MEXICO SA
¿Dónde están los beneficios del libre comercio pregonados por Fox?
¡Cuidado!, presidente en tierras extranjeras
Las rebanadas del pastel:
ALGO EXTRAÑO LE sucede al presidente Fox, porque a 24 horas de su llegada a Busán, en Corea del Sur, todavía no insulta a nadie, amenaza a terceros países con romper relaciones ni tiene que defender a capa y espada "la dignidad de los mexicanos". Qué bueno, pero no hay que cantar victoria, porque el encuentro del APEC en aquella ciudad no ha concluido.
EN VIA DE mientras, el inquilino de Los Pinos ratificó su culto al libre comercio por ser, dijo, "clave de crecimiento económico" y factor invaluable en la generación de empleo, afirmación que provoca las primeras dudas.
EN LOS CASI 12 años transcurridos desde que el primero de enero de 1994 se puso en marcha el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (mejor conocido en el país simple y llanamente como TLC) la tasa anual promedio de crecimiento económico ha sido de 2.89 por ciento, menos de la mitad de la registrada en el periodo 1934-1982, es decir, 6 por ciento anual (no se considera el sexenio de Miguel de la Madrid, porque la intención no es deprimir a nadie, aunque ese fue el periodo en el que, unilateralmente, las puertas nacionales comenzaron a abrirse de par en par).
EL PRESIDENTE FOX presumió en Busán que además del TLC con Estados Unidos y Canadá, México ha firmado 43 tratados de libre comercio con distintas naciones y bloques del mundo, lo que a su juicio ha impulsado el avance del producto interno bruto del país ("estamos absolutamente convencidos de que la apertura de nuestra economía al comercio con el resto del mundo ha sido positiva para el crecimiento").
DURANTE SU ADMINISTRACION han sido firmados un buen número de esos tratados, pero en los hechos el crecimiento económico por él ponderado brilla por su ausencia, a menos que el ministro del ALCA considere que una tasa anual promedio de 1.86 por ciento (como la que registra México en los cinco años de "gobierno" foxista) no sólo es espléndida y envidiada por la comunidad de naciones, sino que refleja los enormes beneficios que ese regalo divino llamado libre comercio ha brindado a México y los mexicanos.
TODO INDICA QUE la economía mexicana camina como los cangrejos. No hay que olvidar que ese 1.86 por ciento de crecimiento anual promedio se da en plena paz macroeconómica, sin que nada técnicamente justifique drásticos movimientos (versión oficial). Consumido 83 por ciento de su periodo constitucional (es decir, cinco de seis años), el gobierno de Zedillo reportaba una tasa anual promedio de crecimiento económico de 2.87 por ciento (incluidos "errores de diciembre" y crisis financiera), y en igual lapso, pero del innombrable, dicho indicador fue de 3.8 por ciento.
SOLO PARA DAR una idea, en sexenios anteriores al de Miguel de la Madrid, en los primeros cinco años de gobierno la situación fue la siguiente: 5.19 por ciento con Lázaro Cárdenas; 6.08 por ciento con Avila Camacho; 6.14 por ciento con Alemán Valdés; 6.64 por ciento con Ruiz Cortines; 5.49 por ciento con López Mateos; 6.2 con el genocida Díaz Ordaz; 6.27 por ciento con Echeverría y 7.97 por ciento con López Portillo... Con Fox y su maravillosa maquinaria económica, envidia de la comunidad de naciones, 1.86 por ciento.
ESO ES EN cuanto al crecimiento económico producto del libre comercio, defendido a "capa y espada" por el inquilino de Los Pinos. Faltan los beneficios de este mismo mecanismo en materia laboral.
INDEPENDIENTEMENTE DE LOS bajos salarios, la carencia de prestaciones sociales, el crecimiento del sector informal, el vergonzoso incremento en los índices de expulsión de mano de obra y la changarrización de la economía, el presidente Fox también le encuentra beneficios al libre comercio en materia de empleo, según dijo en Busán.
MEXICO, ASEGURO, SE ha beneficiado "de la liberalización comercial, que "ha ayudado a la creación de empleo, como proceso clave de las obligaciones sociales del gobierno". También repitió aquello de que la tasa de desempleo en el país es una de las más bajas de América Latina y puede competir incluso con las de Europa.
NADIE SABE AL empleo en dónde o de quién, porque para el caso mexicano con o sin libre comercio la generación de plazas laborales también brilla por su ausencia, como el crecimiento económico.
LA ESTADISTICA OFICIAL indica que en los últimos ocho años (es decir, cuando el TLCAN desarrolló su mayor potencialidad) sólo se generaron 2.7 millones de empleos en el sector formal de la economía, es decir, 28 por ciento de la demanda real en el mercado laboral del país, o lo que es lo mismo sólo 28 de cada cien mexicanos en edad y condición de trabajar se ocuparon, aunque a últimas fechas la mayoría de ellos de forma eventual.
EN ESE LAPSO, el empleo formal permanente reporta un raquítico crecimiento de 14 por ciento, mientras que el empleo formal eventual avanzó 188 por ciento, todo ello como parte de los beneficios que el libre comercio ha brindado al país en materia laboral.
EL DISCURSO DE Fox no ha cambiado, pero vale anotarlo para que se compare con las cifras que el propio gobierno difunde. Entre otras cosas, en Busán aseguró que el libre comercio ha contribuido directamente a la creación del empleo en México. Así como vemos que sucede en otras economías del APEC. En el caso de México la tasa de desempleo, medida con el mismo sistema recomendado por instituciones internacionales, está hoy alrededor de 3.7 por ciento. Esta es la más baja en América y la menor comparada con Europa y todo esto es resultado de nuestro libre comercio y de la atracción de inversión. Nos queda claro el camino a seguir, nuestra ruta para el futuro.
"MEXICO HA ALCANZADO un nivel de 400 mil millones de dólares en comercio. Esto significa muchísimos empleos que han sido creados a lo largo de los 12 años en que ha estado vigente, pero tenemos que trabajar aún más y hemos decidido, las tres economías del TLCAN ver hacia los siguientes 10 años para integrarnos aún más, para facilitar aún los intercambios en educación, cultura, tecnología", se ufana Fox.
Y CUANDO DESPERTO, el desempleo y la falta de crecimiento seguían allí.