ASTILLERO
Falsas dignidades
Rebelándose por un hueso
Senador Azteca y Niño Verde
Madrazo critica a priístas
LA PRIISTA NO ES, en realidad, una "rebelión", sino una serie de escaramuzas de reacomodo de ambiciones maltratadas e insatisfechas. En el barullo sabatino de los priístas no se defendieron principios ni ideas, sino lugares de privilegio en el reparto del pastel legislativo. Todo agravado por el estilo tramposo y demagógico de un absorbente personaje, Roberto Madrazo, que en funciones de candidato, coordinador de su propia campaña y presidente virtual del partido ha prometido más de lo que podía cumplir y ha engañado a múltiples interlocutores, que a pesar de acuerdos privados se han topado con traiciones públicas.
ALLI ESTA EL PRIISMO CUPULAR metido en revuelos de presuntos aires democratizadores que no se detienen a criticar ni impugnar los verdaderos saldos trágicos: la continuidad de las viejas prácticas corporativas, con las cuotas básicas para liderzuelos chantajistas. La corrupción de los sectores: el cetemismo políticamente senil e invariablemente corrupto; el cenecismo dirigido por un caciquillo empeñado en candidaturas privilegiadas para sus hijos; el cenopismo sin más fuerza que unas siglas olvidables; los petroleros representados por su líder colindante con lo carcelario, el emblemático Carlos Romero Deschamps.
Y, EN MEDIO de esa acelerada descomposición interna, nadie de esa elite presuntamente rebelde es capaz de tocar con el pétalo de una suspicacia la postulación (virtual senaduría, pues va en los sitios que garantizan llegar al escaño casi obligadamente) del vicepresidente de Televisión Azteca, Jorge Mendoza, el operador político de Ricardo Salinas Pliego, que así pretende tener en el Senado un representante directo de esos intereses empresariales y mediáticos. Como si nada, como si fuera lo más natural, los "revolucionarios" del PRI asumen como válida la postulación de Mendoza, que no hace sino confirmar las ambiciones de poder de los consorcios televisivos y la pretensión de convertir los espacios legislativos en mecanismos de convalidación de iniciativas y cambios legales, como ha sucedido con la ley de la triple T (Televisa, Televisión Azteca y Telmex).
NO SOLO TELEVISION AZTECA forma parte del menú legislativo obligatorio que el priísmo receta a la política mexicana por seis años: allí está también el Niño Verde, quien a pesar de su sabida proclividad corrupta, de los escándalos constantes y del despilfarro de dinero público otorgado a su franquicia familiar, ha asegurado tres años más de fuero y negocios oscuros (irá a San Lázaro, luego de seis años como senador). Ejemplos preciosos de las aberraciones del sistema político vigente, el senador Azteca y el Niño Verde forman parte de la nómina oscura que los priístas presuntamente rebeldes e inconformes ni siquiera se atreven a cuestionar, empeñados en conseguir para ellos lo mismo que critican por despecho.
ROBERTO MADRAZO, mientras tanto, ofrece el espectáculo del enojo a cuenta de "intereses superiores". Le enoja que quienes no tienen candidatura peleen públicamente sin preocuparse del daño que le estarían haciendo a la postulación suprema, divina, del propio Madrazo. En especial, el tabasqueño está enojado con José Ramón Martell López Portillo, alguien que estuvo en su primer círculo, pero que se fue distanciando en el proceso que dejó en la presidencia del tricolor a Mariano Palacios, merced a una negociación de última hora de Madrazo con Arturo Montiel (antes del escándalo de las propiedades inmobiliarias del mexiquense y sus familiares). Martell López Portillo, al igual que Manlio Fabio Beltrones, creyó llegado el momento de asumir el liderazgo formal del partido tricolor. Cuando Martell se enteró de que Palacios era el elegido, renunció a su cargo en el comité nacional priísta (era secretario de organización) e inició un camino de confrontación con su antiguo jefe, que le llevó el sábado pasado a encabezar el rechazo a las listas de candidatos presuntamente aprobadas por Madrazo.
LA RIÑA INTERNA VA PARA LARGO. Sólo en las candidaturas a las gubernaturas de los estados, el priísmo vive conflictos nunca pensados: la renuncia del enmartizado Wintilo Vega en Guanajuato, la indefinición del caso de Marisela Sánchez en Morelos, los golpes y escisiones en Chiapas y los riesgos de división en Tabasco (elección interna de cuyos resultados no se tenían datos a la hora de redactar la presente columna). Y, desde luego, las hogueras de vanidad en que se consumen Emilio Chuayfett y Alfredo del Mazo.
PERO ALGO SI ES SEGURO: lo peor de lo peor sigue teniendo su lugar, ¡faltaba más!
ASTILLAS: López Obrador le ha lanzado metralla de fabricación casera a Felipe Calderón: el candidato blanquiazul sería una especie de René Bejarano, pero sin videos, según dice el perredista (con mucho conocimiento de causa). El esposo de Dolores Padierna fue videograbado por Ahumada Productions, pero al ex secretario foxista de Energía nadie lo ha podido captar cuando recibe maletas de dinero -posiblemente con una buena dotación de ligas- de banqueros o empresarios como, por ejemplo, Roberto Hernández, el que fue dueño de Banamex... Hoy cumplirá años la señora Marta. Ayer, saliendo de misa, dijo en San Cristóbal, Guanajuato, que hay una persecución política contra sus hijos, quienes simplemente han ejercido "el derecho de trabajar de acuerdo con la legalidad". ¡Oh, sí!... El presidente Fox hizo cuanto le fue posible para aparentar que tenía mérito en las reformas migratorias que parecían inminentes en Estados Unidos, pero ahora que el proceso se ha estancado -entre pleitos partidistas gringos- ya no hace más que repetir rollos insustanciales, sin acciones políticas concretas... Y, mientras se realizan hoy manifestaciones en Estados Unidos en favor de las reformas migratorias, y mientras los mexicanos encuentran maneras precisas de apoyarlas, ¡hasta mañana, en esta columna santa!
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