La clave es no temer, dice Picolín Palacios

Si Boca juega sucio, Pumas también lo hará: Verón

CARLOS HERNANDEZ

"El Boca Juniors juega sucio y nosotros también tenemos que jugar sucio", sentenció el zaguero de los Pumas Darío Verón respecto al partido del próximo domingo por la Copa Sudamericana.

El defensa central aseguró que el equipo mexicano no se va a achicar ante el laureado cuadro argentino. Por el contrario, "desde el principio vamos a jugar de igual a igual y en busca del gol. No vamos a regalar nada. Si nos quieren ganar, también tendrán que morirse dentro de la cancha".

Los Pumas están "ansiosos" de que inicie el duelo definitivo -luego del 1-1 en CU- y en opinión del paraguayo "tenemos plantel para dar la sorpresa", además de que ya se mentalizan para enfrentar a un equipo canchero como Boca. "En Sudamérica se mete más la pierna y así tenemos que jugar", apuntó Verón, cuyo compatriota Carlos Amarilla será el árbitro.

"Es el mejor silbante de Paraguay. Tiene personalidad y no creo que Boca influya en él... Sí, ojalá y nos eche una manita", dijo entre risas.

"Jugar sin miedo" es la clave de Marco Antonio Palacios para enfrentar a las estrellas del Boca. "Yo los veía por la televisión, en especial a Martín Palermo, y no me imaginaba enfrentarlos. Ahora debemos demostrar que estamos igual o mejor preparados que ellos".

Para el apodado Picolín será "un gran sueño" coronarse en La Bombonera: "Sería algo maravilloso dar la vuelta de campeones en ese estadio. En una final todo puede pasar, pero se gane o pierda nuestros aficionados van a poder decir que estos Pumas se la rompieron", expresó y rechazó estar presionado al ser el elemento novato del plantel.

En el encuentro del México 68 Palacios no pudo despejar el esférico y de ahí surgió la anotación xeneize, algo que ya dijo haber superado: "Al momento sí me afectó la jugada, pero ya lo asimilé. Lo bueno del futbol es que te da revanchas y espero sacarme esa espinita el próximo domingo".

Gerardo Galindo admitió que el cuadro auriazul irá como víctima, pero "eso será en el papel, ya que en la cancha no lo vamos a ser. Sabemos que no somos los favoritos, pero eso nos permitirá jugar relajados".

El seleccionado nacional sabe que el título les permitiría no sólo superar su pésimo torneo local, sino también "jugar el partido más importante de nuestras carreras y también el de la institución a escala internacional".

Los Pumas viajarán la tarde de este jueves a Buenos Aires con la consiga de "demostrar al futbol sudamericano que México puede ser campeón, no nos interesa ser un buen segundo lugar". Tanto así, que el Jerry ya sueña con un regreso triunfal, cargando el trofeo y festejando con sus fanáticos en el Angel de la Independencia.

"Sé que eso es fantasear, pero tenemos las armas para hacerlo realidad", expresó.