Usted está aquí: domingo 7 de mayo de 2006 Estados Encontrar cura en Cuba, esperanza para cientos de mexicanos enfermos de los ojos

Es parte del programa que impulsan médicos de la isla para personas pobres de AL

Encontrar cura en Cuba, esperanza para cientos de mexicanos enfermos de los ojos

Una paciente de Coahuila asegura que fue sanada de las cataratas que padeció 20 años

ALFREDO VALADEZ RODRIGUEZ CORRESPONSAL

Ampliar la imagen Ocho adultos viajarán esta semana a Cuba para ser operados de diversos padecimientos oculares Foto: Alfredo Valadez

Ampliar la imagen El programa Operación Milagro se ampliará en mil 400 zonas rurales del país Foto: Alfredo Valadez

Monterrey, NL, 6 de mayo. Luego de vivir 20 años con la creencia de que no volvería a ver porque "alguien" le había hecho brujería, María de Jesús Morán regresó con la vista sana a su hogar, ubicado en el municipio de General Cepeda, Coahuila, procedente de Cuba.

La habitante del ejido Jalpa, comunidad rural en el sureste del desierto Laguna de Mayrán, es una de las cientos de personas de escasos recursos que padecen una enfermedad en los ojos beneficiadas con el programa Operación Milagro que desarrollan médicos cubanos.

Las vecinas de María le habían advertido que no volvería a ver debido a que "alguien le había hecho un mal". Por ello, durante 20 años vivió afligida y resignada, pues desconocía que tenía cataratas que eran curables.

Asombrada y feliz, la mujer regresó la primera semana de mayo con la vista sana, luego de que oftalmólogos de esa isla la operaron gratuitamente.

Operación Milagro avanza silenciosamente. Sin aspavientos ni publicidad, por orden del gobierno cubano, este programa humanitario se aplica desde el año pasado en México.

"Nosotros no hacemos declaración alguna. El programa es en solidaridad con nuestros hermanos latinoamericanos, porque creemos que es nuestro deber ayudar", señaló José Leyva, vocero oficial de la embajada de Cuba en México.

Sin embargo en localidades marginadas de la montaña y el desierto del país, la gente está más que enterada: en Cuba curan las enfermedades de los ojos sin cobrar nada. Todo, hasta el viaje en avión a la isla, es gratuito.

Mediante este programa, personas que viven en extrema pobreza en Venezuela, Panamá, República Dominicana, Haití, Uruguay, Bolivia y México, entre otros países, son operados de padecimientos como cataratas, desprendimiento de retina, carnosidades y estrabismo.

En 2005 fueron casi 100 mil las personas beneficiadas, y este año la meta de los médicos cubanos es duplicar la cifra.

Se requiere, dijeron, el trabajo voluntario y cuidadoso de organizaciones y personas que detecten, seleccionen y canalicen a la embajada y a consulados de Cuba, los enfermos que no tienen recursos para una cirugía.

En México todo se hace con la autorización de las secretarías de Salud y Relaciones Exteriores y de las autoridades migratorias, previos requisitos.

En el centro y norte del país trabajan en esa tarea el activista Javier Palacios Aguilar y Rufina Cepeda Fierro, presidenta de la organización 100 Mujeres por el Progreso, entre otras personas.

En entrevista, Palacios Aguilar comentó: "Operación Milagro brinda la posibilidad de atención médica a uno de los grandes problemas de salud en México: la vista. Aquí, si tienes dinero puedes hasta ser candidato a trasplantes o acceder a otras alternativas de solución a tus problemas oculares; si pagas, los mejores médicos están dispuestos a atenderte. Pero si no tienes dinero y estás enfermo te puedes morir fácilmente porque la salud se ha convertido, desafortunadamente, en un asunto económico", consideró.

Es sobresaliente, manifestó Jorge Palacios, que con este programa "el comandante Fidel Castro recuerde a los médicos del mundo que la salud no puede estar sujeta al dinero".

Se planea extender la cobertura de Operación Milagro a las mil 500 comunidades rurales de la región ixtlera del país, que abarca parte de los territorios semidesérticos y desérticos de Durango, Zacatecas, Coahuila, San Luis Potosí, Nuevo León y Tamaulipas.

Javier Palacios Aguilar explicó que en esta zona existe un alto índice de enfermedades oculares, debido a que desde 1840 se trabaja la fibra de la lechuguilla, cactácea endémica de estos lugares, cuyo producto, el ixtle, es obtenido mediante procedimientos muy rudimentarios.

El polvillo que produce la talla de la lechuguilla, conocido como guishe, es muy abrasivo y ácido, y al penetrar en los ojos provoca ceguera y también otras enfermedades.

La tierra que levantan las tolvaneras en varios kilómetros cubren comunidades enteras también provoca serias lesiones y enfermedades en los ojos.

A estos males de los pobladores se suma la falta de seguridad social, y por sus escasos ingresos, la atención en clínicas y hospitales privados prácticamente les está vedada.

En las últimas semanas, al menos ocho aviones que trasladaron niños, mujeres, hombres, ancianos, indígenas, campesinos y obreros por igual, han partido desde las ciudades de Monterrey, Nuevo León, y Saltillo, Coahuila hacia el Hospital Pando Ferrer, en La Habana, para ser atendidos.

 
Compartir la nota:

Puede compartir la nota con otros lectores usando los servicios de del.icio.us, Fresqui y menéame, o puede conocer si existe algún blog que esté haciendo referencia a la misma a través de Technorati.