Usted está aquí: jueves 11 de mayo de 2006 Capital Persiste alto índice de despidos por embarazo: procuraduría laboral

Ha atendido en la actual gestión mil 597 casos, informa el titular

Persiste alto índice de despidos por embarazo: procuraduría laboral

Otras denuncias comunes son por hostigamiento sexual, discriminación y violencia

LAURA GOMEZ FLORES

Ampliar la imagen Una paciente y su hija esperan turno para estrenar las nuevas instalaciones del área de obstetricia del hospital materno infantil de la delegación Magdalena Contreras, que fueron inauguradas ayer por el jefe de Gobierno del DF, Alejandro Encinas Foto: Francisco Olvera

Los casos de despido de mujeres por embarazo, así como de hostigamiento sexual, violencia, discriminación y violación en el sector laboral, atendidos por la Procuraduría de la Defensa del Trabajo, suman en esta administración 3 mil 564, y se presentan por igual en compañías grandes y pequeñas de la ciudad de México, aunque existe una cifra negra de casos no denunciados por temor a represalias, problemas familiares o desconocimiento.

Pese a las campañas de cumplimiento de la Ley Federal del Trabajo y las verificaciones que se realizan en el sector patronal, "no se ha podido erradicar dicha práctica de despidos, aunque hay una disminución respecto de gestiones anteriores", afirmó el procurador José Luis González Larrazolo. Señaló que a esos casos se suman mil 29 quejas presentadas por trabajadoras domésticas de 2003 a la fecha.

De acuerdo con información de la Subprocuraduría de Atención a Mujeres, los empleadores abusan de la ignorancia del personal, y bajo el entendido de que se trata de una "relación laboral de confianza, en la que los acuerdos se establecen sólo de palabra, evaden las prestaciones a las que tienen derecho, como son prima vacacional, aguinaldo y el pago de un salario justo, como está tipificado en la legislación".

"Son mujeres que viven, comen y duermen en un techo que no les pertenece, situación que las hace vulnerables a abusos, discriminación, malos tratos y violencia, pero lo aceptan ante el temor de perder su única fuente de ingresos; muchas, por su edad y nivel educativo difícilmente se podrían reincorporar al mercado laboral", explicó en entrevista.

Expuso que 81 por ciento de las trabajadoras domésticas, según las denuncias atendidas en ese periodo, tenían entre 31 y 75 años de edad; ya no son contratadas con facilidad, aun cuando tengan los conocimientos y la experiencia requerida; cuatro de cada 10 no contaba con ninguna instrucción escolar, tres con primaria y sólo dos con secundaria, lo que muestra la vulnerabilidad de ese sector, señaló.

Solamente una de cada 10 mujeres tenía bachillerato, estudios técnicos o licenciatura, pero la gran mayoría desconoce que la ley obliga a sus patrones a ofrecerles una jornada laboral con tiempo de descanso, un lugar limpio para dormir y alimentación adecuada. Estos últimos aspectos representan 50 por ciento de sus ingresos en caso de indemnización, y además de que deben responder en caso de enfermedad, lo cual no sucede, comentó.

En el mercado laboral, sostuvo, continúan los despidos por embarazo, hostigamiento, violencia, violación y discriminación. El mayor número de casos de despido es por embarazo, pues el patrón "no quiere hacerse cargo de los gastos que implica el que una trabajadora dé a luz, como es la incapacidad con derecho a salario y el pago del Seguro Social, por lo cual busca cualquier motivo para despedirla", indicó.

En esta administración, dijo, se han registrado mil 597 casos de ese tipo, y 725 de hostigamiento sexual, de los cuales a sólo 501 expedientes se les dio seguimiento, y menos de 20 por ciento fueron favorables a las trabajadoras en el pago de indemnización o reinstalación en el empleo, debido a que "es difícil demostrar esa situación y ello provoca que las denunciantes retiren su queja o ya no asistan a las audiencias".

Los casos de violación suman 10, los de discriminación 28 y los de violencia laboral 406, la cual se refiere a agresiones físicas o verbales, intimidación o amenazas; en esas situaciones es citado el patrón a comparecer y se investiga a fondo el asunto, y de no lograrse un arreglo se turna a la Junta Local de Conciliación y Arbitraje, con un abogado que representa a la trabajadora, de manera gratuita, explicó.

Refirió que lo "recuperado" por la procuraduría en los juicios asciende a 76 millones de pesos, pero "seguimos dando la batalla para erradicar esas violaciones a la legislación y que la mujer tenga un trato digno y el lugar que le corresponde en la vida laboral".

 
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