En 14 años la industria local se contrajo 73 por ciento
Juguetes asiáticos acaparan 80% del mercado nacional
LAURA GOMEZ FLORES
La Nochebuena permitirá a la población capitalina renovar una pequeña parte del guardarropa de sus hijos y quizá ampliar su inventario de juguetes con un yoyo, un trompo, un carrito de plástico, un juego de mesa o de destreza, una batería de cocina o una muñeca de tela que producen las empresas nacionales, las cuales tienen que competir en desventaja cada año con los productos asiáticos, que controlan 80 por ciento del mercado de juguetes.
Para los padres de familia -buena parte de los cuales obtuvieron un incremento menor a dos pesos diarios en su minisalario- el precio de los juguetes de moda en las tiendas de autoservicio sólo es accesible si se atiende la sugerencia de comprarlo a pagos semanales o mensuales. Mientras, en el comercio informal, que vende principalmente productos chinos y al contado, adquirirlos sigue siendo casi inaccesible para las clases populares o un "albur", debido a que no ofrecen ninguna garantía, por lo que ya acuden a todo tipo de argucias y pretextos para "concientizar" a los menores de la crisis por la que atraviesan los Reyes Magos ante la proximidad del 6 de enero.
El desempleo y el bajo poder adquisitivo, que afectan a gran parte de los hogares, harán que la ilusión de los padres por cumplir los sueños de sus hijos tenga que esperar al menos un año más, y que se renueve la intención de ser mejores administradores para llegar al final de 2005 con algunos ahorros.
La desventaja de la industria juguetera nacional se ha visto cada vez más marcada debido a la falta de competitividad, ya sea en precio o inclusive en calidad, ante los productos asiáticos. Esta situación ha ocasionado que las empresas locales encaucen sus esfuerzos principalmente a la producción de trebejos de plástico, destreza y de mesa, sin incorporar tecnología de punta en los mismos, por lo que han dejado de llamar la atención de los pequeños.
Actualmente el mercado mexicano del juguete es de 2 mil millones de dólares anuales, de los cuales 65 por ciento van a parar a empresas extranjeras y 35 por ciento a la producción nacional, misma que ha ido en descenso ante la desaparición de 220 fábricas, de 1990 a la fecha, que representan casi 73 por ciento de las que había hace 14 años en el país, de acuerdo con cifras de la Asociación Mexicana de la Industria del Juguete.
El presidente de la Cámara Nacional de Comercio en Pequeño (Canacope), Enrique Ambriz Guerrero, reconoció que aunque la oferta nacional siempre ha estado acompañada de productos del exterior, nunca se había registrado el fenómeno actual, en el que el mercado está controlado en 80 por ciento por productos de procedencia asiática. Explicó que hace 10 años la llamada "competencia desleal" ocupaba sólo 40 por ciento del mercado, con productos provenientes principalmente de Estados Unidos y en menor medida de países como Japón, Taiwán, Indonesia, Tailandia, Hong Kong y China, pero en la actualidad los productos de procedencia asiática acaparan 80 por ciento del mercado a pesar de que no cumplen, según dijo, con las normas de calidad y seguridad, pero su precio es menor a los que tienen juguetes similares nacionales o de otra procedencia.
