Usted está aquí: sábado 18 de febrero de 2006 Política El priísmo, enfermedad que se quita con el tiempo, afirma López Obrador

Justifica en Coahuila que el PRD incluya a ex tricolores en lista de candidaturas

El priísmo, enfermedad que se quita con el tiempo, afirma López Obrador

Llamó a priístas y panistas de base a sumarse a su proyecto; el problema, con las cúpulas

ANDREA BECERRIL Y LEOPOLDO RAMOS ENVIADA Y CORRESPONSAL

Saltillo, Coah., 17 de febrero. El priísmo es una enfermedad que se quita con el tiempo, señaló el candidato de la coalición Por el Bien de Todos, Andrés Manuel López Obrador, y defendió la estrategia del Partido de la Revolución Democrática (PRD) de incluir a ex integrantes del Partido Revolucionario Institucional (PRI) para cargos de elección popular.

Fue un tema recurrente, ya que durante el mitin que encabezó en la plaza de armas de esta ciudad, ante cerca de 10 mil simpatizantes, el político tabasqueño llamó a priístas y panistas de base a sumarse a su proyecto de nación, y dejó claro que el problema es con "los de arriba", con las "cúpulas".

A pesar de que "alguien" maniobró para evitar que se trasladaran a esta capital residentes de diversos regiones de la entidad, sobre todo de La Laguna, "la plaza está repleta", comentó Raúl Sifuentes Guerrero, ex funcionario priísta y candidato a senador por Coahuila que ahora trabaja en la campaña de López Obrador.

Su presencia en el templete motivó algunas voces de protesta, que él pasó por alto, para señalar el respaldo a López Obrador de su organización Decisión Coahuila y denunciar "los problemas que hubo con el transporte", ya que 40 autobuses no pudieron llegar a La Laguna y otros puntos lejanos del estado, pese a que la gente cooperó para contratarlos y poder trasladarse al mitin en Saltillo.

Estaba satisfecho, porque aun con el boicot -del que muchos responsabilizan al gobierno estatal-, a la concentración acudieron miles de estudiantes, amas de casa con sus hijos, trabajadores, ancianos, además de la militancia del PRD, Partido del Trabajo y Convergencia.

Desde el templete, con la vista de la catedral a un lado -donde oficia el obispo Raúl Vera- y el palacio de gobierno al otro, López Obrador recalcó que el problema no es con la militancia del PRI, sino con "los de arriba", los que han hundido y empobrecido al país, como Carlos Salinas de Gortari.

Aunque en la mayoría de sus discursos insiste en ese tema, este viernes tenía un sentido especial, ya que se fraguan más desprendimientos de cuadros priístas para sumarse a su proyecto. Por lo pronto, ayer en el templete lo acompañó la diputada Laura Reyes-Retana, quien acaba de dejar el tricolor y aplaudía las palabras del candidato.

Por la mañana, en Torreón, durante una entrevista en una estación radiofónica, López Obrador fue interrogado sobre las candidaturas de ex priístas y el caso específico de Raúl Sifuentes Guerrero, quien fue secretario general de Gobierno durante la administración de Enrique Martínez y Martínez y ocupó otros cargos, como el de subprocurador de justicia en La Laguna.

En el PRD hay "filtros"

Respondió que corresponderá al pueblo de Coahuila determinar si su adhesión se basa en principios o es oportunismo. Hizo notar que, en ese sentido, en el PRD están pendientes de que no vayan a incorporarse al partido "gente con antecedentes criminales".

Hay filtros para que no se den acercamientos que no convienen, agregó, pero aclaró que eso no está en sus manos, sino en otras instancias del PRD o de la coalición, aunque remarcó: "Nosotros no tenemos nada que ocultar".

Hizo notar que parte de las campañas en su contra se basan en que fue priísta, aunque de eso hayan pasado ya más de 20 años. "Yo sólo estuve 11 meses en el partido, nada más, y no tengo nada de qué avergonzarme".

Agregó: "El priísmo es una enfermedad que se quita con el tiempo".

Por la tarde, frente a cientos de banderas, mantas de apoyo y un entusiasmo manifiesto de miles de asistentes al mitin, López Obrador expuso sus 31 compromisos "para rescatar a Coahuila del atraso y el abandono" en que la dejaron 23 años de gobiernos neoliberales. Entre otros puntos incluyen las pensiones para ancianos, becas para discapacitados, medicamentos gratuitos y prioridad a la educación pública.

Además, medidas para fomentar la industria y acabar con la desocupación, ya que Coahuila, que en las décadas recientes fue uno de los estados más industrializados del país, tiene hoy una de las tasas de desempleo más altas, con 40 mil puestos de trabajo menos en lo que va del sexenio foxista.

A cada planteamiento, el candidato encontró eco en la multitud; cuando "presumió" que su ventaja, según las recientes encuestas, se ha elevado, que se reafirma como el puntero en la contienda, lo festejaron con exclamaciones de alegría y el coro de "¡sí se puede, sí se puede!, seguido por el de "Andrés, presidente".

Cobijado por la calidez de su auditorio, López Obrador pidió a los asistentes convencer a amigos, familiares y compañeros de trabajo de participar en su proyecto. Les hizo notar que sus adversarios tratarán de frenarlo "con dinero o con trampas", y es cuando se requiere que la sociedad civil se involucre de lleno para impedirlo.

López Obrador no finge: evangélicos

Antes de llegar a Saltillo, López Obrador se reunió en Torreón con dirigentes de la Confraternidad Nacional de Iglesias Cristianas Evangélicas (Cofraternice). Fue un encuentro calificado de bueno tanto por el candidato presidencial como por el presidente de la agrupación, el pastor Arturo Farela Gutiérrez. La impresión que dejó el candidato es, dijo, la de "un libre pensador", que "no es fanático, ni fundamentalista", sino "un hombre que no finge".

-¿Es su gallo?

-El voto es secreto -respondió.

Sin embargo, expresó que la Cofraternice, que afilia a más de 10 mil iglesias en todo el país, con 20 millones de feligreses, tiene capacidad para influir en el proceso electoral y se entrevistará con todos los candidatos presidenciales para conocer sus propuestas. A López Obrador, agregó, lo percibieron como "un hombre seriamente preocupado por hacer respetar la separación entre Iglesia-Estado, por un trato justo e igualitario a todas las iglesias.

"Vemos también a un candidato que tiene una preocupación por los pobres verdaderamente seria, vimos también a un hombre que no finge". El pastor Farela deslizó también que el candidato de la coalición Por el Bien de Todos es consciente del "crecimiento vertiginoso" de la Iglesia evangélica, cuya presencia en algunas entidades como Chiapas, Chihuahua y Tabasco es mayoritaria.

Al concluir el encuentro, el tabasqueño comentó que fue importante el intercambio de puntos de vista, ya que quien aspire a gobernar al país no sólo debe atender lo material, el bienestar económico de los ciudadanos, sino también los valores sociales y morales.

 
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