La legitimidad de los comicios de 2006 no está en riesgo: María de los Angeles Fromow

Descartadas, las llamadas elecciones de Estado, asegura la fiscal electoral

El marco regulatorio vigente limita el campo de acción de la Fepade, afirma su titular

GUSTAVO CASTILLO GARCIA

La Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Electorales (Fepade) tiene un campo de acción restringido para prevenir y sancionar los delitos electorales, ya que el marco regulatorio vigente se "construyó" en la década de los 90, cuando la realidad del país era muy distinta, dijo su titular, María de los Angeles Fromow Rangel.

En entrevista con La Jornada, la funcionaria de la Procuraduría General de la República (PGR) sostuvo que si bien "hoy es muy difícil que se cometan delitos como el embarazo de urnas, carruseles o la alteración de resultados, e incluso se descartan las llamadas elecciones de Estado" en favor de un candidato, en cambio preocupan asuntos como la transparencia y la equidad.

-¿Cuáles serían para usted los grupos que más atención requieren para que no sean manipulados electoralmente?

-Los indígenas, los adultos mayores y los jóvenes son grupos en los que se requiere hacer conciencia del valor de su voto; la necesidad de una cultura de la denuncia, de la legalidad. Por esa razón la Fepade trabaja en la elaboración de mecanismos que permitan acercarnos y establecer plena comunicación con estos sectores.

-¿Han detectado impunidad electoral?

-Diría que hay desconocimiento y falta de participación activa que permita una denuncia a tiempo, porque Fepade tiene dos vertientes, la de inhibir cualquier acto ilícito mediante la conciencia ciudadana, e investigar aquellos hechos en los que existe un agravio al proceso electoral por la comisión de un ilícito.

-El Congreso ha aprobado reformas en el ámbito electoral; ¿son suficientes para castigar todos los delitos en la materia?

-Fepade trabajó durante cuatro años en un proyecto de reforma, y para que se comprendiera la necesidad de estos cambios legislativos con el propósito de rendir buenas cuentas a los ciudadanos.

"No se ha concretado la reforma penal electoral, pero seguiremos buscando la forma de que esas modificaciones se alcancen, porque hoy Fepade se ve en el impedimento de procurar justicia por no existir un marco adecuado a la realidad. Se debe reconocer que nuestros tipos penales fueron construidos en los años 90, y era una realidad muy distinta a la que estamos viviendo. La institución busca otros mecanismos que le permitan mejorar su tarea."

-¿Fepade tiene las garras y los dientes necesarios para castigar a los delincuentes electorales?

-Necesitamos un mejor marco regulatorio, por ello buscamos que la fiscalía tenga mayor campo de acción, a la par de la creación de una cultura de la legalidad y la denuncia, porque el tema de la prevención es una apuesta muy importante.

-Antes se hablaba de urnas embarazadas, de carruseles, de mapachería electoral. Hoy, ¿cuáles son los delitos a combatir?

-Que exista equidad en la contienda, es decir, que todos los actores jueguen con los mismos recursos, que exista transparencia en su actuar. Así, muchos de los temas que preocupaban en los años 90, como la alteración de resultados o el robo de urnas, no digo que no puedan ocurrir, pero son cosas que están muy acotadas, por la gran vigilancia que se tiene en los procesos.

"Sin embargo, en ese contexto hay dos asuntos que me preocupan y que pueden ser elementos clave: la transparencia y la equidad. Esos son los temas que están a debate en la opinión pública."

-¿Considera la compra y coacción del voto y el desvío de recursos como dos de los más grandes problemas que pudieran presentarse?

-Esos son dos de los temas que han apuntado los actores políticos y los ciudadanos. La experiencia de Fepade, en estos años recientes, ha permitido saber que son temas que surgen en los procesos. Por ello se ha estado trabajando para que los programas sociales no sean utilizados de manera indebida y que los servidores públicos no desvíen recursos.

"Hemos estado uniendo esfuerzos para evitar esos fenómenos y que luego se utilicen como argumento para cuestionar la legitimidad de los resultados del proceso electoral del 2006."

-¿Qué tan en riesgo podría estar la legitimidad de los comicios de 2006?

-No creo que exista ese riesgo, porque hoy México cuenta con instituciones electorales capaces de dirimir las controversias que se presenten, y con aptitud para sancionar a aquellos que vulneren la ley.

"Considero que nuestro país tiene los instrumentos para asegurarse mecanismos que impidan se ponga en duda la legitimidad del proceso y sus resultados. La clave para ello está en que todos los ciudadanos, actores políticos e instituciones respetemos el marco de la ley", concluyó.