La Jornada Semanal,   domingo 7 de mayo   de 2006        núm. 583

MENTIRAS TRANSPARENTES

Felipe Garrido

SIN LUZ

Aprieta nuevamente los ojos, sacude la cabeza, espera un momento, hasta que la oscuridad se le convierte por dentro en un destello luminoso, una mancha amarilla. Luego vuelve a abrirlos, frente al espejo, y ve esa figura borrosa, como si hubiera llorado. No se reconoce y enciende el candil aunque es de día y el sol entra de lleno por la ventana. Abre y cierra los ojos, hace un esfuerzo para enfocar lo que ve, enciende la lámpara que está en el escritorio y luego, un poco a tientas, siguiendo el recuerdo que tiene de la habitación, las otras dos, a los lados de la cama y vuelve a mirar el reflejo donde una mujer de facciones borradas abre y cierra los ojos, aprieta los dientes, sacude la cabeza. Entonces la recuerda, poco a poco la reconoce, vuelve a verla, como le sucede cada vez más seguido, sentada al lado de la ventana, con el radio encendido, la espalda recta, al través de un paño de sombras, atenta a cada rumor, la imagen de su madre ciega.