Usted está aquí: miércoles 1 de marzo de 2006 Economía Fragilidad de finanzas públicas, sombra para el próximo gobierno

A pesar de ventas récord, Pemex invirtió en 2005 con dinero prestado, dice Hacienda

Fragilidad de finanzas públicas, sombra para el próximo gobierno

Sucesor de Fox enfrentará las consecuencias de la caída de precio del crudo y la dependencia de los ingresos petroleros, afirma S&P

¿Qué se hace con la bonanza de precios petroleros?, pregunta

ROBERTO GONZALEZ AMADOR Y ANTONIO CASTELLANOS

Aun con las ventas históricas logradas en 2005, Petróleos Mexicanos (Pemex) realizó todas sus inversiones del año anterior con dinero prestado, aceptó este martes la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP). Mientras, la correduría internacional Standard and Poor's (S&P) anticipó que sobre el siguiente gobierno ''va a pesar la sombra'' de la fragilidad de las finanzas públicas derivada de la dependencia de los ingresos petroleros.

''El riesgo a que están expuestas las finanzas públicas está relacionado con una desaceleración de la economía mundial y una caída en los ingresos del gobierno federal por una reducción en el precio del petróleo'', manifestó Alejandro Werner, titular de Planeación Económica de la SHCP. Admitió la alta dependencia que tiene el gasto público de las exportaciones de crudo.

En la novena conferencia anual de la firma financiera Fimat, subsidiaria bursátil de Société Genérale, Víctor Manuel Herrera, director general en México de S&P, planteó que el gobierno actual no ha realizado inversión productiva con los ingresos adicionales por la venta de crudo, que representan 2.2 puntos del producto interno bruto (PIB).

El lunes pasado, Pemex dio a conocer que en 2005 realizó ventas por 928 mil 400 millones de pesos, cifra sin precedente, que representó un incremento anual de 16 por ciento. Debido al régimen fiscal vigente en el ejercicio anterior, que implica una serie de impuestos equivalente a 106 por ciento del flujo de efectivo de la empresa, se causó una pérdida de patrimonio cercana a 14 mil millones de pesos.

Alejandro Werner manifestó que 8 de cada 10 pesos adicionales de que ha dispuesto el gobierno este sexenio han tenido su origen en el petróleo. En esta administración el gasto público ha subido en 2 puntos porcentuales del producto interno bruto y de esa cantidad, 0.7 puntos han sido destinados a gasto de capital y 1.3 puntos a gasto corriente, dijo el funcionario. Herrera comentó que se prevé una disminución en los petroprecios, por lo que, añadió, la siguiente administración se verá forzada a realizar ajustes al gasto, por la falta de corrección en la estructura de las finanzas públicas.

Ambos coincidieron en que durante el presente año no habrá inestabilidad en las finanzas públicas, a pesar de que se celebrarán las elecciones generales más competidas. Alejandro Werner estuvo de acuerdo con el director general de S&P México, en el sentido de que si los ingresos petroleros caen en el curso de los próximos años, el sector público tendrá que hacer una corrección al gasto.

Werner admitió que una parte importante de la inversión de 10 mil millones de dólares que realiza al año Pemex se está financiando con mayor endeudamiento, y explicó que el nuevo régimen fiscal de la paraestatal le dará a la empresa mayores recursos propios con los cuales podrá disminuir en forma importante ese proceso.

En el mismo foro, Ariel Yepez, subdirector de Planeación Económica de Pemex reconoció que mientras en otras partes del mundo las empresas petroleras emplean la bonanza de precios para reducir sus niveles de deuda o realizar inversiones para mejorar sus procesos, Petróleos Mexicanos se sigue endeudando para cumplir con sus compromisos de inversión.

Víctor Manuel Herrera consideró que la inversión realizada actualmente por Pemex, del orden de 10 mil millones de dólares al año, no es nada menor, aunque se efectúa con la contratación de deuda. La empresa requiere duplicar sus inversiones para lograr reponer la totalidad de las reservas petroleras -ahora la tasa de reposición es de 50 por ciento. ''Todo esto nos lleva a pensar en qué estamos haciendo con la bonanza de precios petroleros'', añadió.

Se refirió a la calificación de la deuda externa de México, que ahora tiene grado de inversión, y señaló que ésta no podrá ser modificada en tanto no se avance en las reformas estructurales. Es positiva la estabilidad macroeconómica, la tendencia de la inflación a la baja, así como las tasas de interés, pero se requieren las modificaciones legales en los sectores de energía, laboral y fiscal, y anotó que la última favorecería los ingresos mediante una mayor recaudación.

Martín Werner dijo que en 2006 el endeudamiento de Pemex va a ser sustancialmente menor que en otros años, y los recursos propios, después de impuestos, también van a ser muy superiores para financiar su gasto de inversión.

Señaló que otro paso importante en la reforma de la empresa serán los cambios que se tienen que llevar a cabo a nivel legal para hacerla más eficiente y disminuir los controles a los que está sujeta. Esto representará una importante reducción en la estructura de costos y un aumento sustancial en su eficiencia y economía.

 
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