El presidente del TEDF, Hermilo Herrejón, se deslinda de la postura del magistrado
Bermúdez da la cara sólo para aclarar que no dijo lo que dijo
Pidió remover de esa fuente a dos reporteras
Ahora les ofrece disculpas
Acepta indagación
El magistrado Estuardo Mario Bermúdez Molina admitió que durante la entrevista que se hizo a un aspirante a ocupar el cargo de coordinador de comunicación social del Tribunal Electoral del Distrito Federal (TEDF) preguntó: "¿qué tan factible puede llegar a ser que un medio de comunicación cambie a sus reporteros de la fuente?" Pero, justificó, (la pregunta) fue "genérica, no di nombres y jamás se pidió afectar a nadie".
Insistió en que preguntó tan sólo "como una inquietud de quienes no somos parte del medio, de eventualmente hacer ese movimiento".
A 15 días de que La Jornada dio a conocer parte de la versión estenográfica de la reunión privada del pleno del TEDF, celebrada el 9 de febrero, en la que Bermúdez Molina comentó: "... hay un aspecto muy particular que en lo personal considero perfectamente identificado: tenemos dos reporteras, mujeres, de dos diarios con tendencias opuestas, incluso, que nos han agarrado ahora sí que de clientes", el magistrado decidió hacer algunas precisiones.
Deslinde
Ayer, al término de la sesión pública del TEDF, Bermúdez Molina leyó ante los medios de comunicación un par de cuartillas, en las que aclara que había decidido mantenerse al margen de lo "que parecía ser el cuestionamiento a un magistrado, por lo que supuestamente había dicho en el marco de una sesión privada del órgano jurisdiccional al que pertenece.
"Creo que el alcance que este asunto ha generado hace necesario, por obligación ética de mi parte, precisar."
Ya en la ronda de preguntas se le recordó al magistrado que en la reunión hizo alusión a dos reporteras, y que en ningún momento aclaró al magistrado Raciel Garrido -quien puso nombres y apellidos-, ni al entrevistado que hace una amplia exposición sobre ellas.
"La pregunta era en términos generales", reiteró, e informó que la versión estenográfica de esa reunión no ha sido firmada por todos los miembros del tribunal electoral, "porque ahí se dicen muchas cosas que nada tienen que ver con el punto. En ese sentido yo no puedo controvertir, y ciertamente no desmentí cuando otro magistrado mencionó los nombres de dos personas".
Precisó que por cuestiones de tipo familiar entró y salió en varias ocasiones del salón donde se llevaba a cabo la entrevista con el aspirante a ocupar el cargo de coordinador de comunicación social.
Justificación
Durante la reunión no sólo se dio el nombre de las reporteras y los medios, sino sobre los directores de esos diarios y cómo hablar con ellos, ¿usted nunca advirtió al entrevistado que no se refería a alguien en especial?, se le insistió.
"Yo no dirijo los debates del pleno. No soy el presidente. En un momento dado no es función que competa a un magistrado integrante del mismo. En el marco de las reuniones privadas tenemos un absoluto respeto a la libertad de expresión de nosotros como servidores públicos, y de quien comparece ante nosotros", reviró.
En la comparecencia, el aspirante a coordinador de comunicación señaló que requeriría de un presupuesto de dos millones de pesos para mejorar la imagen del TEDF. -¿Quizás para callar a los medios? -se le preguntó.
-Efectivamente, pero era para desarrollar el programa institucional de comunicación social del tribunal electoral, área que, aseguró, permanece acéfala desde hace nueve meses.
Por último, y a manera de disculpa, lamentó todas las consecuencias nocivas y perjudiciales que este asunto ha acarreado y se manifestó a favor de que haya una investigación, ya que en ésta, dijo, saldrá a relucir la "verdad auténtica, la verdad real, valga la expresión, de lo que aconteció. Se va a aclarar por la instancia correspondiente lo que se ventiló y se dijo realmente por cada uno de nosotros en esa reunión privada".
Minutos antes, en una entrevista breve, el presidente del TEDF, Hermilo Herrejón, se había deslindado de la postura de Bermúdez Molina.