"Fox les tiene miedo o está amarrado" con esas empresas
Robo "a domicilio" a televidentes, afirman legisladores de PRD y PT
Diputados del PRD y del PT de la comisión especial que investiga los permisos otorgados por Santiago Creel cuestionaron que el gobierno federal no pueda poner freno a los ingresos millonarios de Televisa y Tv Azteca por los telejuegos, a los que calificaron de "robo a domicilio". También denunciaron que Televisa, en sus canales de difusión abierta, realiza operaciones de "prostitución en las pantallas" mediante llamadas telefónicas a mujeres semidesnudas que se promocionan en esa empresa.
El legislador perredista Arturo Nhale, quien descubrió que uno de los permisos de Santiago Creel a Televisa es para operar bingo por televisión, afirmó que comparados con los ingresos de ambas televisoras, los derechos que se pagan a la administración federal por cada sorteo "son una bicoca".
Señaló que Vicente Fox "les tiene pánico a las dos televisoras o está muy amarrado con ellas para permitir ese jugoso negocio, a costa del bolsillo de los televidentes".
Los telejuegos, agregó, constituyen "un jugoso negocio para Televisa y Tv Azteca. Basta con que en cada hogar se tenga una televisión y un teléfono para que chicos y grandes le estén metiendo al azar a todo lo que da".
En este caso señaló que no se trata de estar en favor o en contra de la operación de juegos y sorteos en la televisión, sino de que son ilegales y "no hay autoridad, ni Gobernación, que aplique la ley, por lo menos para las televisoras".
Por su parte, el diputado Oscar González Yáñez, del PT, denunció que esos juegos tienen poca credibilidad y baja certeza para quienes participan desde su casa con la ilusión de ganar dinero en efectivo o automóviles de reciente modelo.
Estas operaciones tienen tres grandes deficiencias, evaluó: las ganancias son altas para las televisoras y los ingresos para el erario son irrisorios; no se pueden verificar las bases de la operación ni las ganancias que implican para Televisa y Tv Azteca, y tercero, esto es un robo a domicilio, porque es muy difícil saber y comprobar quiénes son los ganadores, y si en realidad existen.
"Es un juego perverso, porque quién verifica y garantiza que hay ganadores; cómo se puede saber cuántos concursaron, y un tema de fondo: no aclaran bien, a la gente que participa, el costo real de las llamadas. Este es un fraude abierto y se aplica el clásico argumento de que no se leyeron las letras chiquitas del contrato", afirmó.
González Yáñez también denunció que en los horarios nocturnos de Televisa se transmiten programas donde se anuncian contactos sexuales, y para ello basta marcar un número de teléfono. "Es la prostitución llevada a la pantalla", indicó.