A LA MITAD DEL FORO
Filtraciones y videojuegos
LOS CARGOS DE ministros de la Suprema Corte son vitalicios. Eso hace casi irresistible la tentación de integrarla con paniaguados, compañeros de viaje, con correligionarios, como decían los cronistas de antaño. Viene a cuento por la propuesta de George W. Bush, repudiada por sus propios fieles, los ultraconservadores de la verdad única que impera y fundamentalistas que encabeza el propio George W., cristiano renacido. Los suyos dijeron no.
EN MEXICO, ERNESTO Zedillo dio de baja a los ministros de la Corte y procedió a designar a los conservadores que hoy despachan ahí con el crucifijo en la mano y la ambición de legislar, además de interpretar las normas constitucionales. Nadie se opuso, a pesar de que entre la jubilación de los que se fueron y la toma de posición de los designados por el presidente de la insana distancia, se quedó la República sin uno de los tres poderes de la Unión. En crisis constitucional, pues. Y como milagroso colofón al desatino imperial de integrar una Corte de corte a la medida del presidente en turno, o de lo que sus incondicionales hacen pasar por ideas, la serpiente muerde su propia cola y los neoconservadores de allende el Bravo rechazan a la abogada texana de la familia que George W. Bush propuso para ocupar el cargo vacante por la muerte de la ministra Sandra Day O'Connor.
MAYOR ESCANDALO EL de las filtraciones y traiciones de funcionarios de la Casa Blanca que revelaron santo y seña de una agente de la CIA, Valerie Plame, esposa del embajador Joseph Wilson, quien denunciara la manipulación de informes de inteligencia para justificar la invasión de Irak. Las guerras fantasmagóricas del espionaje que fracasó en la prevención del ataque a las Torres Gemelas de Manhattan y en la persecución de Bin Laden, ahogan a Washington en filtraciones de mentiras y falsedades que cimbran al patriotismo invocado para combatir al terrorismo a costa de los derechos individuales y de las libertades de sus ciudadanos. Allá, la pretensión de legitimar la tortura. México ya forma parte del Estatuto de Roma. Pero aquí las filtraciones también son instrumento para el desprestigio del adversario y para disciplinar la tímida disidencia al reino de la democracia sin adjetivos y la demolición de las instituciones en el nombre de Dios.
PERO LOS FISCALES especiales mexicanos investigan el pasado. No sea el diablo y fuera alguno a topar con la fuente y origen de alguna de esas filtraciones que sacuden a la política de los videojuegos electorales y han desprestigiado a tirios y troyanos. En Washington, el fiscal especial, Patrick Fitzgerald, acusa a Lewis Libby, "mano derecha" del vicepresidente Dick Cheney, de obstrucción a la justicia y perjurio. Cargos formales de declaraciones falsas durante la investigación criminal sobre la filtración a los medios del nombre de la agente secreta de la CIA. No termina ahí el asunto: el fiscal ha indiciado a otros funcionarios, entre ellos al llamado "cerebro" del presidente Bush, Karl Rove.
SUS PROPIOS CORRELIGIONARIOS, los conductores del malhadado neoconservadurismo que ha impuesto la verdad única en el imperio del nuevo orden global, rechazan la selección de George W. Bush, del relevo en la Suprema Corte que prolongaría el control de los ultraconservadores que ya son mayoría. Y revientan las cañerías de la Casa Blanca. Al estilo de El espía que salió del frío, los gobernantes a cuyo servicio trabajaba la agente secreta Valerie Plame revelan su identidad, la exponen al ludibrio, a riesgo de su vida y de su dignidad. Las mentiras que se reproducen en la guerra de palabras se traducen en guerra de auténticas armas de destrucción masiva y en el sacrificio de vidas en el altar del becerro de oro.
EN NUESTROS COMBATES imaginarios, en los videojuegos electoreros de filtraciones que se han salido de madre y son ya diluvio de lodo, de basura que amenaza empantanar a las instituciones que nos permitieron llegar al estadio de elecciones legales y creíbles, a resolver los diferendos poselectorales ante tribunales y no en la calle o en concertaciones vergonzosas y vergonzantes: el IFE y el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación. El sistema plural de partidos, declarados "entidades de interés público" por la Constitución general de la República, así como al financiamiento público, a cargo del erario, han sido puestos bajo sospecha, desprestigiados por la inconcebible campaña de la ceguera que los denuncia desde el Poder Ejecutivo ante la corte inapelable del príncipe electrónico.
NADIE ESCAPA A los juicios sumarios de los videojuegos. Felipe Calderón festeja su notable triunfo en las primarias primerizas del PAN. El gozo, las risas y sonrisas que prodiga a las puertas de Los Pinos y ante las cámaras de la televisión, no pueden borrar la penosa imagen de Santiago Creel, campeón de las causas justas en los prolegómenos del videojuego; cómplice del poder mediático al que obsequiara concesiones de centros de apuestas, y finalmente, obcecado, lacrimoso perdedor, aferrado a la ilusión de una segunda vuelta en la que descendiera algún deus ex machina que lo volviera al papel de apóstol Santiago. El del caballo blanco. De Alberto Cárdenas, apenas el juego de espejos que pretendió deslumbrar con bendiciones cardenalicias y con la declaración de un valedor patriarca empresarial y guía de legionarios.
