Irán considera "débil" la posibilidad de que el asunto llegue al Consejo de Seguridad
Aumenta la presión de Occidente en el caso del programa nuclear iraní
Tel Aviv advierte que "bajo ninguna circunstancia" permitirá a Teherán un arsenal atómico
Viena, 18 de enero. Al aumentar la presión de Occidente en torno a su programa nuclear, Irán consideró "débil" el riesgo de ser enviado ante el Consejo de Seguridad de la Organización de Naciones Unidas en la próxima reunión de la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA), convocada de manera urgente por Alemania, Francia y Gran Bretaña para el 2 y 3 de febrero.
Sudáfrica pidió a Occidente dialogar con la república islámica, mientras continuaban las divisiones entre China y Rusia, partidarios de negociar con Irán, Estados Unidos y la troika europea, que rechazaron una oferta iraní de reanudar negociaciones sobre su programa nuclear, que asegura tiene fines pacíficos.
Por lo pronto, ya comenzó a circular un proyecto de resolución para la AIEA que daría luz verde para trasladar el caso iraní al Consejo de Seguridad de la ONU, mecanismo que a su vez podría imponer sanciones a la república islámica en represalia a su programa nuclear, el cual, según sostienen Estados Unidos y sus aliados europeos, le permitiría construir la bomba atómica.
En todo caso, el gobierno iraní reiteró, a través de su canciller Mauchehr Mottaki, que de turnarse su programa nuclear a Naciones Unidas se vería obligado a revisar su cooperación con la AIEA.
Un importante diplomático aseguró que "de una manera o de otra el caso va a ir a Nueva York", sede de Naciones Unidas, tras la petición hecha por la troika europea.
Estados Unidos y sus aliados de la Unión Europea (UE) rechazaron la propuesta de Irán de volver a sentarse a negociar en una reunión sostenida en Washington entre la secretaria estadunidense de Estado, Condoleezza Rice, y el representante de la Política Exterior del organismo del viejo continente, Javier Solana.
Señalaron que no tiene sentido un nuevo encuentro si los iraníes no tienen nada nuevo que poner sobre la mesa. "Fueron los iraníes los que se retiraron de las negociaciones, pues ellos rompieron la moratoria" de las actividades nucleares, dijo Rice sobre los esfuerzos encabezados por Alemania, Francia y Gran Bretaña.
La UE rompió el diálogo con Irán en agosto pasado después que Teherán anunció la reanudación del proceso de conversión de uranio, previo para el enriquecimiento.
Merkel y De Villepin confían en alcanzar un acuerdo
En Berlín, la canciller federal alemana Angela Merkel y el primer ministro francés Dominique de Villepin, expresaron sus esperanzas de que la comunidad internacional actúe unida y se alcance un amplio acuerdo para solucionar la disputa con Irán.
A su vez, el embajador iraní en Moscú, Gholamreza Ansari, afirmó que "no se ha agotado el potencial de la AIEA, ni el de la negociación, y que la propuesta rusa sigue sobre la mesa", en referencia a la oferta de enriquecer uranio iraní en Rusia.
El presidente de Irán, Mahmoud Ahmadinejad, dijo que el borrador de resolución de la UE que remitiría al Consejo de Seguridad para posibles sanciones contra su país, tiene motivos políticos y les pidió que actúen con más lógica.
El vocero del Consejo Supremo de la Seguridad Nacional, Hossein Entezami, advirtió del retiro de su país de los protocolos sobre el tema nuclear de la AIEA si el caso es llevado a la ONU, al recordar las posibles represalias de la República Islámica.
Israel, que envió una delegación a Rusia para negociar, pidió aplicar sanciones para Teherán y afirmó que "bajo ninguna circunstancia" permitirá que un Estado con "intenciones hostiles" posea armas nucleares. A su vez, Sudáfrica llamó a Occidente al diálogo para reducir las tensiones.