Usted está aquí: jueves 2 de noviembre de 2006 Sociedad y Justicia Despide el INN a médico por una supuesta "recomendación" de la CNDH

Directivos del instituto aseguran que el neurocirujano dio un diagnóstico erróneo

Despide el INN a médico por una supuesta "recomendación" de la CNDH

El doctor Rodolfo Ordanza prescribió a un epiléptico una operación que nunca se realizó

ANGELES CRUZ MARTINEZ

Julio Sotelo Morales, director del Instituto Nacional de Neurología y Neurocirugía (INN) Manuel Velasco Suárez, se valió de una "orientación" que hizo la Comisión Nacional de Derechos Humanos a Abraham Vidal Bobadilla sobre el caso de la muerte de su hermano, Isaac, para justificar la recisión de contrato del doctor Rodolfo Ondarza Rovira, pues argumentó que se trataba de una "recomendación".

La notificación se entregó ayer Ondarza Rovira cuando apenas concluía el levantamiento de un acta administrativa en contra del neurocirujano por su supuesta responsabilidad en dicho deceso.

Lo anterior ocurrió pese a que en reiteradas ocasiones la familia de Isaac ha denunciado las irregularidades cometidas por Miguel Angel Celis López, jefe de la unidad de Radiocirugía y coordinador del Comité de Epilepsia del instituto, en el trato dado al paciente de 31 años de edad, quien falleció el 2 de noviembre de 2005 por una crisis convulsiva.

Isaac Vidal Bobadilla padecía epilepsia desde los 14 años. A causa de la enfermedad, para la cual recibió diferentes terapias con poco éxito, tuvo que interrumpir sus estudios y siendo adulto no lograba permanecer, y a veces ni siquiera era aceptado, en los trabajos que solicitaba. Las crisis llegaban a sumar 10 a la semana y fueron la causa de diversas lesiones en las manos, rostro y cabeza del enfermo.

Cambios de opinión

Llegó al INN y luego de varios estudios clínicos y la participación de especialistas de diferentes áreas, en el año 2002, el doctor Ondarza Rovira recomendó la realización de una cirugía estereotáctica con la cual se lograría la rehabilitación de Isaac. El caso fue presentado al comité de Epilepsia del INN, el cual dio su visto bueno para la cirugía.

El nombre de Isaac se inscribió en la lista de espera de cirugías del instituto y durante dos años esperó infructuosamente a que hubiera una cama disponible en el hospital. El 8 de noviembre de 2004, Celis López, quien para entonces ya se desempeñaba como coordinador del Comité de Epilepsia les informó que la operación no debía realizarse y que este órgano había determinado que se requerían más estudios, mismos que se practicaron ocho y 10 meses después.

Pasó el tiempo y en mayo de 2005, Celis López se comunicó por teléfono con Isaac para darle una cita en la Unidad de Radiocirugía, donde le informó del cambio de planes. Sí lo operarían pero con el método de radiación. En esa misma cita, Celis López comentó a Isaac y su hermano Abraham que dicho procedimiento era de alto costo y aunque ambos estuvieron de acuerdo en pagar, éste nunca se llevó a cabo.

Un par de meses después, en julio de 2005, la familia Vida Bobadilla nuevamente recibió una llamada telefónica para pedirle a Isaac que acudiera al INN para su hospitalización. Estuvo ahí seis días, algunos de los cuales los médicos lo mantuvieron atado a su cama, aparentemente porque padecía alucinaciones, lo cual nunca antes le había ocurrido, comentó su hermano Abraham.

Le realizaron nuevos estudios de laboratorio, a partir de los cuales el Comité de Epilepsia decidió que no debería efectuarse la intervención quirúrgica. Isaac fue enviado a su casa en el estado de México, con un cambio de terapia farmacológica, que, aseguró Abraham, empeoró las crisis epilépticas de su hermano.

Todavía en septiembre de 2005, Celis López buscó otra vez al paciente para insistirle en que aceptara el tratamiento de radiocirugía. Además aseguró que con la cirugía estereotáctica que planteaba Ondarza Rovira correría mucho riesgo y podría morir durante la operación.

Isaac y su familia han presentado cuatro quejas ante el órgano interno de control del INN y una ante la CNDH. Esta última envió a Abraham Vidal una comunicación el pasado 16 de octubre, en la que da cuenta del reporte emitido por el INN, en el cual responsabiliza a Ondarza Rovira de haber realizado un diagnóstico equivocado sobre la enfermedad de Isaac. La CNDH también refiere que el órgano interno de control está integrando la averiguación, misma que se completará con el dictamen técnico solicitado a la Comisión Nacional de Arbitraje Médico.

El primer visitador de la CNDH, Raúl Plascencia Villanueva, menciona en el oficio 33148 que una vez que concluya la investigación y el órgano interno emita su dictamen, Abraham Vidal podría, de ser el caso, exigir la reparación del daño e indemnización, así como iniciar una demanda legal contra quien resulte responsable de acuerdo con lo que determine el órgano de control interno.

Sin embargo, con base en ese mismo oficio de la CNDH, las autoridades del INN levantaron un acta administrativa en contra de Ondarza Rovira. Ahí, Celis López reiteró que el diagnóstico hecho por el neurocirujano había sido erróneo, aunque omitió referirse a su propuesta de que Isaac se sometiera al procedimiento e radiológico. Tampoco explicó por qué si se detectó el supuesto error, no se hizo la corrección pertinente a fin de salvaguardar la salud y la vida de Isaac.

Luego de casi dos horas que duró la audiencia administrativa y apenas terminaron de salir de la oficina de la subdirección de consulta externa, Celis López, Enriqueta Martínez Juárez y la representación sindical, ingresó un abogado privado para entregarle a Ondarza Rovira la notificación de la rescisión de su contrato. El documento firmado por el director del INN, Julio Sotelo Morales, dice que la decisión se basa en la "recomendación" de la CNDH.

 
Compartir la nota:

Puede compartir la nota con otros lectores usando los servicios de del.icio.us, Fresqui y menéame, o puede conocer si existe algún blog que esté haciendo referencia a la misma a través de Technorati.