Reitera Moscú que el diferendo con Teherán debe resolverse de manera pacífica
Reconsiderará sus vínculos con la AIEA si la ONU le impone duras sanciones, advierte Irán
Moscú, 10 de noviembre. El jefe de los negociadores iraníes sobre el tema nuclear, Ali Larijani, advirtió este viernes en Moscú que Teherán reconsiderará sus relaciones con la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA) si el Consejo de Seguridad de la Organización de Naciones Unidas (ONU) le impone duras sanciones.
"Rexaminaremos nuestras relaciones con la AIEA si la ONU adopta la resolución de la troika europea sin tener en cuenta las enmiendas presentadas por Rusia", declaró Larijani tras reunirse con el canciller anfitrión, Serguei Lavrov, y antes de entrevistarse con su homólogo ruso del Consejo de Seguridad, Igor Ivanov.
El alto responsable iraní trató con ambos el proyecto de resolución europeo que se discute desde hace cerca de dos semanas entre los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU (China, Estados Unidos, Gran Bretaña, Francia y Rusia), y Alemania.
El texto prevé sanciones económicas y comerciales contra Irán por negarse a suspender el enriquecimiento de uranio.
Rusia quiere aportar ciertas enmiendas encaminadas especialmente a suprimir toda mención de las sanciones individuales que podrían aplicarse a los iraníes asociados a las actividades nucleares: prohibición de viajar y congelación de recursos financieros en el extranjero.
Aliado tradicional de Teherán, Moscú quiere jugar su propia carta en el enfrentamiento entre Irán y la comunidad internacional. Pues además, la propuesta del Kremlin prevé la creación de una empresa conjunta con la república islámica para el enriquecimiento de uranio en Rusia, con lo que quiere conciliar el plan energético iraní y las preocupaciones de Occidente.
Mientras el canciller ruso, Serguei Lavrov, reiteró que el diferendo atómico con Irán debe resolverse de manera pacífica, Larijani aseguró que incluso Teherán acepta las inspecciones de la AIEA y es fiel al Tratado de No Proliferación Nuclear, pero sin que lo anterior signifique renunciar a su programa nuclear civil.
Tras la reunión con Ivanov, el enviado iraní subrayó que si existen divergencias con AIEA hay también disposición de su gobierno a resolverlas mediante negociaciones. Por lo demás, aseveró, "en la doctrina de defensa de Irán no hay lugar para las armas nucleares", y hay interés en retomar las negociaciones con los europeos.
El presidente de Irán, Mahmud Ahmadinejad, afirmó en Teherán que los enemigos de su país no podrán hacer nada para detener su programa nuclear. Reprochó que "ellos expresan de mala forma su preocupación sobre una posible desviación de Irán de un camino pacífico".