Lamenta la Presidencia de la República que los mexiquenses no acudieran a votar
Celebran partidos sus triunfos pírricos; olvidan que la abstención fue de 60%
El PRD se dice el "gran triunfador" y el PAN se congratula por "mantener su fuerza"
El Partido de la Revolución Democrática (PRD) se proclamó como el gran triunfador de los comicios del domingo pasado en el estado de México, al afirmar que junto con el PT y Convergencia conforma "la primera fuerza política" en la entidad y porque fue la única formación política que incrementó su votación, respecto de los comicios en que se eligió al gobernador del estado, gracias "al efecto López Obrador".
Ese optimismo no fue compartido por el presidente del Senado de la República, Enrique Jackson, quien dijo que los resultados demuestran que el 2 de julio "nadie se va a llevar todo ni perderá todo". El secretario de acciones del Partido Acción Nacional (PAN), Arturo García Portillo, sostuvo que la dirigencia nacional del blanquiazul se congratula de mantener los mismos niveles de votación.
Por su parte, el vocero presidencial, Rubén Aguilar, prefirió hablar sobre el alto índice de abstencionismo (60 por ciento) en las elecciones, en las que se eligieron presidentes municipales y diputados locales, y destacó su preocupación por la falta de asistencia ciudadana a las urnas.
A manera de reclamo, el vocero presidencial agregó: "la ciudadanía debe ejercer ese derecho (al sufragio) y obligación, y sí lamentamos esa baja votación".
El dirigente panista agregó que "el gran perdedor" en los comicios fue el PRI, y calificó de falso el señalamiento de que el blanquiazul se derrumbó. "En términos numéricos no hay ningún problema; mantenemos nuestra fuerza, muy sólida, que consiste en cinco de los 10 municipios más grandes del estado. Arrasamos en Toluca, Naucalpan, Izcalli, Atizapán y Tlalnepantla", aseveró.
Al optimismo del PRD se sumó el jefe de Gobierno del Distrito Federal, Alejandro Encinas, quien sostuvo en conferencia de prensa que los resultados son "buena señal y un escenario precedente de los comicios presidenciales", por la recomposición de las fuerzas políticas, aunque lamentó que no se diera la participación ciudadana esperada.
"Unos se mantuvieron con su voto duro, otros cayeron y hay una recuperación importante del otro (el PRD), que se perfila como tendencia electoral significativa."
A su vez, el dirigente nacional del PRD destacó que su partido alcanzó por sí solo 30 por ciento de votos, contra 26 por ciento del PAN y 33 por ciento del PRI, pero añadió que ya como coalición, con el PT y Convergencia, el porcentaje llega a 40, lo cual los convierte en la principal fuerza política en la entidad.
Asimismo destacó el triunfo de los abanderados perredistas en los dos municipios más grandes: Ecatepec y Nezahualcóyotl; mantuvo las alcaldías de Texcoco, Ixtapaluca, Chalco, Valle de Chalco y otros del oriente de la entidad.
También mencionó el crecimiento del voto amarillo y negro en el llamado corredor azul, particularmente en Tlalnepantla, donde aumentó 28 por ciento.
Cota minimizó el marcado abstencionismo. Ello se debió, dijo, a la inconformidad de la población "con los que gobiernan".
Por su parte, el delegado del Comité Ejecutivo Nacional del PRD en el estado, Ricardo Monreal, dio a conocer cifras contundentes que desmienten lo dicho por la dirigencia blanquiazul. "Hace 3 años logramos 10 distritos de mayoría, y hoy tenemos 18; hace tres años ganamos 21 municipios, hoy 18, y cuatro más están todavía en veremos, por lo cerrado de la votación."
Pero además, sostuvo, "en la reciente elección sufragaron un millón 850 mil mexiquenses. El PRD obtuvo 860 mil votos y el PAN un millón 970 mil. La votación en favor del PRI se desplomó de un millón 800 mil a casi un millón 100 mil, es decir, perdió casi 700 mil en ocho meses; lo mismo ocurrió al PAN, y el único que creció fue el PRD, de 800 mil a un millón 100 mil, o sea, 300 mil más en sólo 8 meses, y ése es el efecto López Obrador".