Usted está aquí: sábado 1 de abril de 2006 Opinión EN EL CHOPO

EN EL CHOPO

Javier Hernández chelico

Reggae, metal y ciberpunk

SOLO EN TERRITORIO chopero pueden convivir propuestas musicales supuestamente disímiles como el reggae, el metal ñu y el cyber punk. Hoy, estas tres manifestaciones musicales tendrán cabida en la programación cultural del Tianguis del Chopo: de Canadá llega Colectivo, bandononón -son 13 músicos- polirítmico que le entra con singular furor a los sonidos latinos; ellos obsequiarán una probadita de ska y reggae made in Canadá al personal asistente a Radio Chopo; Colectivo compartirá audiencia con los filosos sonidos que produce la fusión metalosa de Mono Fuego. Allí mismo, el bajista de Cuca, Carlos Avila, presentará su proyecto personal, llamado Las horas muertas de Virgilio Nadies Codejo; completan el cartel Inversa Aniquilación, Tzetari, Efecto Curare y Alexi Timia. Y para que todos los grupos se puedan mostrar chido, la tocada empezará a las 11 de la mañana en el lugar acostumbrado: Aldama y Luna, colonia Guerrero.

EN LA GALERIA Juantxo Sillero -ubicada al centro del Tianguis- hoy se podrá contemplar Cyber punk: Murmullos de la conciencia II, muestra pictórica de Adán Arias López; la exposición está compuesta por esculturas y cuadros que consiguen capturar la atmósfera punketosa posmoderna. Por otro lado, el espacio dedicado a exposiciones fotográficas estrena coordinador en la persona de Leonardo Marín, quien presenta la colección fotográfica de Raquel Mestas titulada Transeúntes. Marín espera mantener este espacio como la única sala callejera que apoye el trabajo de fotógrafos nóveles, sin dejar de mostrar el de los grandes maestros de la lente de todos los tiempos.

Armando Palomas en Aguascalientes

AYER EN LA noche, en el bar Rocksi de la capital hidrocálida, Armando Palomas autofestejó sus 10 años de rápsoda posmoderno. Como parte de la celebración presentó su nueva grabación realizada ex profeso para esta fiesta. El disco en cuestión es un compendio de esquetches musicales donde Palomas no deja títere con cabeza. Las provocaciones empiezan desde el mismo nombre del disco: Que se muera el rock y que viva el mambo. En el arte destacan las ilustraciones/caricaturas de Rocko Garduño: se aprecia una de Rigo Tovar enmarcada por la frase "Entre más roquers pasan, más te extraño don Rigo", clara alusión a la tercera rola, llamada Rupestre 2000 (My harakiri). La canción dice: Soy un rupestre y me siento incomprendido/ pa' ser rupestre tienes que estar jodido/ toco cada año en los tributos pal' Rodrigo... Ay, san Rodrigo para que te nos moriste. El corte que da nombre a la grabación es una declaración de principios, y el disco es en sí un ceremonial al desmadre. Alcanzan mención -nada honorífica- Inspector, Jaguares, Maná, el hijo del Santo y muchísimos personajes urbanos. La rola 11 se titula Lora' songs iguales. Está de risa loca. En el último track -The future of rock- Armando profiere serias amenazas. Hay que oírlas.

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