BdeM advierte sobre riesgos para economía mexicana
El Banco de México advirtió sobre los factores de riesgo que podrían incidir en un menor dinamismo de la actividad económica en el país en un futuro próximo, entre los que destacan la incertidumbre por una desaceleración de la actividad productiva en Estados Unidos y la pérdida de competitividad de la economía mexicana.
En su Informe de Política Monetaria correspondiente al primer semestre de 2006, alerta en primer lugar, sobre el aumento del riesgo de que la actividad económica estadunidense presente una mayor desaceleración a la anticipada.
Esto, explica, debido al enfriamiento del mercado de bienes raíces y el efecto que esto pudiera tener sobre el consumo privado.
En segundo lugar, advierte el Banco Central, un riesgo que continúa latente es el proveniente de los desequilibrios globales. De hecho, añade, el déficit en cuenta corriente de Estados Unidos se mantiene muy elevado.
En su informe, el instituto central hace referencia a la opinión de diversos analistas que continúan asignando únicamente una reducida probabilidad de ocurrencia a un escenario en donde pudiera presentarse una corrección abrupta de esta situación.
Pérdida de competitividad
Otro factor de riesgo que ha venido afectando adversamente el ritmo de crecimiento de la actividad productiva en México y, por tanto, la generación de empleos, es la pérdida de competitividad de la economía nacional.
Dicha pérdida refleja, sobre todo, la falta de avances para hacer más flexible nuestra estructura productiva, lo que permitiría que diversos insumos estratégicos fluyan de manera expedita y a precios competitivos hacia aquellos sectores en donde se van generando oportunidades de crecimiento.
"El que otras naciones estén avanzando en esta dirección disminuye las ventajas competitivas del país, lo cual dificulta la solución de problemas endémicos en nuestra sociedad, tales como el abatimiento de la pobreza y la muy desigual distribución del ingreso".
El Banco de México consideró que en el segundo trimestre los elevados precios de los energéticos y otras materias primas, en combinación con una mayor utilización de los recursos productivos, implicaron mayores presiones sobre la inflación a nivel mundial.
En el caso de México, el Banco Central estimó que en los meses siguientes se espera que la inflación general anual muestre un repunte transitorio debido, principalmente, a las fluctuaciones que han venido registrando los precios de los productos agropecuarios. Dada esta inestabilidad es previsible que la inflación general anual se sitúe entre 3.5 y 4 por ciento hacia finales de 2006, para retomar su tendencia decreciente en 2007 cerrando en un nivel inferior a 3.5 por ciento.
Financiamiento bancario
Por su parte, el saldo del financiamiento otorgado por la banca comercial fue de un billón 461 mil 900 millones de pesos al cierre de agosto de 2006. Los agregados monetarios y actividad financiera al octavo mes del año detallan que de este monto total, un billón 115 mil 700 millones de pesos fueron destinados al sector privado, 126 mil 900 millones al sector público no bancario 71 mil 900 millones a estados y municipios y 147 mil 400 millones a otros deudores no bancarios.
Del financiamiento al sector privado, un billón 45 mil 500 millones de pesos correspondió al financiamiento directo, el cual registró un incremento anual de 29.3 por ciento en términos reales. El crédito directo a la vivienda tuvo una variación real anual de 82.3 por ciento y el crédito directo al consumo de 45.4 por ciento en términos reales anuales.