Usted está aquí: domingo 3 de abril de 2005 Mundo Juan Pablo II, despedido en la Plaza San Pedro con aplausos

El Papa murió a las 13:37, hora de México, en su apartamento del Palacio Pontificio

Juan Pablo II, despedido en la Plaza San Pedro con aplausos

Luego que el arzobispo Leonardo Sandri anunció el deceso, las campanas doblaron en Roma

Han sido puestos en marcha todos los procedimientos para la sucesión, informa Navarro-Valls

REUTERS, AFP Y DPA

Ampliar la imagen Los miles de fieles reunidos en la Plaza San Pedro, consternados por el fallecimiento del l�r espiritual y jefe de la Iglesia cat�a FOTO Ap

Ciudad del Vaticano, 2 de abril. El papa Juan Pablo II, líder de más de mil millones de católicos en el mundo, murió este sábado a las 21:37 horas local (13:37, hora de México), en su apartamento privado del Palacio Pontificio, a los 84 años.

La noticia fue anunciada por el Vaticano y fue recibida con largo aplauso -gesto italiano de respeto- por las cerca de 70 mil personas reunidas en la Plaza San Pedro.

Las campanas doblaron después que arzobispo Leonardo Sandri comunicó a la multitud: "Nuestro santo padre, Juan Pablo, ha retornado al hogar del Padre".

El cardenal Angelo Sodano, secretario del Estado vaticano, entonó entonces el De profundis, en medio del silencio de la multitud ante la noticia.

El portavoz del Vaticano, Joaquín Navarro-Valls, anunció a su vez que "se han puesto en marcha todos los procedimientos previstos en la Constitución Apostólica Universi Dominici Gregis, promulgada por Juan Pablo II el 22 de febrero de 1996.

Karol Wojtyla, pese a su estado de salud, nunca pensó en renunciar a su cargo y quiso mantener los lazos con los fieles con apariciones públicas por la ventana de su apartamento, o de su cuarto en el hospital Gemelli.

Su última aparición ocurrió el pasado miércoles 30 de marzo, cuando saludó a los fieles desde su apartamento e intentó, infructuosamente, decir unas palabras, como le ocurrió el anterior domingo de Pascua, cuando sólo pudo emitir ruidos incomprensibles por la traqueotomía de emergencia que se le practicó semanas antes.

El Papa, quien durante años fue ágil atleta y poderoso orador, sufría artritis y mal de Parkinson, además de las secuelas de las tres heridas de bala que recibió en 1981 cuando el turco Alí Agca atentó contra su vida, ataque cuyo origen nunca quedó aclarado.

Todo lo anterior, aunado a una fractura del fémur provocada por una caída en la tina de baño, provocó que el Papa fuera reduciendo sus viajes, sus funciones y, finalmente, sus apariciones y declaraciones públicas.

En febrero pasado fue trasladado al hospital debido a una crisis respiratorias, y se le practicó una traqueotomía para aliviar los problemas respiratorio que sufría.

El pasado miércoles, los médicos que le asistían le insertaron una sonda de alimentación nasogástrica para tratar de darle fuerza, pues desde la traqueotomía perdió 19 kilos de peso.

Pero un día después sufrió una infección urinaria acompañada de fiebre alta, que poco después provocó una septicemia.

Desde el pasado viernes, y después de un paro cardiorrespiratorio, el Vaticano anunció que se había descartado toda posibilidad de recuperación de Juan Pablo II.

Según Navarro Valls, las últimas palabras del Papa, pronunciadas durante la tarde del viernes fueron dirigidas a los jóvenes, que con mucha frecuencia recibían menciones y mensajes especiales en los discursos del jerarca religioso.

El jefe de la Iglesia católica jamás escondió que contaba con los jóvenes para que lo acompañaran al umbral del tercer milenio del cristianismo.

"Ustedes son la esperanza de la Iglesia y del mundo. Ustedes son mi esperanza", declaró al comienzo de su pontificado, al anunciar su misión como pastor.

"El Papa, probablemente, se acordaba de los jóvenes que ha encontrado en todo el mundo a lo largo de su pontificado. Efectivamente, parecía referirse a ellos cuando de sus palabras se ha podido reconstruir la siguiente frase: 'Os he buscado. Ahora vosotros habéis venido a verme. Y os doy las gracias'", relató el vocero.

También trascendió que Juan Pablo II, también el viernes y antes de perder totalmente las fuerzas, logró escribir una pequeña nota, al parecer dirigida a monjas y curas polacos que le asisten desde hace años, que en una de sus frases decía: "Estoy contento, estadlo vosotros también".

Según fuentes del Vaticano, otro de sus últimos actos fue rendir homenaje a la virgen negra de Czestochowa, que se encuentra en el monasterio de Jasna Gora, en el sur de Polonia, al bendecir dos coronas de oro que donó para ella.

Las exequias del Papa se celebrarán a partir del próximo miércoles, informó el diario italiano La Repubblica.

La presidencia del consejo de gobierno de Italia declaró tres días de luto nacional, a contar de este domingo y el día de las exequias.

Las autoridades de Roma dispusieron imponentes medidas de seguridad y un plan especial para alojar a más de un millón de personas provenientes de todo el mundo para despedir al pontífice.

Tres grandes hospitales romanos están en estado de alerta, y se ha comenzado a instalar carpas y baños portátiles en las inmediaciones de la Plaza San Pedro.

En las instalaciones de la Feria de Roma fueron dispuestas más de 6 mil camas, y otras estructuras deportivas de la capital han sido abiertas para alojar a peregrinos.

 
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