Fue sentenciado en 2002 por apoyar al cártel de Juárez
Falleció de cáncer el general Francisco Quirós Hermosillo
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Francisco Quirós Hermosillo durante el Consejo de Guerra, en 2002
Foto: José Carlo González
Falleció ayer víctima de cáncer el general Francisco Quirós Hermosillo, uno de los principales implicados en presuntas desapariciones forzadas ocurridas en el estado de Guerrero, y quien además fue sentenciado por las autoridades militares por ser penalmente responsable de haber dado protección al extinto Amado Carrillo Fuentes, creador y líder del cártel de Juárez, informaron fuentes de inteligencia gubernamental.
Desde septiembre pasado permanecía internado en el Hospital Central Militar, donde murió. Sólo a sus familiares y personas de confianza se les informó hace dos meses que la enfermedad que padecía el militar era terminal. Sus últimos seis años de vida los pasó en el Campo Militar Número Uno.
Así, el fiscal especial de delitos sociales y políticos del pasado de la Procuraduría General de la República (PGR), Ignacio Carrillo Prieto, se verá imposibilitado de pedir una orden de captura contra el general Quirós por delitos relacionados con la llamada guerra sucia.
De acuerdo con las fuentes consultadas, el próximo martes se tiene previsto consignar una averiguación previa ante un juzgado federal con sede en Guerrero, en la que se acusa al militar de incurrir en varios secuestros en contra de ex guerrilleros ligados a Lucio Cabañas. En ese expediente se incluye, también en calidad de indiciado, al ex presidente Luis Echeverría Alvarez.
Además, Quirós estaba a la espera de obtener un amparo que echara abajo la sentencia de 16 años de prisión que dictó en su contra el Supremo Tribunal Militar, el cual lo encontró responsable del delito de narcotráfico.
Junto a Quirós, también fue responsabilizado por el mismo delito el general Arturo Acosta Chaparro; los testigos aseguraron que Quirós tenía dos vehículos que supuestamente le regaló Carrillo Fuentes.
Las acusaciones que sirvieron de base para que en noviembre de 2002 el Consejo de Guerra determinara que ambos generales tenían nexos con el narcotráfico se fundamentan en declaraciones de testigos protegidos. Uno de ellos, el ex capitán Gustavo Tarín Sánchez, aseguró que los militares protegían al cártel de Juárez.
Los dos generales fueron detenidos en agosto de 2000.