Usted está aquí: viernes 1 de diciembre de 2006 Opinión Penultimatum

Penultimatum

Negativa eclesial

RECIENTEMENTE TERMINO en el canal de las estrellas el concurso dominical Bailando por la boda de mis sueños, que no tuvo el rating esperado por sus patrocinadores. Quizá debido a esto, un publicista audaz ha presentado en Televisa un proyecto: ''Bailando por el adulterio de mis sueños''. Aunque es apenas un esbozo, ya tiene inscritos a 350 mil concursantes. Pero regresando a la boda soñada, sus productores querían que los ganadores (Josué y Margarita, ésta con siete meses de embarazo; él con cinco meses de conocerla, según decía un periódico) tuvieran su enlace matrimonial bajo los cánones de la Iglesia católica y en el principal foro de Televisa San Angel. Pero las autoridades eclesiásticas de la ciudad negaron el permiso alegando que las bodas religiosas ''están prohibidas en jardines, playas, hoteles y otros lugares, a menos que hubiera una causa de fuerza mayor", según explicó José de Jesús Aguilar, responsable de oficiar la ceremonia y asesor espiritual de los concursos dominicales de los canales electrodomésticos, es decir, el 7 y el 13.

EL PRESBITERO SE equivoca, pues olvida que un foro de Televisa no es una playa, un hotel o un jardín; un foro de Televisa, si se quiere Televisa misma, es un gran templo electrónico donde los oficios visuales tienen la mayor importancia porque congregan a toda la gente que por verlos ha desertado de las iglesias. ¿Quiere este floor manager de la conciencia negarle facultades canónicas a Televisa?

LA VERDAD, ALGO falló en la petición de Televisa, porque en otras partes del país se conceden permisos hasta para oficiar en estadios de futbol. Quizá la negativa tenga que ver con el deseo del Episcopado de no ''hacer olas" cuando el señor Felipe Calderón le prometió modificar la Constitución a fin de acabar con la libertad de cultos en ella consagrada y, en su lugar, instaurar la llamada libertad religiosa, que le daría a la Iglesia católica el derecho a la enseñanza religiosa en la educación pública y contar con medios de comunicación masiva, entre otras cosas. No está por demás recordar que todavía hasta hoy en la mañana el único matrimonio reconocido por las leyes mexicanas, es el que se realiza ante un juez del Registro Civil.

Y HABLANDO DE Televisa, el mismo día que murió Raúl Velasco (por tres décadas conductor del espacio cultural por excelencia del canal de las estrellas, Siempre en domingo) pasaron la grabación del homenaje que diversos artistas le rindieron en Acapulco, en octubre pasado. En esa ciudad, durante 14 años Televisa organizó un festival, inicialmente a cargo de Velasco. Se terminó el año pasado, pues el gobierno de Guerrero estimó que, en una entidad con tantas carencias, era injusto darle a esa poderosa empresa más de 60 millones de pesos cada año sí ésta recibía aparte sumas considerables vía la publicidad contratada. En cambio, la población local tenía que pagar por asistir a los principales actos del festival. Aunque éste debía servir para atraer turistas y más divisas, tal cosa no se logró. Mejor atender entonces primero a los pobres.

 
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