Usted está aquí: sábado 25 de noviembre de 2006 Deportes Pachuca jugando en casa dejó vivo al Puma

Bronca en la cancha y desmanes en la tribuna

Pachuca jugando en casa dejó vivo al Puma

Empate a uno casi le da el pase a semifinales

AGENCIAS

Ampliar la imagen Al terminar el partido Christian Giménez y el portero Rogelio Rodríguez protagonizaron una escaramuza que estuvo a punto de generar un pleito generalizado Foto: Ap

Pachuca, 24 de noviembre. Con bronca y un jugador expulsado, Pumas de la UNAM rescató un importante empate a un gol en el juego de ida de cuartos de final, el cual se disputó con gran intensidad en el pletórico estadio Hidalgo, donde la afición abarrotó el coso para apoyar a los Tuzos.

El resultado es bueno para los auriazules y el domingo les bastará conservar el empate global para ubicarse en semifinales, dada su mejor posición en la tabla general. Empero, la nota negra la dio el portero Rogelio Rodríguez al propinar un codazo a Christian Chaco Giménez, quien sangró por la boca. Las porras de Pumas no se quedaron atrás y cometieron desmanes y destrozos.

Juan de la Barrera puso en ventaja a Tuzos al minuto 60, mientras que por Pumas igualó Ariel Chupa López, al 63.

Pachuca, flamante finalista de la Copa Sudamericana, tuvo un arranque vertiginoso, se volcó al ataque en busca de un gol tempranero y apenas al minuto 2, Luis Angel Landín remató elevado un gran centro que desde la derecha envió Gabriel Caballero. Minutos más tarde el portero Rodríguez interceptó con fortuna otro balón que iba para Landín.

El habilidoso colombiano Andrés Chitiva arrancó nuevos alaridos de frustración entre los aficionados hidalguenses cuando llegó veloz frente al segundo poste sin lograr rematar.

Pumas estaba desconcertado, sometido en su propia área y reventaba pelotazos con muchos apuros, no faltaron algunos roces, por lo que el silbante Paul Delgadillo quiso imponer orden y amonestó al local Aquivaldo Mosqueda y a Marco Antonio Palacios, el Pikolín.

El clima frío no impidió el ambiente de fiesta en las tribunas, empañado por los desmanes de los seguidores auriazules, cuyos miembros intercambiaron golpes con la policía, lanzaron bengalas y cohetones a la cancha y destrozaron varias butacas.

Por el altavoz se conminó al orden, pero las porras lanzaron pedazos de los asientos muy cerca de la portería defendida por Miguel Calero.

Al arrancar el segundo tiempo, de nuevo Tuzos intentó sorprender, pero apenas pudo enviar un zurdazo de Gerardo Rodríguez, entonces Pumas pareció acordarse de haber concluido el torneo como la mejor defensa, ordenó filas y dificultó el tránsito de los hidalguenses, no obstante, hubo descuidos en un tiro de esquina y Pachuca inauguró el tablero.

Chitiva cobró el córner por la derecha, Juan de la Barrera cabeceó frente al primer poste con más potencia que colocación y estrelló la pelota sobre el portero Rodríguez, quien reaccionó mal y acabó enviando el balón hacia su meta ante un Leandro Augusto que se quedó anclado junto al primer poste.

El festejo y la sonrisa para el público local apenas duraron tres minutos, porque el Chupa López se encargó de igualar cartones cuando Leandro cobró una falta. Ariel saltó desde el costado izquierdo para darle dirección con la parte interna del pie derecho.

Los técnicos hicieron cambios, Enrique Meza con afán de ganar metió a Christian Giménez, antes había enviado a Juan Carlos Cacho. El visitante Ricardo Ferretti respondió con Ismael Iñiguez e Ignacio Scocco, pero Iñiguez en cinco minutos se ganó dos cartones amarillos y salió expulsado al 92.

Tras el pitazo final, Giménez encaró a Darío Verón, el apodado Ro-Ro le llegó por un costado con inesperado codazo en la cara y empezaron los empujones, de ambas bancas corrieron jugadores y auxiliares para apaciguar a los rijosos.

 
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