Usted está aquí: jueves 15 de diciembre de 2005 Opinión MEXICO SA

MEXICO SA

Carlos Fernández-Vega

Favorecen cambios a la ley que trasnacionales hinquen el diente al negocio de la energía

Creativa maniobra para poner a Pemex al servicio del capital privado

Las rebanadas del pastel:

A GOLPE DE leyes reglamentarias y adiciones o modificaciones a las mismas, que violentan la Constitución, los últimos tres gobiernos -léase gerencias- han abierto la puerta trasera para que el capital privado, especialmente trasnacional, no sólo participe en áreas reservadas al Estado, sino que se queden con la mejor parte de ellas, como en el caso concreto del sector energético.

COMO NO LOGRAN concretar los cambios constitucionales por ellos promovidos, por medio de subterfugios legales y alianzas políticas vergonzantes han facilitado el acceso de firmas privadas a la par que debilitado a las empresas del Estado para que a la vuelta del tiempo -¡sorpresa!- la inversión privada -fundamentalmente extranjera- controle 30 o 40 por ciento de la generación eléctrica del país, explote a plenitud las grandes zonas de gas natural, controle la energía eólica y demás recursos.

NO AVANZAN CON la misma rapidez en el sector petrolero, pero para ello existen las concertacesiones, como la que operó el pasado martes en el Senado de la República para que el capital privado le clave el diente a Petróleos Mexicanos en uno de los negocios más rentables, es decir, "la crema de la electricidad, por ser la más barata y redituable" -como la definió un legislador-, la cogeneración eléctrica entre Pemex, CFE y Luz y Fuerza.

POCO MAS DE dos años atrás, en noviembre de 2003, las comisiones unidas de Energía, Gobernación, Estudios Legislativos y Puntos Constitucionales del Senado de la República emitieron un dictamen, con proyecto de decreto, por medio del cual aprobaban la cogeneración de energía eléctrica de Pemex con la Comisión Federal de Electricidad; el documento explícitamente cancelaba cualquier posibilidad de que el capital privado, nacional o extranjero, participara en esta actividad.

CONSIDERAMOS, SUBRAYABA EL dictamen, "que la cogeneración debe ser una obligación del Estado, no sólo una posibilidad, si es que realmente se busca otorgar una solución inmediata, y no que quede como una facultad discrecional... De acuerdo con los estudios Pemex cuenta con un potencial de cogeneración de 4 mil megavatios, que constituyen alrededor de 10 por ciento de la capacidad instalada del sistema eléctrico nacional. Es viable, que en un término de seis años, la paraestatal, en conjunto con CFE, sea capaz de alcanzar dicha capacidad".

EL DICTAMEN SE envió a la Cámara de Diputados. Cinco meses después, en abril de 2004, San Lázaro lo regresó a Xicoténcatl con el texto adulterado con el fin de que el capital privado sí participara en dicho proceso de cogeneración, que por ser el más bajo en costo es el mayor en ganancias. Veinte meses después, los concertacesionados senadores lo aprobaron al "reformar" la Ley Reglamentaria del Artículo 27 Constitucional en materia de petróleo.

LOS DOS DICTAMENES -el original y el adulterado- hablan de beneficios, aunque con sus matices: el primero para los mexicanos; el segundo para el capital privado. Con las "reformas" mencionadas, el Estado sigue debilitándose y los empresarios ya tienen medio cuerpo metido en Petróleos Mexicanos, tal y como sucedió en la Comisión Federal de Electricidad, en donde ya despachan a sus anchas.

COMO LEGALMENTE NO pueden poner Pemex al servicio del capital privado, se hacen los creativos, y no sólo adentro, como en el caso anterior. También afuera y allí está el llamado "Programa de Integración Energética Mesoamericana", un jugoso negocio que los gerentes centroamericanos y mexicanos armaron para las trasnacionales energéticas que operan en la zona.

EL SECRETARIO DE Energía, Fernando Canales Clariond, ayer reconoció que los gobiernos de los 10 países participantes en esta intentona de proyecto carecen de "excedentes de recursos" para invertir en los proyectos previstos en el "Programa", los cuales implicarían alrededor de 7 mil 100 millones de dólares.

COMO NO TIENEN dinero, los gobiernos son gestores y el capital privado el beneficiario. El pastel completo para los ganadores del "proceso de licitación".

¿QUIENES SERIAN ELLOS? Retomemos el paseo, que con ayuda de la Cepal, hicimos en entregas anteriores: uno de los problemas centrales es que los mercados nacionales en Centroamérica son controlados por oligopolios. Las trasnacionales Esso, Shell y Chevron-Texaco importan 53 por ciento del total de combustibles líquidos, mientras el gas licuado de petróleo (GLP) está en manos de la familia Zaragoza (Grupo Tomza de Tomás Zaragoza -Unigas, en México, Tropigas, Gas del Pacífico, Gas Caribe, en América Central; Zeta Gas, con sede en Ciudad Juárez, Chihuahua, de Miguel Angel Zaragoza Fuentes) Centroamérica es importador neto de hidrocarburos.

¿CON QUIEN NEGOCIARIA Pemex? No con los gobiernos regionales. Sino con las trasnacionales, regionales y nacionales que controlan el abasto y comercialización de los productos petroleros.

EN IMPORTACION Y refinación, las trasnacionales energéticas que operan en Centroamérica directamente controlan, en promedio, 53.3 por ciento (otra porción por medio de "asociaciones" con capitales nacionales o regionales). En El Salvador ese indicador se incrementa a 86.2 por ciento, en Nicaragua a 80.7 por ciento y en Panamá a 83.9 por ciento.

DE LAS 2 mil 836 gasolineras existentes (2004) en Centroamérica, 51 por ciento son propiedad de trasnacionales (Esso, 356; Shell, 566; Chevron-Texaco, 528). Se observa la presencia de tres grandes empresas (Esso, Shell y Chevron-Texaco) en cuatro de los países centroamericanos, con excepción de Nicaragua, donde sólo participa Esso.

POR LAS CARACTERISTICAS oligopólicas y la debilidad institucional en algunos países, individualmente las trasnacionales han tenido la capacidad de ejercer las presiones necesarias para mantener privilegios o beneficios en las estructuras de precios, cuando éstos han estado regulados.

ESA ES LA "ayuda" a los centroamericanos".

AL INQUILINO DE Los Pinos no le gustan los monopolios, como Pemex. Cuídense, entonces, Bimbo, Cemex, Telmex, Televisa y demás empresas cercanas al "cambio"... Tecla de plomo: en la entrega de ayer se coló un espantoso "filling" por un felling, amén que tal cual se fue un "erario público". Disculpas y mi agradecimiento, como siempre, a los correctores por su invaluable intervención.

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