Usted está aquí: miércoles 23 de febrero de 2005 Opinión CIUDAD PERDIDA

CIUDAD PERDIDA

Miguel Angel Velázquez

Preparan Los Pinos la puntilla contra López Obrador

El tejemaneje de la política

Habla del México bronco católico

DESDE LOS Pinos se ha empezado a gestar algo que en ese mismo lugar se supone será el golpe mortal contra Andrés Manuel López Obrador.

AHORA SE busca involucrar, meter al juego sucio al Senado. El tejido ya se inició, dicen quienes tienen información precisa sobre el asunto, y consiste en destituir a López Obrador inmediatamente después de que se le retire el fuero.

ALLI TRABAJAN ya, según nos cuentan, además de la gente de Los Pinos, algunos senadores del PAN que tratan de enganchar a los priístas para ir, de una vez por todas, a la muerte y entierro de López Obrador.

FRENTE A la falta de credibilidad de los panistas de Los Pinos, y del oprobio que cubre ya a buena parte del priísmo en la Cámara de Diputados, se pretende ahora llenar de la misma porquería al Senado. ¿Será posible? ¡Cuidado!

Arturo Villaseñor, ingeniero. Oregon, Estados Unidos

DE MOMENTO resido fuera de México, el cual dejé en busca no de una mejor calidad de vida, sino de "otra calidad de vida". He tratado de mantener contacto con mi país y mi querida ciudad de México, que vista desde fuera, y sin llegar a la comparación fácil, es una de esas ciudades en las que vale la pena vivir... bueno, a pesar del tráfico, la contaminación y esos otros accidentes que en una ciudad de esa dimensión son el pan nuestro de cada día. He leído, mirado, remirado y seguido con atención mucho del actual tejemaneje de la política nacional, y veo que no me equivoqué al sospechosear que el gobierno del cambio iba a servir para dos cosas: la primera ha sido evidente; la segunda ya se ha ido hace tiempo por el drenaje. Es lamentable el entreguismo a los intereses de EU, la falta de oficio, de inteligencia para poner contrapesos ante tan importante e imponente vecino, así como de ma... dera política. Y podría seguir así, ad infinitum, pero el espacio es breve, el desencanto enorme y la realidad simplemente deprimente. Sé que como simple ciudadano, autoexiliado, veo pasar la enorme riqueza que les pertenece a nuestros hijos sin que se pueda hacer gran cosa. Ha habido mucho ruido al respecto del desafuero y ello es el botón de muestra más evidente de que hay más de cuatro en el gobierno de México que no saben lo que es ser hombrecitos -inteligencia aparte, la cual parece que brilla por su ausencia-, como es el caso del amiguito Santiago; otros ejemplares disfrutan vociferando porque se saben seguros de un fuero que están deseando (léase Diego F. de C.) le sea retirado a su más serio contrincante. Bueno, hay tantos, incluyendo a Fox, pero ese nefasto ejemplar (el personaje político que podría ser considerado el más involuntariamente trágico de todos), quien más saliva gasta cuando se disfraza de conciencia justiciera de México. No soy, en realidad, alguien que apoye a ultranza al bueno de AMLO, pero lo que aquí se mira es el proceder típico de quien detenta el poder. Ese poder que a cualquier nivel se impone y pasa sobre todo. Lo peor es que viéndolo bien, allá en México se han olvidado de lo delicado de la situación y de que al parecer la misma clase de gente que pensó que todo en Iraq sería rápido y limpio (¡vaya tragedia para quien lo vive cada día!), es la misma que cree que en México todo será cosa de unos días y todo será olvidado... Yo no lo olvidaría porque esa no es la justicia que quisiera para mí. Y sé de muchos que no lo van a olvidar, porque ya se ha acumulado tanta injusticia en contra de nuestro pueblo que no se necesita mucho -tal vez un desafuero sea suficiente- para despertar algo que no debiera ser despertado.

Fernando, ingeniero ([email protected])

POR LO que leo, su periódico está dispuesto a declarar la guerra a los católicos de México. Ni siquiera saben que es El angelus, bola de ignorantes. Ni ustedes ni los diputados que critican la libre expresión de las creencias religiosas. Pues mucho cuidado, a ustedes que les encanta hablar del México bronco les recuerdo que no hay México más bronco que el de los católicos perseguidos y aplastados en sus derechos. Andense con mucho cuidado, no se vayan a llevar el susto de su vida. (Correos resumidos).

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