El grupo Tlalnepantla que él dirige favoreció a ex priístas para ocupar cargos
Panistas tradicionales desdeñan a Mendoza Ayala
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Rub�Mendoza Ayala, candidato panista al gobierno del estado de M�co, en gira por Tonatico FOTO Ap
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Naucalpan, Mex., 23 de junio. La militancia panista de abolengo no acepta el ascenso de su candidato al gobierno del estado de México, Rubén Mendoza Ayala, y le ha hecho vacío político en la campaña. Este repudio puede explicarse a partir de la irrupción en la escena política del grupo Tlalnepantla, dirigido por el ex alcalde, que dividió al PAN mexiquense, partido que tradicionalmente controla ayuntamientos del poniente mediante alianzas de familias y grupos de militantes afines.
La fuerza del grupo se consolidó en Tlalnepantla cuando Ruth Olvera Nieto, con el apoyo de Mendoza Ayala, ganó la alcaldía en 1996. Tres años después este político la sucedió en el cargo, y en la actualidad gobierna ahí Ulises Ramírez Núñez, identificado con el abanderado a la gubernatura.
El ascenso del grupo Tlalnepantla fue visto por el panismo con desconfianza, pues la organización llevó a Acción Nacional a ex militantes del PRI, muchos colocados en cargos públicos en el gobierno municipal, desplazando a blanquiazules ortodoxos.
La familia Durán Reveles fue de las principales damnificadas. José Luis, ex subsecretario de Gobernación y ex alcalde de Naucalpan, perdió ante Mendoza Ayala la elección interna para candidato a la gubernatura mexiquense.
Hijo de Raúl Durán, uno de los fundadores del PAN en la región poniente del estado de México, José Luis era visto por la militancia de viejo cuño como el candidato natural. Fue dirigente estatal de Acción Nacional y en 1996 operó como ariete para derrotar al PRI en municipios del poniente estatal.
Desde Naucalpan los Durán ampliaron su influencia hacia ayuntamientos de las regiones norte y poniente, donde amigos cercanos y militantes ocuparon cargos públicos en administraciones locales. Alcaldes, diputados y funcionarios de primer nivel se identificaron con la familia.
Ahora los hermanos de José Luis, Alfredo y Patricia Durán Reveles, se desempeñan como alcalde de Cuautitlán Izcalli y diputada federal, de manera respectiva. María Antonieta Becerril Ayala, cuñada de Alfredo, es tesorera municipal de Naucalpan.
Los diputados Gonzalo Alarcón, Gustavo Parra, Manuel Gómez Morín, Moisés Alcalde Virgen, Adriana Carrillo, Edgar Olvera y el actual dirigente del PAN, Francisco Gárate Chapa, se identifican con la familia Durán, que hasta 2003 tuvo influencia en ayuntamientos como Ecatepec, Coacalco, Cuautitlán Izcalli, Atizapán de Zaragoza, Naucalpan y Toluca.
Otras familias, como los Vicencio, Alcalde Virgen, Olvera y Becerril, aceptaron la influencia de los Durán, de la que destacó José Luis, quien ha tenido apoyo del senador Diego Fernández de Cevallos, de quien es compadre, y del ex secretario de Gobernación Santiago Creel.
El grupo Tlalnepantla vino a romper la armonía del PAN. Su punto culminante ocurrió cuando una vez postulado candidato, Mendoza Ayala incorporó a su campaña a Isidro Pastor Medrano, ex dirigente estatal del PRI, quien había sido el principal operador político del gobernador Arturo Montiel Rojas.
Pastor, como coordinador de la bancada del PRI, fraccionó en 1997 a la legislatura panista, logrando la renuncia de al menos 13 blanquiazules. Asimismo, presentó denuncias penales contra funcionarios del gobierno de Vicente Fox y la esposa de éste, Marta Sahagún, a quienes acusó de delitos electorales en los comicios locales de 2003.
La fuerza de Mendoza frente a las familias panistas desplazadas también radica en el apoyo recibido de alcaldes de Nicolás Romero, Coacalco, Tlalnepantla e inclusive Naucalpan, Rafael Barrón, Julieta Villalpando, Ulises Ramírez Núñez y Angélica Moya Marín, respectivamente.