Su movilización, totalmente loca; incrementan el brutal rezago educativo: Pablo Salazar

Continúan despidos de profesores paristas chiapanecos; ya suman 400

El PRD exige frenar la represión, reinstalar a los primeros 200 mentores cesados y liberar a 7 dirigentes del gremio

El conflicto cumplió 17 días

DE LOS CORRESPONSALES Y REPORTEROS

El gobierno de Chiapas continuó este día con el despido masivo de maestros de la sección 7 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) y rescindió el contrato a 200 más, con lo que suman 400 los profesores destituidos desde que comenzaron el paro laboral, el pasado 2 de mayo.

En la ciudad de México, la dirigencia nacional del PRD -que formó parte de la coalición que llevó a Salazar al poder- exigió la reinstalación de los primeros 200 mentores cesados y la liberación de siete líderes magisteriales detenidos a raíz de la movilización.

"Compartimos el pliego petitorio que la sección magisterial planteó al gobernador Pablo Salazar Mendiguchía", señaló la dirigencia del sol azteca. "Nos oponemos a que continúen los actos de represión que se han acentuado a partir de que profesores se negaron a suspender la asamblea permanente", indicó.

En la capital de la entidad, Tuxtla Gutiérrez, el secretario de Educación en Chiapas, Alfredo Palacios, explicó que mientras los mentores en paro no regresen a las aulas la dependencia a su cargo continuará aplicando sanciones administrativas y económicas.

El funcionario llamó a los profesores federalizados que aún no reanudan labores a que a la brevedad retomen las actividades escolares en sus centros de trabajo, con el argumento de que la administración estatal, que encabeza Salazar Mendiguchía, "ha atendido oportunamente en el marco del derecho las peticiones planteadas por la representación sindical".

Por este conflicto -que hoy cumplió 17 días-, luego de un intenso debate en el que algunos diputados locales cuestionaron los despidos masivos de que están siendo objeto los mentores, el pleno del Congreso local citó a Palacios, para que "en breve dé una explicación sobre la situación laboral de los maestros".

Los paristas a su vez continuaron con el plantón en la plaza principal de Tuxtla Gutiérrez y se espera que un grupo se traslade a la ciudad de México, donde prevén acudir a la Cámara de Diputados a exponer su situación.

En San Cristóbal de las Casas, 142 trabajadores de la sección 40 del SNTE, que abarca varios municipios de los Altos de Chiapas y hasta ahora se ha mantenido al margen del conflicto magisterial, acordaron parar labores y participar en la marcha que este miércoles por la tarde se efectuará en esa ciudad en apoyo a sus compañeros federalizados y a los empleados del sector salud.

En Tapachula, trabajadores de la educación y el sector salud marcharon por las principales calles de esa localidad para repudiar las "actitudes represivas" de las autoridades estatales y denunciar los gastos millonarios que realizan en campañas de desprestigio contra ambos gremios, en lugar de invertirlos para mejorar las escuelas.

Nuevas movilizaciones del CNTE

Maestros de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación, señalaron que en los próximos días emprenderán nuevas protestas y paros indefinidos de labores en diversas entidades, entre las que se incluyen Michoacán y Oaxaca, ante lo que calificaron de "magro" incremento salarial, y la negativa de los gobiernos estatales a presentar "propuestas viables" para abatir el rezago educativo.

Pedro Ramírez Vázquez, integrante de la sección 36 del valle de México, aseguró que el incremento salarial otorgado este año a los trabajadores de la educación, inclusive docentes y personal de apoyo, fue "sólo una estrategia mañosa y una acción discriminatoria porque no todos los sectores del sistema educativo recibirán la misma retroactividad en el pago de sus salarios".

Indicó que el personal de apoyo a la educación es el más afectado, a pesar de que es el sector que percibe la remuneración económica más baja y sólo se le otorgó 3.3 por ciento de alza directo al salario y 1.2 por ciento en prestaciones.

Angeles Mariscal, Elio Henríquez y Rodolfo Villalba, corresponsales; Laura Poy y Renato Dávalos, reporteros

El gobernador de Chiapas, Pablo Salazar Mendiguchía, acusó a los dirigentes de la sección 7 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), en paro de labores desde hace 17 días, de "incrementar el brutal rezago educativo" que padece la entidad, y señaló que "en 25 años de luchas gremiales se han perdido 10 años efectivos de clases". Criticó también a los maestros de dicha sección por trabajar "únicamente 80 de los 200 días" marcados como obligatorios en el calendario escolar para regiones rurales.

En entrevista radiofónica con el periodista Joaquín López Dóriga, el mandatario dijo que además de que el nivel prescolar se ha visto afectado con la suspensión de clases, miles de niños de comunidades indígenas con niveles de desnutrición han dejado de recibir los desayunos escolares, por lo que de continuar el conflicto, previó "daños irreversibles", como las toneladas de alimentos que se están echando a perder en los almacenes.

Salazar Mendiguchía calificó la movilización de los mentores -en la que según él participan 10 mil de los 66 mil maestros chiapanecos, en perjuicio de 100 mil niños de los aproximadamente un millón 200 mil del nivel básico- de "paro totalmente loco", una aventura sin soporte de una autoridad competente para declarar que la suspensión de actividades laborales es lícita.

Acusó a los dirigentes de la sección 7 del SNTE de "sentarse a negociar sin querer negociar" con las autoridades estatales, "administrando los tiempos", para desahogar su agenda "político-electoral" que nada tiene que ver con los temas de la educación en la entidad.

Reiteró que aun cuando los maestros insistan en mantener el movimiento, las autoridades estatales "no negociarán demandas absurdas", y aplicarán "todos los recursos legales que tengamos al alcance".

El gobernador aseguró que la actitud de los dirigentes sindicales es resultado de que en enero pasado la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) -organismo disidente del SNTE- celebró una asamblea donde acordó realizar un plan de acción para formar "un gran frente popular y una gran movilización social" que concluiría, en su etapa intermedia, el 20 de mayo en la ciudad de México, para ese día "declarar un paro educativo nacional que duraría el resto del año.

"La dirigencia sindical manejó en estos días que buscó un diálogo con el gobierno, pero sin obtener respuesta, lo cual no es cierto: se instaló la mesa desde marzo e incluso convocamos a la prensa a que fueran reuniones abiertas, por lo que ellos (líderes de la sección 7 del SNTE) se vieron obligados a presentarse, pero sin la intención de negociar", se quejó.