Usted está aquí: lunes 24 de abril de 2006 Economía La desocupación abierta afecta a un millón 500 mi personas, dice INEGI

El nivel de marzo fue 150% superior al observado en diciembre de 2000, afirma

La desocupación abierta afecta a un millón 500 mi personas, dice INEGI

JUAN ANTONIO ZUÑIGA

Sin ceder incluso en épocas de crecimiento económico, la desocupación abierta se mantuvo en marzo en un nivel 150 por ciento superior al que tuvo al comienzo de esta administración, y afecta a un millón 500 mil personas en busca de un empleo que no encuentran en las actividades formales ni en las informales.

Informes del Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (INEGI) permiten estimar que más de 135 mil personas se integraron a las filas de la desocupación abierta en los primeros tres meses de este año, y que sólo uno de cada tres habitantes incorporados a la población económicamente activa durante el primer trimestre encontró algún tipo de ocupación.

De acuerdo con los informes del organismo, en el cuarto trimestre de 2000 el desempleo abierto afectaba a más de 612 mil personas que reunían los requisitos de edad y condiciones para formar parte de la población económicamente activa (PEA), pero que no encontraban ocupación. Lejos de descender, la cifra de desocupados ha ido en aumento durante esta administración.

En el transcurso del gobierno del presidente Vicente Fox, casi 900 mil personas más se han incorporado a la desocupación abierta, de acuerdo con los informes oficiales, en los cuales no se considera a los habitantes que optaron por emigrar hacia Estados Unidos en busca de una oportunidad ocupacional que en su país no encontraron.

En intermitente ascenso, la desocupación abierta se ha extendido a lo largo y ancho del país, con un dinamismo no observado en los sexenios precedentes. La serie unificada sobre la tasa de desocupación del INEGI, indica que ésta se elevó de 2.17 en diciembre de 2000 a 3.42 por ciento en marzo de 2006, ambas como proporción de una PEA cada vez mayor.

Las zonas urbanas, donde radica más de 70 por ciento de la población nacional, han sido las que en mayor medida padecen la carencia de empleos, lo que ha ocasionado que una proporción en aumento de la población que emigra al exterior tenga como lugar de origen los grandes centros urbanos del país, según los estudios realizados por el Consejo Nacional de Población.

La tasa de desocupación abierta en las 32 ciudades más importantes fue de 4.40 por ciento en marzo del año en curso, lo que implica que el fenómeno del desempleo es 28.6 por ciento más intenso y extenso aquí que en la media nacional de 3.42 por ciento.

La formación académica y la experiencia laboral han dejado también de ser un factor de seguridad ocupacional en México. Los informes del INEGI señalan que en marzo de este año siete de cada 10 personas en búsqueda de empleo contaban con estudios de secundaria terminada, bachillerato y licenciaturas o similares.

Pero también 84.3 por ciento de los habitantes en desocupación abierta, esto es, más de un millón 260 mil personas, tenían experiencia laboral, porque en alguna ocasión tuvieron empleo y hoy carecen de este medio de subsistencia individual y social.

 
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