Crecerá el mercado negro de documentos falsos, y polleros podrían ligarse con narcos
Aumentará delitos el intentar frenar la migración ilegal: autoridades fronterizas
Nogales, Arizona, 15 de marzo. Ante el fortalecimiento de las medidas de seguridad para impedir la migración indocumentada por las rutas tradicionales de los polleros, el mercado negro de los documentos falsos se incrementa rápidamente. Tan sólo en la puerta de entrada Dennis DeConcini, la garita principal de esta ciudad, son decomisados diariamente un promedio de 25 documentos apócrifos tanto de México como de Estados Unidos.
En un esfuerzo por mantener la seguridad de la zona, que incluye el combate a este tipo de ilícitos del crimen organizado, el próximo 27 de abril autoridades de ambos lados de la frontera arrancarán un programa piloto, el cual pretende ser permanente, para mejorar la comunicación y establecer un sistema de emergencia entre los cuerpos policiacos de los dos países. Este programa iniciará simultáneamente en esta ciudad y Nuevo Laredo, para hacerse extensivo en forma paulatina a todas las demás urbes fronterizas, según lo establece el Acuerdo de Seguridad y Prosperidad de América del Norte (ASPAN).
Junto a esta actividad ilegal de la documentación falsa, en Estados Unidos permanece la preocupación por el terrorismo. El director de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Nogales, Arizona, Joe Agosttini, señala, sin dar cifras, que permanentemente son detenidos en esta frontera personas "sospechosas" de estar "ligadas" al terrorismo, según los bancos de datos de corporaciones policiacas federales de Estados Unidos, incluida la FBI.
En medio de esta realidad, existe la preocupación de que ante la complejidad de los cruces y realizarlos como tradicionalmente se habían hecho en décadas pasadas, el crimen organizado adquiera una mayor profesionalización y desplace a los actuales polleros, en una acción que requerirá una mayor red de complicidades y de infraestructura, que incluso pudiera vincularse también con el narcotráfico.
Hoy en día las rutas que tienen los traficantes de drogas y de personas son muy similares, pero aún no se aprecia con suficiente claridad alguna vinculación entre estas actividades ilícitas, las dos más lucrativas del mundo, aunque se estima que sólo sea cuestión de tiempo, lo cual fortalecería aún más el poder del crimen organizado en la región fronteriza, según expresan ya diversos especialistas.
La frontera Sonora-Arizona es donde se dirigen entre 40 y 50 por ciento de los casi 400 mil migrantes que anualmente expulsa México en busca de mejores condiciones de trabajo y de vida, pero también Arizona es identificada como la entidad líder de Estados Unidos para frenar la migración indocumentada. En esta región se hacen también casi la mitad de las deportaciones. También en el estado donde se registra el más alto número de pérdidas humanas a causa del fenómeno migratorio que en los pasados cinco años arrojó un saldo de 2 mil 411 connacionales muertos en su intento de cruzar la línea fronteriza.
Pero paradójicamente, Arizona también es la frontera por donde ingresa el mayor volumen de alimentos desde México, al cruzar casi 60 por ciento de todos los productos perecederos que exporta nuestro país a Estados Unidos. En un tránsito fluido las mercancías llegan al puerto de entrada conocido como La Mariposa -actualmente en ampliación-, donde se registraron casi 350 mil ingresos de tráileres con este tipo de mercancías, con un valor estimado superior a los 14 mil millones de dólares el año pasado.
Las drogas también cruzan por esta frontera. Independientemente de las 225 toneladas de estupefacientes que decomisó la Patrulla Fronteriza sólo del sector de Tucson en el año fiscal 2005, la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza aseguró casi 300 toneladas de estupefacientes, incluyendo las drogas duras como metanfetaminas, cocaína y heroína