El organismo internacional está conformado por luchadores sociales
Enjuicia un tribunal civil a EU por los crímenes de lesa humanidad contra Cuba
Ampliar la imagen Olga Miranda, Juan Ba�os, Alfonso Sastre y Hebe de Bonafini, al comienzo del proceso contra el gobierno del presidente George W. Bush FOTO Mar�Luisa Severiano
El Tribunal Internacional Benito Juárez, conformado por luchadores sociales de Bélgica, Argentina, España, Panamá, México y otras naciones, comenzó ayer en esta ciudad a juzgar los crímenes de lesa humanidad cometidos por Estados Unidos contra Cuba.
Francois Houtart, quien ha participado en otros juicios como el Rusell, que se llevó a cabo también contra Estados Unidos por los crímenes de guerra en Vietnam, y el efectuado en Bruselas por los atropellos en Irak, es el presidente de ese tribunal. Es una instancia civil internacional que se encarga de juzgar las acciones mundiales del gobierno estadunidense.
El jurado está conformado por personajes como Hebe de Bonafini, representante de Madres de Plaza de Mayo, de Argentina; el sacerdote Miguel Concha, presidente del Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez; Alfonso Sastre, dramaturgo y escritor español, y Jorge Turner, ex embajador de Panamá en México.
También son jurado Juan Bañuelos, escritor mexicano; Guillermo Almeyra, periodista y académico de la UNAM y la UAM; Ifigenia Martínez, política mexicana; James Cockroft, escritor estadunidense, y Eva Forest, escritora y comunicadora del País Vasco.
El juicio empezó con la presentación de acusaciones contra el gobierno de Estados Unidos, entre ellas la ocupación ilegal e injusta de la base militar de Guantánamo, donde se ha instalado un centro de tortura ajeno a la legalidad internacional; la violación a la legislación en materia de lucha contra el terrorismo, al financiar, armar y encubrir grupos de ese tipo, como el caso de Luis Posada Carriles; el bloqueo comercial, que ha significado al pueblo cubano pérdidas por unos 121 mil millones de dólares; los 600 intentos de asesinar al presidente de Cuba, Fidel Castro Ruz, y la emisión de leyes extraterritoriales, como la Helms Burton y la Torricelli.
Correspondió al académico de la UNAM Enrique González Ruiz y al presidente de Asuntos Jurídicos y Constitucionales de la Asamblea Popular de Cuba, José Luis Toledo Santander, en su calidad de fiscales, plantear las acusaciones.
En tanto, el defensor de oficio Sergio Romero Ramírez -el gobierno estadunidense no nombró abogado para el juicio- negó los cargos al señalar que muchas acusaciones ocurrieron en décadas pasadas y la preocupación central de su defendido es garantizar los derechos de los cubanos.
El Foro Cultural Coyoacanense fue el escenario de la primera parte del juicio, el cual continuará hoy y mañana con la presentación de testigos y pruebas y el análisis y conclusión del proceso.
Ayer en la mañana se presentó como primer testigo el doctor Manuel Hevia Frasquieri, del Centro de Investigación Histórica de la Seguridad del Estado de Cuba, quien además de sostener que las pérdidas económicas de la isla por el bloqueo superan 121 mil millones de dólares, presentó como evidencia documentos desclasificados de la Agencia Central de Inteligencia.
En ellos se exponen las acciones que ha realizado Estados Unidos para desestabilizar a Cuba, como el intento de poner una bomba a la base de Guantánamo para culpar al gobierno de Fidel Castro o el proyecto de hacer explotar un barco con turistas estadunidenses y fingir que la acción fue realizada por ciudadanos cubanos, así como los múltiples intentos de asesinar al presidente Castro.
Luego de la presentación, el presidente del jurado decretó un receso y en la tarde llegó otro testigo de cargo: la doctora Mayda Alvarez Suárez, investigadora del Centro de Estudios sobre la Mujer de Cuba, quien habló de los impactos que ha tenido el bloqueo en niños, mujeres y familias de esa nación.
Señaló, por ejemplo, que la política estadunidense hacia la isla ha puesto en peligro a la población. Dio datos concretos al sostener que debido a actos realizados por bandas armadas por Estados Unidos para organizar actos terroristas en Cuba, han muerto 549 ciudadanos y 200 han quedando incapacitados; por agresiones biológicas, como la introducción del dengue hemorrágico, se vieron afectadas más de 344 mil personas y 116 mil tuvieron que ser atendidas en hospitales.
En tanto, por el bloqueo su país pierde más de mil 800 millones de dólares al año; se han afectado los niveles nutricionales de niños y mujeres embarazadas; se han tenido que comprar medicamentos, equipo hospitalario, tecnología y material de curación a precios más elevados. De igual forma, libros y material escolar, y no se ha contado con material suficiente para la construcción de viviendas y muchas otras afectaciones.
Lo que se pierde por el bloqueo serviría para adquirir la leche diaria para los adolescentes del país, porque sólo se puede cubrir la cuota para los niños, manifestó, a lo que el Concha preguntó cuál es el costo del lácteo para la población de su país. La respuesta fue: Cuba compra 20 litros a Nueva Zelanda a 6 dólares, y la tiene que traer de tan lejos y tan cara "gracias" a Estados Unidos.