Asalto y agresión a ejidatario de Chamizal, origen de la balacera
Disputa entre indígenas de Ocosingo deja 3 personas fallecidas y 300 desplazadas
Tuxtla Gutierrez, Chis., 6 de agosto. Tres indígenas muertos, dos lesionados y al menos 300 personas desplazadas es el saldo de un enfrentamiento ocurrido entre habitantes de los ejidos Chamizal y Laguna Semental, ambos del municipio de Ocosingo.
De acuerdo con la información oficial, la tarde del jueves tres habitantes de Laguna Semental arribaron a Chamizal, donde asaltaron y agredieron a Mario de Ara López.
Amigos de la víctima pidieron ayuda a familiares y amigos y fueron a buscar a los agresores, a quienes localizaron y acribillaron con armas de fuego. Antes de morir, uno de los asaltantes lesionó a Jerónimo de Ara Guzmán, padre del asaltado.
Tras ultimar a los presuntos asaltantes, unos 350 habitantes de El Semental se retiraron a comunidades cercanas con todo y sus familias, ante el temor de sufrir más represalias.
Con el apoyo de la Policía Sectorial, la Agencia Estatal de Investigación y personal de Servicios Periciales se llevó a cabo el levantamiento de cuerpos y se aplicaron medidas cautelares.
La Fiscalía General del estado señaló hoy que inició las investigaciones para esclarecer estos hechos y que no se permitirá que ciudadanos hagan justicia por su propia mano, porque esto genera impunidad.
Los conflictos entre los habitantes del poblado Chamizal, quienes se identifican como simpatizantes del Ejército Zapatista de Liberación Nacional, y comunidades vecinas, datan de hace una década.
En agosto de 2002 se enfrentaron con militantes de la Organización de Cafeticultores de Ocosingo.
Pide el Centro Fray proteger a familiares de ex edil asesinado
Por otra parte, el Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de las Casas (CDHFBC) solicitó a los gobierno de Chiapas y federal aplicar de manera urgente las medidas cautelares necesarias que garanticen la integridad física y la vida de los familiares y colaboradores de Andrés Torres Herrera, ex alcalde perredista de Marqués de Comillas y dirigente del Movimiento Campesino Regional Independiente, asesinado el pasado 31 de julio por presuntos narcotraficantes.
A raíz de ese hecho, habitantes de Zamora Pico de Oro, de donde era el también dirigente perredista, han sido amenazados de muerte, dijo el organismo, ante quien María Isabel Ramos Jerónimo, viuda de Torres Herrera, y otros vecinos acudieron a hacer esa denuncia.
Ramos Jerónimo recordó que el 31 de julio se realizó una asamblea general para cambiar autoridades ejidales. "Llegamos tarde, ni pudimos votar. Ganaron ellos. Nos íbamos a regresar el lunes a las tres de la madrugada".
Dijo que su cuñado Andrés y su hermano Carlos Torres Herrera salieron a mover la camioneta; en ese momento les dispararon desde un vehículo blanco. Los agresores dieron otra vuelta, pasaron muy despacio y desde la ventanilla le dispararon dos tiros en la frente con arma R-15, como a un metro de distancia, causándole la muerte inmediatamente, luego, la camioneta (de los pistoleros) arrancó "muy fuerte".
El CDHFBC asegura que testigos reconocieron a Eduardo Dávila y a Jacobo Olivares Pérez El Hueso -quienes viajaban en una pick-up verde-, como quienes siempre hostigaron a Torres Herrera, los cuales son conocidos porque controlan el narcotráfico, la política y el cacicazgo en la zona.