡Vete de aquí! ­le ordenó uno de los coordinadores del EMP, sin pedirle identificación, lo cual es práctica común en operativos como el que se despliega desde hace una semana en la zona.

­Déjeme trabajar ­contestó el fotógrafo de este diario.

­¡Ya te dije que no nos estén tomando fotos, cabrón! Todavía que te dimos chance hoy de entrar por acá ­por el acceso del Palacio de Justicia Federal­; ayer te dejamos salir por ahí y antier te dejamos entrar por ahí. ¡Ni madres! ¡A la chingada! ¡Sáquenlo de aquí! ­ordenó el militar, mientras Ramos Mamahua se dirigía a su motocicleta para abandonar el sitio.

De inmediato cuatro elementos del 24 batallón de infantería de marina, adscritos al cuerpo de Guardias Presidenciales, saltaron sobre el fotógrafo, lo inmovilizaron tomándolo por los brazos y, con jalones, intentaron llevarlo hacia los camiones estacionados en Curtiduría.

­¡Yo no estoy haciendo nada, sólo mi trabajo! ­afirmó el periodista mientras los militares anotaban las placas de su motocicleta y lo fotografiaban.

­Si ustedes pueden tomar fotos, ¿por qué yo no? ­insistió Ramos Mamahua­; ¡déjenme apagar la moto!

­¡Ni madres! ¡No! ¡A la chingada! ¡Sáquenlo, sáquenlo a la chingada! ¡Aquí no vas a hacer nada! ­amenazó el militar, cuando los fotógrafos Jorge Ríos, de El Universal; Fernando Castillo de la Agencia Micphotopress, y José Carlo González, de La Jornada, acudieron a rescatar a su compañero y tomaron placas tanto del elemento del EMP como de los marinos que sometían a Ramos Mamahua.

­¡Déjenlo ya! ¡Bájenlo! ­ordenó de nuevo el militar, lo que cumplieron de in-mediato los marinos, al tiempo que corrían a esconderse detrás del muro de metal y en los camiones.

Más tarde, en un comunicado, José Manuel del Río Virgen, diputado de Convergencia y presidente de la Comisión de Marina, externó su "repudio" por la agresión que sufrió el fotógrafo de este diario, y advirtió que estos acontecimientos son condenables, ya que no se trata de un estado de sitio en el Palacio Legislativo, sino sólo de un operativo de seguridad.

"Estamos en una situación difícil en el Congreso de la Unión, debido a la serie de acciones que se están desarrollando entre legisladores de diferente posición política; sin embargo, estos actos atípicos no deben desencadenar en una violencia desmedida e irracional en contra de los medios de comunicación", aseveró Del Río, luego de advertir que los militares y los elementos de seguridad "no se deben extralimitar en sus funciones".