Mueren al menos 32 personas en ataques de Tel Aviv

Tanques israelíes ingresan al norte de la franja de Gaza

THE INDEPENDENT, AFP, DPA Y REUTERS

Ciudad de Gaza, viernes 1º de octubre. Un centenar de tanques israelíes ingresó en las primeras horas de hoy al norte de la franja de Gaza después que el primer ministro, Ariel Sharon, dio luz verde al ejército para ampliar su operación en ese territorio palestino, donde el jueves murieron al menos 32 personas y hubo unos 130 heridos, en una de las jornadas más sangrientas.

Según fuentes de seguridad palestinas, 35 blindados ingresaron en Beit Hanun, otros 30 se dirigían a Beit Lahya y 30 más al sector oriental de Jabaliya.

Sharon pidió la noche del jueves al ejército que dé muestras de "agresividad" y lo autorizó a que continúe y extienda la operación que lanzó desde la noche del martes en la franja de Gaza, tras una reunión con su gabinete de seguridad.

Medios de prensa israelíes dijeron que la operación militar ampliada lleva el nombre Días de Arrepentimiento y tiene la finalidad de acabar con los disparos de cohetes Qassam por militantes palestinos contra Israel y las colonias judías de la franja de Gaza.

Antes, Sharon ordenó al ejército establecer una zona tapón en el norte de la franja para impedir más ataques con cohetes.

En una de las peores jornadas, al menos 32 palestinos murieron el jueves anterior, 11 de ellos en dos ataques contra el campo de refugiados de Jabaliya.

Una fuente militar israelí confirmó que un tanque disparó un obús en un concurrido mercado cerca de una escuela del campo de refugiados de Jabaliya. Testigos señalaron que el proyectil cayó sobre un grupo de palestinos, la mayoría adolescentes y niños, y el resultado fue de siete palestinos muertos y 24 heridos.

Por la noche, las tropas dispararon otro obús al campo de Jabaliya, con saldo de tres palestinos muertos, mientras que un cuarto perdió la vida a manos de los soldados.

El operativo aéreo y terrestre, que de hecho se intensificó el jueves tras la muerte el miércoles de dos niños israelíes por un cohete artesanal Qassam disparado por Ha-mas desde la franja de Gaza contra la ciudad de Sderot, al sur de Israel, incluyó las localidades de Beit Lahya y Beit Hanun, así como a Jabaliya.

Los directores de los dos principales hospitales de la franja de Gaza dijeron que recibieron 28 cadáveres y que el ejército de Israel tiene en sus manos los cuerpos de otros cuatro, lo cual fue confirmado por una fuente militar israelí, que dijo retener lo que definió como "cadáveres de cuatro terroristas palestinos", de acuerdo con Afp.

Del total de víctimas mortales, ocho eran activistas palestinos, además de dos soldados y una mujer israelíes. La cifra de heridos se ubicó en 129 personas.

Los dos soldados israelíes perdieron la vida en sendos ataques de miembros de Ha-mas en las cercanías de las colonias de Beit Hanun y Alei Sinaí.

La mujer israelí fue muerta por hombres armados cuando salió a correr por la carretera que une el asentamiento judío de Nissanit, de donde era, con otro cercano.

Nabil Abu Rudeina, consejero del presidente palestino, Yasser Arafat, afirmó que esta acción militar israelí "es un indicador peligroso que llevará al fracaso", y pidió al Consejo de Seguridad de la Organización de Naciones Unidas (ONU) y al cuarteto internacional para Medio Oriente intervenir inmediatamente para poner fin "a las masacres israelíes en la franja de Gaza".

Por su parte, el secretario general de la ONU, Kofi Annan, expresó su preocupación por el creciente número de muertos palestinos e israelíes durante los combates que se desarrollan en la franja de Gaza, y solicitó a las partes en conflicto el cese inmediato de la violencia.