Usted está aquí: martes 27 de septiembre de 2005 Estados El factor Z se impondrá nuevamente a cacicazgos de Guerrero, prevén encuestas

El PRD obtendrá el control del Congreso local y los municipios más importantes

El factor Z se impondrá nuevamente a cacicazgos de Guerrero, prevén encuestas

MISAEL HABANA DE LOS SANTOS CORRESPONSAL

Acapulco, Gro., 26 de septiembre. El factor Z, como se conoce al fenómeno social que encabezó el empresario Zeferino Torreblanca Galindo y permitió al Partido de la Revolución Democrática (PRD) ganar la gu-bernatura en febrero pasado, podría influir nuevamente en las preferencias del electorado guerrerense, que el próximo do-mingo elegirá a 77 presidentes municipales y 28 diputados.

De acuerdo con diferentes encuestas, el sol azteca encabeza las preferencias electorales y se prevé que obtenga la ma-yoría en el Congreso local y los municipios económicamente más importantes del estado, como Acapulco, Iguala, Zihuatanejo, Taxco y Chilpancingo.

Más aún, dichos sondeos muestran que el mandatario estatal gobernará cómodamente después del proceso electoral, con diputados del partido que lo llevó al poder y los legisladores zeferinistas de otros institutos políticos, que llegarán como plurinominales, y juntos harán mayoría.

Torreblanca Galindo logró colocar sus candidatos en los primeros lugares de listas plurinominales en el PAN y Convergencia, este último encabezado por el acaudalado comerciante Luis Walton Aburto, quien en su búsqueda de la alcaldía acapulqueña ha usado publicitariamente la imagen de "su amigo", el gobernador de Guerrero, para enfrentar al político, actor y cantante perredista Félix Salgado Macedonio.

Los dos primeros candidatos plurinominales de la lista del PAN son el ex presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana local, Jorge Bajos Valverde, hermano del director de comunicación social del gobierno estatal, César Bajos Valverde; ambos son "hermanos" de bautizo de Torreblanca.

El otro aspirante es el propietario del pulpo camionero de la entidad, el ex priísta Francisco Rodríguez Otero, quien controla el transporte urbano en el puerto de Acapulco y se incorporó a las filas panistas a través de la organización Amigos de Fox. Por muchos años utilizó la infraestructura vehicular bajo su mando para llenarle plazas al PRI o al "señor gobernador" en turno. Hasta hace poco fue dirigente estatal del PAN.

En Convergencia, partido del que priístas y perredistas aseguran "es una franquicia adquirida por Luis Walton Aburto en Guerrero", los primeros aspirantes plurinominales de la lista también son zeferinistas: Mario Ramos del Carmen, Víctor Fernando Pineda Menez -ex militante del Partido Comunista- y María Guadalupe Pérez Urbina.

El llamado factor Z redujo en poco tiempo el poder que detentaron por décadas los grupos caciquiles de la entidad, que a sangre y fuego (guardias blancas, policías corruptos, paramilitares) habían mantenido a raya a grupos opositores.

En la disputa por el poder, los tradicionales grupos caciquiles, así como los emergentes -zeferinismo y corrientes del PRD, ahora en el poder- han impuesto a su gente en distintos partidos políticos.

Los ex gobernadores priístas -un po-der avasallante, y tradicionalmente ligado a grupos de presión regional- han sido to-cados por el factor Z, por lo que han colocado a políticos afines no sólo en el PRI, sino en otros partidos, en busca de alcaldías y diputaciones que les permitan seguir ejerciendo el poder para cuidar sus intereses en las siete regiones de Guerrero, algunas con rezagos que datan de antes de la Revolución de 1910.

Duelo de caciques

Unos 400 guerrerenses, la mayoría hombres -sólo 29 mujeres- de PRD, PRI, PAN, PVEM, PT y el local Partido de la Revolución del Sur (PRS) disputarán el próximo domingo las 77 alcaldías. Los mismos institutos políticos postularon a 165 ciudadanos en busca de 28 diputaciones.

Los priístas, sin muchas posibilidades de triunfo en las plazas más importantes, han emigrado a otros partidos. Los que más han recibido a la ex militancia tricolor son el PRD y Convergencia.

En el puerto de Acapulco, el PRI tiene en Emilio Vizarretea un candidato a la alcaldía sin posibilidades, ya que las encuestas lo ubican en tercer o cuarto lugar. Incluso el aspirante ha ofrecido su apoyo -abierto y encubierto- a su ex compañero de partido y ahora candidato de Convergencia Luis Walton Aburto.

Destacados priístas de los grupos del ex gobernador Angel Aguirre Rivero y el ex alcalde de Acapulco, Manuel Añorve Baños -conocidos como los primos- apoyan a Walton Aburto.

Una situación similar ocurre en municipios de la Costa Chica, donde seguidores de estas corrientes políticas apoyan a los candidatos de Acción Nacional, como en Cuajinicuilapa.

Sin embargo, el aguirreísmo mantuvo a su gente en algunos distritos, como en el seis, con sede en Ometepec, donde el ex mandatario estatal impuso a su primo, Mateo Aguirre Arizmendi.

En el municipio de Tlacoachistlahuaca, bajo la influencia del ex mandatario y ahora diputado federal, la candidata del PRI a la presidencia municipal será Aceadeht Rocha Ramírez, a pesar de la oposición tradicional de los indígenas amuzgos que desde hace años mantienen un ayuntamiento popular paralelo.

Rubén Figueroa Alcocer, diezmado desde su salida del gobierno por la matanza de Aguas Blancas el 28 de junio de 1995, mantiene sus feudos políticos en la zona norte de la entidad, donde logró imponer a su gente.

En Iguala, por ejemplo, la localidad más importante en esa región, la candidata a la alcaldía es Silvia Romero Suárez. Sin embargo, el "cacique mayor" consiguió para uno de sus allegados, Eduardo Hernández Almazán, la candidatura del PVEM a la alcaldía de Acapulco (sin posibilidad alguna).

Hernández Almazán postuló como primer regidor de esa planilla a Rubén Robles Hurtado, hijo del ex secretario general de Gobierno, Rubén Robles Catalán, ejecutado el pasado 6 de julio, presuntamente por un grupo guerrillero.

En la Costa Grande y Tierra Caliente, el cacique Rogaciano Alba Alvarez -protegido de Rubén Figueroa y Héctor Vicario Castrejón, conocido por haber declarado la guerra a los campesinos ecologistas de la Sierra de Petatlán y Coyuca de Catalán- impuso a políticos afines en las candidaturas del PRI -partido de oposición con buen número de municipios de ese lugar-, como en Petatlán.

En esta región destaca la postulación del candidato a diputado del tricolor por el distrito 20, con sede en Arcelia, conocido militante del charrismo sindical y dirigente estatal del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, Job Bernache Guzmán, ligado al figueroísmo.

Las candidaturas priístas fueron acaparadas por el grupo ligado al ex gobernador René Juárez Cisneros y Hector Astudillo Flores, candidato perdedor en el pasado proceso electoral y hoy dirigente estatal del PRI.

Ambas formaciones, en conjunto con el grupo de Manuel Añorve Baños, mantienen la hegemonía en ese partido, que según sondeos y encuestas locales perderá el próximo domingo.

 
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