Las estadísticas deben ser tomadas con reserva, señala investigador de la UAM

Revelará la SEP evaluación de primarias del DF, basada en "pruebas imperfectas"

"Error, haber utilizado exámenes de selección para estimar la calidad de ciclo escolar"

CLAUDIA HERRERA BELTRAN

La Secretaría de Educación Pública (SEP) dará a conocer en Internet el rendimiento escolar de cada una de las más de 2 mil primaria públicas del Distrito Federal, con base en resultados de pruebas que no fueron diseñadas con el propósito de medir la calidad de los planteles, sino para seleccionar a los estudiantes.

Felipe Martínez Rizo, director del Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE) -quien colaboró con la SEP en la elaboración de esta especie de ranking- admitió en entrevista que no fue una solución "óptima", y por eso las estadísticas se deben tomar con "reserva".

Manuel Gil Antón, investigador de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) y especialista en el tema, consideró que fue un error de la SEP haber usado los resultados de exámenes de selección para estimar la calidad del ciclo previo, y señaló que es mejor diseñar otras pruebas con ese fin.

La Subsecretaría de Servicios Educativos para el Distrito Federal diseñó el Sistema de Información para la Mejora Escolar (SIME) -el primero en su tipo en el país-, que permitirá comparar los resultados de cada plantel con las 10 mejores escuelas de la ciudad de México y con otras que se consideran similares por el nivel de escolaridad de los padres del alumnado.

El problema del SIME, que se difundirá en agosto, es que pretende medir la calidad de las escuelas basándose en los resultados que se obtuvieron en el Instrumento para el Diagnóstico de Alumnos de Nuevo Ingreso a Secundaria.

El otro "punto débil" del SIME, explicó Martínez Rizo, es que las pruebas no son exactamente comparables en el tiempo. A pesar de eso, la SEP presenta gráficas que comparan los resultados que obtiene cada plantel escolar de 2000 a 2002.

Por ello reconoció que este sistema se basa en "pruebas imperfectas", pero dijo que por ahora son las únicas disponibles y que por ello se debe buscar mejorarlas.

Señaló que la SEP y el INEE tenían tres opciones: "difundir los datos disponibles advirtiendo que tienen imperfecciones para que se tomen con reserva; no difundirlos y esperarse a contar con mejores resultados, o dar a conocer la información sin hacer ninguna advertencia".

Al final se decidieron por la primera alternativa, porque, insistió, es necesario dar información a la sociedad.

Gil Antón criticó esta postura: "yo preferiría que en vez de dar a conocer la información que se tiene sin calibrar su pertinencia, se esperase para tener datos más confiables".

Señaló que la utilización de estas pruebas puede llevar a los padres de familia a tomar decisiones erróneas sobre dónde inscribir a sus hijos, creyendo que la SEP midió con los instrumentos adecuados la calidad de la educación.

El investigador dijo que cuando se hacen comparaciones de este tipo se hace creer que la escuela es la única responsable de los resultados, siendo que intervienen otros factores, como el capital cultural de la familia, el contexto socioeconómico, el ambiente escolar y la preparación de los profesores.