Número 109 | Jueves 4 de agosto de 2005
Director fundador: CARLOS PAYAN VELVER
Directora general: CARMEN LIRA SAADE
Director: Alejandro Brito Lemus

El 11 de julio pasado se incluyeron nuevos fármacos en el cuadro básico de medicamentos del sector salud, entre ellos el levonorgestrel, sustancia activa de la píldora anticonceptiva poscoito. El hecho despertó la crítica de la Iglesia Católica; las mismas opiniones que año y medio atrás, cuando el medicamento se incluyó en la Norma Oficial Mexicana de Servicios de Planificación Familiar, las mismas que se expresan siempre que se presenta algún avance médico en materia de salud reproductiva. La novedad ahora fue el pronunciamiento gratuito del secretario de Gobernación “a favor de la vida” y contra la ciencia “como arma de destrucción masiva”. El funcionario mostró, una vez más, su peligrosa proclividad a anteponer su fe a su responsabilidad pública.

El debate dio pie a buen número de declaraciones antológicas y no pasó a mayores. Pese a que el cardenal Norberto Rivera aprovecha cada oportunidad para condenar la política pública de salud reproductiva, la inclusión de la píldora en la canasta básica de fármacos es una decisión de Estado, tomada luego de años de análisis y discusiones de carácter técnico y científico.

Pero la derrota de la Iglesia en el debate no garantiza el cumplimiento de la norma. Preocupan las declaraciones de funcionarios conservadores de estados como Guanajuato y Jalisco que hablan de falta de recursos para incluir la píldora del día siguiente entre sus insumos. De igual forma, es necesario un proceso de capacitación en las procuradurías de todo el país que permita vencer prejuicios y llenar vacíos de información, no sólo entre el personal de los Ministerios Públicos encargados de atender a víctimas de delitos sexuales, sino, incluso, entre los funcionarios de alto nivel.
Cuando el uso de la anticoncepción poscoito se haga cotidiano se habrá dado un gran paso en el proceso de respeto y reconocimiento de los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres.