Usted está aquí: jueves 13 de julio de 2006 Cultura Confirman que un mural de Rivera fue destruido en China

La Jornada dio a conocer hace seis años la historia de Pesadilla de guerra...

Confirman que un mural de Rivera fue destruido en China

El director del Museo Dolores Olmedo informó del infortunado destino de esa obra

Realizarán y emplazarán una reproducción en ese recinto, anunció Alfredo Philips Olmedo

ANGEL VARGAS

Ampliar la imagen Este mural Pesadilla de guerra y sueño de paz, como informó este diario en marzo de 2000, se perdió en 1957 durante una muestra itinerante por Europa. Se especuló que se encontraba en el Museo Pushkin, de Moscú, lo cual fue desmentido por el director de ese recinto. Ahora se comprueba que la destrucción de la obra ocurrió durante la revolución cultural Foto: Archivo La Jornada

Después de casi medio siglo de incertidumbre, falsas noticias y rumores sobre el paradero del mural Pesadilla de guerra y sueño de paz, de Diego Rivera, se tiene ya la certeza de que fue destruido en China, ''al parecer" durante la revolución cultural de Mao Tse-Tung.

Fue el director del Museo Dolores Olmedo Patiño, Carlos Phillips Olmedo, quien confirmó ayer el infortunado destino de la obra, basándose, afirmó, en investigaciones que comenzaron hace más de un lustro en Rusia y China.

Así llega a su desenlace una historia cuya primicia fue dada a conocer por La Jornada en marzo de 2000, cuando en los primeros días de ese mes la especialista Christina Burrus aseguró haber encontrado esa pieza enrollada en una de las bodegas del Museo Pushkin, de Moscú.

Esa información fue desmentida días después por el director del recinto, en entrevista con el corresponsal de este diario en Rusia, Juan Pablo Duch. Y desde entonces, hasta este martes, todo había quedado en especulaciones.

De acuerdo con Phillips Olmedo, las pesquisas sobre dicho mural -cuyo paradero se desconocía desde 1957, al no regresar de una muestra por países socialistas de Europa y China- implicaron intercambio de información con museos, autoridades culturales y especialistas de esos países, así como consultas hemerográficas.

Ante la certeza de la destrucción de Pesadilla de guerra..., el responsable del museo Dolores Olmedo -recinto que posee la colección de obras de Rivera más importante en el mundo- anunció que éste realizará una reproducción de ese mural, para lo cual ya se solicitó autorización al fideicomiso que detenta los derechos del nombre del pintor mexicano,

La obra será realizada al oléo por el mexicano Angel Vallarta, a partir de fotografías y una reproducción en linotipo propiedad del recinto. Se prevé tenerla lista a mediados del año entrante, cuando se conmemorará el 50 aniversario luctuoso de Rivera.

Utilización para fines didácticos

Phillips Olmedo aclaró que ''de ninguna forma se trata de hacer una copia fiel", y precisó que el objetivo de reproducirla es que sirva para los cursos infantiles que imparte el museo, sobre el trabajo muralístico de Rivera.

Indicó que las dimensiones de este mural serán menores a las del original casi 50 por ciento, al medir ocho metros de largo por tres o 3.5 metros de alto contra los 19 metros de largo por cinco de alto de la obra destruida.

Señaló que será emplazado en un salón de los talleres y cursos infantiles, que está en construcción: ''No lo colgaremos en nuestras salas, porque no exhibimos copias. El objetivo es explicar el muralismo de antes de los años 50, que era contar una historia".

Y como ''nadie es dueño de la verdad absoluta", el promotor cultural dice contar con información para asegurar que el mural fue destruido, ''al parecer", durante la revolución cultural de Mao.

''Y lo único que existen son bocetos: uno que está en el Museo Anahuacalli; tengo entendido que Juan Coronel tiene otro y, por la prensa, me enteré que uno más fue subastado hace algunos meses. No sabemos quién era su propietario."

Elaborado en 1952, un lustro antes de la muerte de Diego Rivera, Pesadilla de guerra... fue inicialmente un encargo del gobierno mexicano al pintor para una muestra que itineraría en varias capitales europeas.

Sin embargo, explicó Phillips Olmedo, de último momento fue excluido por considerar que en él se plasmaba una fuerte crítica política y social que podría resultar poco cortés para algunos países industrializados.

Enojado por esa censura, Rivera lo vendió a los chinos, que le pagaron 5 mil dólares. Como México no tenía en ese entonces relaciones diplomáticas ni comerciales con el país asiático, el mural fue enviado a Checoslovaquia para desde allí trasladarlo a China.

''Se sabe que a las autoridades de China no les agradó el gesto amable del Mao pintado por Rivera en el panel izquierdo y que fue metido en grandes tubos, por lo que puede estar en cualquier bodega", dijo en 2000 la especialista Blanca Garduño a La Jornada.

Homenaje al arte nacional

La muestra Rostros y tradiciones será inaugurada este sábado en el Museo Dolores Olmedo. Incluye 53 obras, de las 380 de la colección privada de la empresa suiza ING. Será un recorrido por costumbres, tradiciones y la construcción de la identidad nacional.

Entre los artistas participantes figuran Rivera, Frida Kahlo, Saturnino Herrán, Francisco Goitia, José Clemente Orozco y María Izquierdo.

 
Compartir la nota:

Puede compartir la nota con otros lectores usando los servicios de del.icio.us, Fresqui y menéame, o puede conocer si existe algún blog que esté haciendo referencia a la misma a través de Technorati.