"Seria y creciente", la actividad terrorista, advierte el contraespionaje británico

Amenaza Al Qaeda en Irak con hacer "estallar" la Casa Blanca

Forma parte de un plan para instaurar un "califato islámico", dice Hamza Muhajer, jefe de la célula

Han muerto unos 150 mil iraquíes desde la invasión: Bagdad; son 650 mil, afirma una revista médica

AFP, REUTERS, DPA

Dubai, 10 de noviembre. La célula iraquí de Al Qaeda amenazó con hacer "estallar" la Casa Blanca como parte de un plan para la instauración de un "califato islámico", en una grabación atribuida hoy a su jefe Abu Hamza Muhajer y difundida por Internet, mientras la jefa del servicio de contraespionaje interno británico MI5, Eliza Manningham-Buller, advirtió este viernes que es "seria" y "creciente" la actual amenaza terrorista en Gran Bretaña.

"Juramos que no descansaremos en nuestra jihad (guerra santa) hasta hacer estallar la casa más sórdida, llamada Casa Blanca", afirmó Muhajer en el mensaje, cuya autenticidad no ha podido ser verificada.

Añadió Muhajer: "Anunciamos hoy el final de una fase de la jihad y el comienzo de una nueva para inaugurar el proyecto de un califato islámico y restaurar la gloria del Islam".

En su mensaje, el jefe de Al Qaeda en Irak entiende por "califato islámico" un Estado musulmán a escala mundial. Añadió que ya puso 12 mil combatientes a disposición del "Estado islámico" iraquí autoproclamado.

La creación del "Estado islámico en Irak" fue anunciada el 15 de octubre en un video publicado en Internet por una alianza sunita de la guerrilla iraquí, controlada por la sección local de Al Qaeda, en respuesta a la adopción por el Parlamento de una ley que crea un Estado federal.

En la misma grabación Muhajer calificó al presidente George W. Bush de "estúpido", y subrayó que "el enemigo está tambaleándose por los golpes de los mujaidines y se dispone a hacer las maletas y huir", en referencia al saliente jefe del Pentágono, Donald Rumsfeld.

Golpeado por la derrota en las elecciones legislativas del pasado martes, Bush dijo que Rumsfeld renunció por la necesidad de una "nueva perspectiva en Irak".

Por su parte, la actual amenaza terrorista en Gran Bretaña es "seria" y "creciente", advirtió la jefa del servicio de contraespionaje interno británico MI5, y afirmó que su país corre peligro "permanente", que durará por lo menos "una generación".

La responsable del MI5 desde noviembre de 2002 precisó en un discurso pronunciado en la universidad Queen Mary que sus servicios vigilan a unos mil 600 individuos y unos 200 grupos, y que éstos traman unos 30 atentados en Gran Bretaña.

Manningham-Buller señaló además que si las bombas que pueden usarse hoy contra Gran Bretaña son artesanales e improvisadas, las armas de mañana serán mucho más peligrosas y no descartó que los terroristas utilicen en el futuro elementos químicos o bacteriológicos.

Tras las advertencias inusualmente claras de la jefa del MI5, quien tiene la reputación de ser sumamente discreta y de no dramatizar las alertas terroristas, el primer ministro británico, Tony Blair, reafirmó que la lucha contra el terrorismo en suelo británico será "larga y profunda".

"Llevo varios años diciendo que es real la amenaza terrorista", insistió Blair, quien llamó a los británicos a "combatir la propaganda venenosa" que "pervierte la mente de los jóvenes".

Desde los atentados del 7 de julio del 2005 contra el transporte público de Londres, la policía ha reportado que ha desarticulado cinco grandes tramas terroristas en Gran Bretaña.

En tanto, al menos 150 mil personas murieron en Irak desde el comienzo de la invasión liderada por Estados Unidos, en marzo de 2003, estimó el Ministerio de Salud iraquí.

El balance fue comunicado el pasado jueves por el ministro de Salud, Ali Shamari, a periodistas en Viena, y luego fue confirmado por un portavoz del ministerio en Bagdad.

"En promedio, cada día mueren entre 75 y 80 personas pero en algunos casos los números exceden esa cifra, así que el total es de cerca de 150 mil", afirmó.

La cifra incluye los muertos en enfrentamientos militares, los ejecutados a sangre fría y los cuerpos que llegan al depósito de cadáveres, añadió.

El balance de víctimas mortales en Irak ha sido objeto de polémica, y la mayoría de las estimaciones señalaban hasta ahora que son entre 50 mil y 60 mil.

En octubre, la revista médica británica The Lancet publicó un informe según el cual unas 650 mil personas murieron desde la invasión, con base en extrapolaciones de personas entrevistadas.

Avizoran cambios en el Pentágono

Al menos 12 personas murieron, todas miembros de ejército de Irak, en hechos separados en las norteñas Tal Afar y Mosul, mientras cuatro efectivos de las fuerzas armadas estadunidenses perdieron la vida el jueves anterior, informó este viernes el ejército de Estados Unidos.

Por lo pronto, los comandantes militares de Estados Unidos realizan su propia evaluación de la situación en Irak, dijo hoy el principal oficial del país, señal de que se avecinan cambios tras la dimisión de Rumsfeld.

"No esperamos seguir un plan tallado en piedra y quedarnos con ese plan sin importar lo que ocurra", señaló el general Peter Pace, jefe del estado mayor conjunto de Estados Unidos.

El nuevo régimen que se avecina en el Pentágono deberá resolver cuestiones clave sobre aumentar o reducir las tropas en Irak o lanzar una renovada ofensiva contra la insurgencia, indicó.

En este sentido, el líder del Consejo Sunita de Irak, Arit Dhari, no cree que el país caiga en una guerra civil cuando se retiren las tropas estadunidenses y británicas, en entrevista con la cadena árabe Al Arabiya.

Al mismo tiempo, responsabilizó a las tropas extranjeras, a los "servicios secretos de algunos países vecinos", al gobierno iraquí y sus milicias por el caos y la violencia en el país ocupado.

"Es una guerra política que persigue determinados intereses, pero no es una guerra religiosa entre sunitas y chiítas", recalcó.