Usted está aquí: miércoles 1 de febrero de 2006 Estados Aprueba el ayuntamiento cuestionado megaproyecto inmobiliario en Cancún

Incluye la construcción de torres de 20 pisos; presunta falsificación de documentos

Aprueba el ayuntamiento cuestionado megaproyecto inmobiliario en Cancún

HUGO MARTOCCIA CORRESPONSAL

Ampliar la imagen La recuperación de las playas devastadas por Wilma se iniciará este miércoles. La secretaria estatal de Turismo, Gabriela Rodríguez, dijo que a pesar de la demora de 15 días los trabajos terminarán el 30 de abril, como estaba programado, pero aclaró que no se ha concretado el proyecto para que las costas queden de 60 metros de ancho. La funcionaria señaló que esta última operación requiere una inversión extra de 160 millones de pesos, y ni gobierno federal ni el sector hotelero se han comprometido a aportar los recursos Foto: Luis López Soto

Cancún, QR, 31 de enero. El ayuntamiento de Benito Juárez (Cancún), que encabeza el priísta Francisco Alor, dio luz verde a la construcción de residencias y condominios en la zona hotelera de este destino turístico. Sin embargo, este proyecto estaría viciado de origen, pues el acta que lo aprueba habría sido alterada por el ex alcalde interino Carlos Canabal, de extracción perredista, y nunca fue publicada en el periódico oficial del estado.

El proyecto denominado Gran Península incluye, entre otras construcciones, 16 edificios de 20 pisos, y según ecologistas y autoridades estatales fue aprobado la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) y por la Dirección de Ecología del ayuntamiento a pesar de no tener sustentabilidad ecológica ni urbanística.

Francisco Alor es enemigo político de Carlos Canabal, quien suplió en la alcaldía a Juan Ignacio García Zalvidea, El Chacho, cuando éste contendió por la gubernatura del estado. Hoy ambos están unidos en un presunto negocio irregular que involucra varios millones de dólares.

En el kilómetro 16.5 de la zona hotelera de Cancún, a la orilla de la laguna Nichupté, se planea construir 94 casas, 20 residencias, 21 edificios de cinco niveles y 16 de 20 niveles, en una superficie de 223 mil 558 metros cuadrados, según consta en el dictamen aprobatorio emitido por la Dirección General de Impacto y Riesgo Ambiental de la Semarnat, con el número 2493.05.

Este desarrollo, no previsto en los planes originales de este puerto turístico, se permitió gracias a que el cabildo encabezado por el ex alcalde interino Carlos Canabal aprobó un cambio de uso de suelo el 25 de febrero de 2005.

La ex regidora Latife Muza dijo que las actas de las sesiones 76 y 77 del cabildo, en las que se aprobaron los cambios, fueron alteradas y se falsificó su firma.

La sesión 76 fue publicada en el periódico oficial del estado sin los cambios de uso de suelo, mientras la sesión 77 nunca fue publicada, lo que en principio haría inválido el cambio de uso de suelo.

Latife Muza dijo que en junio pasado presentó una denuncia penal contra Carlos Canabal por uso de documentos falsos, y agregó que la Procuraduría de Justicia estatal ha frenado esa demanda.

Por su parte, el director de Impacto y Riesgo Ambiental de la Semarnat, Ricardo Juárez -señalado por autoridades locales como gestor del proyecto-, se deslindó del asunto y afirmó en la radio oficial del estado que la Dirección de Ecología constató la factibilidad de la obra, según consta en el oficio 3106 del 14 de octubre de 2005.

 
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