AL CESAR LO QUE es del César. Norberto Rivera llama a la desobediencia civil desde el púlpito de Catedral. Y el lego que despacha en Bucareli se persigna con el derecho a la objeción de conciencia, mientras dejan correr el falso debate hacia la eutanasia. ¿Dónde hablé de la eutanasia?, diría esta semana de huracanes, diluvios y burlas, el cardenal Rivera. Pero nadie le toma la palabra desde el Estado laico cuestionado, con los bárbaros no a la puerta sino al interior del poder constituido. Efectivamente, señor cardenal, no habló directamente de la eutanasia, sino del deber de los fieles, de su obligación de no obedecer las leyes que sean opuestas o contrarias "al derecho natural". Vale, pero además llamó a ese pueblo a la desobediencia civil. Nadie escapa, decíamos. Salvo los de la clerigalla. Sursum corda.
ANDRES MANUEL LOPEZ Obrador emprende campaña de a pie, sin recurrir a la televisión porque no tiene dinero. Y su encargado de finanzas declara a los dueños de Televisa y Televisión Azteca beneméritos de la democracia, mexicanos ejemplares. El de Macuspana acude al mismo set donde exhibieron el video en el que Bejarano se guarda los dólares que le entrega Ahumada. El conductor Víctor Trujillo, ayer Brozo, charla ante cámaras con Andrés Manuel López Obrador; intercambian sonrisas y elogios, incursionan en las profundidades metafísicas de la política como imperativo ético y moral, sin mención alguna del juicio, condena y ejecución del operador político del entrevistado. De quien entonces y ahora afirma que se trató de un complot, de una conjura, de un montaje en contra de su proyecto de nación.
TIENEN MIGA LOS videojuegos. La encuesta telefónica de esa mañana preguntaba por quién se inclinarían los de la enorme audiencia al programa. Y el resultado favoreció a Everardo Moreno sobre Roberto Madrazo en proporción de ochenta y tantos por ciento en favor de aquel, y algo más de 12 por ciento para el tabasqueño. Y eso que en estos días diluviales nadie ha recordado que a Carlos A. Madrazo lo llamaban "el ciclón del sureste". Nadie escapa. Arturo Montiel subió al patíbulo y cayeron vertiginosamente el PRI y Roberto Madrazo en las encuestas que proliferan como hongos en el pantano de nuestra patética política. Ya anuncian la diáspora en el partido otrora hegemónico. Dicen que renunciarán Roberto Campa, Genaro Borrego, Eduardo Bours y Diódoro Carrasco. Más han de ser. Pero ni los diputados del SNTE se animan a cambiar lo seguro por unas estampitas de Cristo Rey.
LA DERECHA HA impuesto condiciones aquí y en la globalidad del imperio del nuevo orden y la verdad única. Pero mal anda el ropaje del emperador que es desnudado por los suyos, por los más fieles, por los extremistas de la ultraderecha que lleva por nombre anglosajón el de neoconservadurismo. George W. Bush volverá a las largas siestas y las tardes de ocio. Ganó las elecciones intermedias, invadió Irak y Afganistán. Es el "lameduck" clásico, pero el poderío imperial es tal que le permitirá lanzarse a la aventura en Levante y, quizás, arrastrar a la ONU a ocupar Siria.
DESPUES DE LA tormenta, Vicente Fox condona impuestos a los hoteleros y empresarios de Cancún y la Riviera Maya. El jueves 27 de octubre anunció la moratoria fiscal. Al día siguiente, viernes, se publicó en el Diario Oficial de la Federación. Todavía no se declaraba formalmente zona de desastre a las entidades que devastó Stan. Las cosas de palacio van despacio, decían antes del cambio. Cuando volaba rumbo a España, Vicente Fox regañó a los gobernadores de Oaxaca, Puebla y Veracruz por la falta de previsión, por no contar con un fondo para desastres. No tenemos para hacer frente al terrible rezago, a la miseria de la mayoría, respondió Ulises Ruiz.
AHORA, PASADA LA tormenta, los pobres escombran entre las ruinas, pero el temporal no cesa en el juego de las campañas electoreras en el lodazal. Acusan al gobernador de Quintana Roo, y en los barrios se lanzan cargos contra funcionarios que presuntamente se apoderan de las despensas para usarlas después en la campaña de Roberto Madrazo. El gobernador Félix González Canto no cayó en la provocación: todo el apoyo a los damnificados por el huracán Wilma se recibe y distribuye en estrecha coordinación con el Ejército y el DIF.
DERROTADOS POR LOS elementos y sometidos al dominio de los videojuegos, los de la troika de la que saldrá el próximo titular del Supremo Poder Ejecutivo de la Unión, harían bien en hacer cuentas y no hacer caso de cuentos para adormecer a los espectadores del torneo en el lodo. ¿Cuántos votos daba el SNTE al PRI en la mitografía de las siete décadas de poder incontestado? La maestra milagrosa podría ilustrar a Felipillo santo. Recursos y operadores hasta en la seccional más distante, los que hagan falta. Votos, puede que sí, puede que no, lo más seguro es que quién sabe.
VOTOS DUROS, VOTOS útiles, de indecisos, de conversos. Lo que cuenta es cuántos. Lo demás es cuento.