Usted está aquí: domingo 16 de abril de 2006 Opinión La tejanita de papel

Bárbara Jacobs

La tejanita de papel

Los extremos de vigas que sobresalen de los rincones en los techos de las casas hacen que los caseríos al lado de las carreteras de México me depriman. Esto, y que sean trapos o cartones mal colocados contra las ventanas sin vidrio, y no cortinas, lo que los pobladores usen en sus casas para protegerse del sol, de la lluvia, por desgracia de la luz y, por encima de todo, del polvo y el viento. El viento, digo, porque el aire y la brisa no penetran ni circulan en estos amontonamientos de viviendas inconclusas y pobres que uno ve al lado de las carreteras de México y se deprime.

Yo me deprimo, pero a los extranjeros les encantan. Un poco chuecas, algo mal colocadas, pobres, feas, irregulares, estas viviendas que forman los pueblos y las afueras de las ciudades y ciertos barrios y una que otra cuadra de las colonias ricas de México, me deprimen porque quiero a México. Y a los extranjeros les encantan porque, ¿por qué? ¿Porque no quieren a México?

Los mexicanos que se van del país extrañan las botellas de refrescos y de cervezas vacías atoradas entre ramas y hojas de las plantas medio secas que bordean las aceras de las calles de México; las bolsas de celofán, las cajetillas vacías de Faros y Delicados, los paquetes abiertos y sin contenido que llenan los baches en las calles de México; el desorden, la pobreza, la desidia al lado de las carreteras.

Frente a todo esto me deprimo, digo, y si viajo no lo echo de menos; pero los mexicanos que viven fuera, o los extranjeros que ya conocen México, regresan a México para encontrarse una vez más con los extremos de vigas que sobresalen de los rincones en los techos de las casas al lado de las carreteras de México que a mí me deprimen. Las paredes descascaradas, el olor a pobreza, la falta de esperanza.

Sin embargo, cuántos y cuántos extranjeros encuentran estas cosas encantadoras. Hubo una tejana que se enamoró de México, del español que se habla y se escribe en México, y que dio clases de todo esto en Texas en la década de los años 20 del siglo XX. Fundó una asociación con miembros encantados y encantables con México. Se reunían para hablar el español de este país, para oír su música y leer su literatura. Cuando un mexicano pasaba por ahí lo invitaban a sus reuniones para oírlo hablar. Eran suscriptores de Pajarita de Papel; leían esta publicación y la comentaban. Querían estar al día y no sentirse lejos de México.

La tejana se llamaba Esther R. Brown. Cuando viajó a México por primera vez fue alumna de Julio Torri en los cursos de verano de la Universidad Nacional. En las cartas que ella le escribió a Torri se dirige a él como "Julito". Cuando él habla de ella en las cartas que le escribe a Alfonso Reyes se refiere a ella como "La tejanita", y le pide que la reciba y la atienda en la Residencia de Estudiantes en Madrid porque es culta (lectora de Wilde y Shaw), inteligente y encantadora.

Esther R. Brown y Julio Torri pasaron de ser alumna y maestro, a enamorados, a amigos finalmente. Ella le inspiró a Torri el texto Anywhere in the South. Y el investigador, crítico y profesor Serge I. Zaïtzeff, especialista en Torri, edita y presenta un admirable libro bajo este título con las cartas de Esther R. Brown a Torri, las de Torri sobre ella a Reyes y, especialmente, con Anywhere in the South.

El título fue el imán que me atrajo a tomar en las manos el pequeño volumen, una piedra preciosa entre libros de grandes ventas y de literatura esotérica. También, la fotografía de la cubierta, "Vista trasera del tren Solarium", de la Canadian Pacific, Bettman/Corbis, 1929. Qué gusto me dio encontrar Anywhere in the South, con qué gusto lo leí y recuerdo mi lectura; con qué gusto recomiendo el libro. Acaba de ser coeditado por la Universidad Nacional Autónoma México/ DGE/Equilibrista, en la colección Pértiga, que quiere decir vara larga, de largo alcance.

 
Compartir la nota:

Puede compartir la nota con otros lectores usando los servicios de del.icio.us, Fresqui y menéame, o puede conocer si existe algún blog que esté haciendo referencia a la misma a través de Technorati.